En medio de las presiones de Estados Unidos contra el tráfico de migrantes que promueve el régimen Ortega Murillo a través del Aeropuerto Internacional de Managua Augusto C. Sandino, en los primeros cinco meses del 2024 la cantidad de viajeros que entró a Nicaragua por vía aérea y se quedó, para seguir por tierra su travesía hacia Estados Unidos, se redujo en alrededor de 10 por ciento con respecto al mismo periodo del año pasado. Esta leve reducción coincide con una disminución similar en la cantidad de migrantes irregulares detenidos por entrar sin visa a Estados Unidos.
Según el más reciente reporte del Banco Central de Nicaragua (BCN) en mayo entraron al país 66,300 personas por vía aérea, pero del total solo 51,800 se fueron en avión. Eso implica que 14,500 personas se quedaron para utilizar el mecanismo establecido por el régimen Ortega Murillo para acortar su travesía hacia Estados Unidos, que implica volar a Managua y luego desde aquí seguir el viaje por tierra hacia el norte.
Con esas 14,500 personas que en mayo usaron esa estrategia, suman 35,000 las que en los primeros cinco meses del año se beneficiaron del puente aéreo de Managua para agudizar la crisis migratoria que enfrenta Estados Unidos en su frontera sur, pero también para acumular ganancias.
La cantidad de usuarios del puente aéreo que reporta el BCN entre enero y mayo es menor en 3,600 personas, en comparación con los 38,600 que en los mismos meses del año pasado usaron el aeropuerto de Managua para acortar su viaje hacia el norte. Cabe mencionar que el año pasado, el segundo semestre fue cuando más viajeros utilizaron esta ruta.
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Se reduce tráfico de migrantes irregulares
Este mecanismo se configuró en noviembre de 2021 con la suspensión del requisito de visa a los cubanos y el establecimiento de una ruta aérea entre La Habana y Managua operada por la venezolana Conviasa. Desde entonces, la lista de países a los que se les suspendió el requisito de visa creció considerablemente y a los cubanos se sumaron inicialmente caribeños y suramericanos, y luego europeos, asiáticos y africanos.
En total, entre 2022 y los primeros cinco meses de 2024 unas 663,700 personas habrían usado la terminal aérea de Managua para acortar su travesía hacia la unión americana. De mantenerse la tendencia de reducción de los primeros cinco meses del año, se podría concluir que finalmente las sanciones están frenando este mecanismo que en los dos últimos años metió mucha presión a la crisis migratoria que enfrenta la administración de Joe Biden y que es uno de los temas que ha polarizado la elección presidencial estadounidense.
Esta reducción puede ser el resultado de las presiones. En los últimos meses Estados Unidos extendió a diversas personas y empresas la restricción de visa, que aplica desde noviembre de 2023 a los involucrados en vuelos chárter que usan la terminal internacional aérea de Managua como puente para acortar su viaje hacia Estados Unidos. Esto redujo considerablemente la llegada de estos vuelos a Managua, que el año pasado promediaron hasta 15 por días.
¿Es efecto de las presiones?
El solo anuncio de la restricción de visa hecho en noviembre del año pasado provocó efectos. Los primeros vuelos chárter que cesaron fueron los procedentes de las islas del Caribe, pero crecieron los de Europa, Asia y África. Sin embargo, en las últimas semanas también se redujeron, y con ellos la cantidad de pasajeros que según los registros del BCN ingresan al país por vía aérea. Con esta reducción también se achicó la brecha entre los que llegan por esa vía y los que se van.
Además de la menor oferta de vuelos, los migrantes podrían estar desalentados a emprender el viaje porque la administración Biden endureció su política con los migrantes irregulares. A las personas que llegan a los puestos fronterizos sin una cita previa en la aplicación CBP One las regresa a México y este a su vez regresa a muchos a la frontera con Guatemala. Además, desde hace varias semanas amenaza con deportaciones masivas.
Esto junto a una menor oferta de vuelos de la venezolana Conviasa, que de forma repentina anunció la reducción de sus frecuencias en la ruta Carcas-La Habana-Managua, está reflejado en la ligera reducción de la llegada de viajeros a Managua. Pero también a la frontera de Estados Unidos donde se frenó la tendencia alcista en el cruce de migrantes irregulares registrada en los últimos tres meses del año pasado y la estabilización de las cifras a los niveles del año pasado.
Menos migrantes entran a EE.UU.
Según reportes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por su siglas en ingles), en el primer semestre del 2024 detuvieron a 1.43 millones de personas que ingresaron sin una visa a ese país; la cifra es menor que en los mismos meses del año pasado cuando entraron 1.44 millones de personas.
Pero mientras Nicaragua reporta un leve descenso en el ingreso de migrantes por vía aérea, el movimiento terrestre sigue creciendo. Según las estadísticas del Instituto Nacional de Migración (INM) de Honduras en el primer semestre del año entraron a su territorio 248,035 migrantes irregulares procedentes de Nicaragua. Dicha cantidad duplica a las 135,493 migrantes irregulares que, en los mismos meses del año pasado, entraron a ese país procedentes de Nicaragua.
Según especialistas, estas cifras podrían bajar en los próximos meses porque desde el 1 de julio está cerrado el paso por la selva comprendida entre Colombia y Panamá, conocida como el Tapón de Darién, y a la vez las presiones de Estados Unidos están forzando a las empresas que realizan los vuelos chárter a reducirlos.