14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

2051: Odisea de un país en el tiempo

Mario B. Alonso Icabalceta

Es una temática que se desarrolla en un poco más de medio siglo. La temática comienza al amanecer de una nueva era y se hace un corte en una puesta de Sol, transcurrida la primera mitad del siglo XXI, un poco más allá del año 2050. Un clásico del cine produjo hace algunas décadas la película “2001 Odisea del Espacio”, futurismo en su época el cual ha sido ampliamente superado por la evolución del mundo. La temática a la que me estoy refiriendo y usando dicho futurismo, hoy me permitiría llamarla “2051 Odisea de un país en el tiempo”.

Al momento del corte en el tiempo antes referido, en los albores de la segunda mitad de este siglo XXI, el presidente de ese país y miembro del Partido Renacentista Nacional, en el mensaje de inauguración de su sexenio de gobierno, presentó una evaluación de dicho país, del cual me permito resumir lo siguiente:

El país de que nos ocupamos:

– ha obtenido la riqueza material y espiritual de sus habitantes e instituciones, obviamente haciendo desaparecer la correspondiente pobreza de los mismos;

– ha logrado la dignificación como ser humano de todos sus miembros;

– ha propiciado y obtenido un excelente nivel de vida y de bienestar para todos, aumentando en un tercio las expectativas de vida;

– ha logrado una amplia y fuerte base de desarrollo sostenido económico, financiero, político, social, cultural, ambiental;

– ha desarrollado una serie de valores espirituales, morales y humanos por sobre casi todos los países;

Señoras y señores, nicaragüenses: aunque ustedes no lo crean, ese país es nuestra Nicaragua, un poco más allá de la primera mitad del siglo XXI.

Y, por supuesto, se preguntarán ¿cómo ha sido eso posible? Y la respuesta rápida es: los nicaragüenses de la época trabajaron el entonces presente para cosechar el futuro. Y la respuesta explicada pero resumida, reza así:

Durante los siglos XIV, XV y XVI, tuvo lugar en Europa una gran reforma intelectual que impulsó con vigoroso desarrollo el arte, las ciencias y las letras. Quienes apoyaron ese movimiento fueron llamados renacentistas y quienes se opusieron, obscurantistas.

En el devenir de los difíciles días de finales del milenio pasado y de principios de este milenio, y con la experiencia del renacimiento, un grupo de nicaragüenses comenzó a llevar a cabo una gran reforma intelectual, personal, axiológica, social e institucional que impulsó con gran vigor el cambio para el desarrollo de Nicaragua y de los nicaragüenses. Entre otros aspectos:

– transformaron y eficientizaron al Estado en sus tres elementos constitutivos: el poder o Gobierno, la población y el territorio;

– trabajaron con coherencia, eficiencia, transparencia y equidad en todos los diferentes quehaceres del ámbito personal, social, nacional e internacional;

– decidieron trabajar con solidaridad humana y social, con diálogo y espíritu constructivo y no destructivo y sin envidias;

– desecharon el combate a la pobreza como tal y adoptaron el del desarrollo de la riqueza con enfoque social, de la producción, de la educación y de los valores genuinos del género humano;

– promocionaron y apoyaron la producción e inversión, incluyendo el desarrollo de la competitividad, la preparación de un sistema fiscal orientado tanto al desarrollo como a asuntos presupuestarios, y la creación y fortalecimiento del mercado de capitales y del sistema financiero bancario;

– crearon una amplia y fuerte base institucional y legal, incluyendo seguridad y aplicabilidad jurídicas;

– convirtieron al sector privado en elemento relevante para el desarrollo, coordinado con el sector público, siendo éste estratega, facilitador, promotor activo de dicho desarrollo;

– ese grupo de nicaragüenses también logró un entente sobre los objetivos nacionales por parte de todos los actores comprometidos y participantes en el desarrollo del país;

– pero principalmente llevaron a cabo un gran cambio de valores: primero a nivel personal, luego a nivel familiar, para transformar así los valores sociales y nacionales. Como parte de esa transformación se desarrolló la educación en todos sus ámbitos y niveles, incluyendo capacidad gerencial y de correr riesgos medidos, pasando del enfoque de timidez de hacer y de desarrollo agro-exportador a la era de la información ilustrada y del hacer pro-activo en beneficio del país.

Así explica la historia el renacentismo nicaragüense en aproximadamente medio siglo.

* Resumen del discurso pronunciado en la II Promoción del Programa de Maestría Ejecutiva en Gerencia Empresarial, de la Universidad Thomas More, 12 de agosto de 2000, en el Teatro Rubén Darío, Managua.  

Editorial
×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí