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Cuando el periodismo une tantos vigores dispersos

La crisis sociopolítica que vive Nicaragua desde abril de 2018 ha tenido efectos devastadores para varios sectores: la detención y destierro de sacerdotes de la Iglesia católica, la cancelación de la personería jurídica de más de tres mil organizaciones gubernamentales, el exilio de casi o más de un millón de habitantes y el primer país de la región sin un periódico impreso, además, de la peor crisis que ha enfrentado el periodismo independiente.

Pero si en algo son buenos los nicaragüenses es en no llorar por la leche derramada. Muestra de ello es que el ataque a la libertad de prensa y expresión, lejos de callar a los periodistas causó la creación de cerca de 30 medios. Además de un efecto que supongo no se esperaba y se miraba como una utopía: la unión de un gremio con el objetivo de sobrevivir y resistir a los ataques. La unión de estos vigores dispersos supongo será algo que los reconocidos estudiosos de la comunicación harán algún día y además de un gremio unido que se apoya deberá incluir la desaparición de las competencias rudas que tenían medios en años pasados.

Ya no existe aquel comparar portadas de los medios impresos para ver quién lo hizo mejor cada día, se va dejando de lado la lucha por la “primicia” y los medios empiezan a trabajar reportajes a profundidad en conjunto, aportando cada uno desde sus talentos y habilidades. Creo que este efecto no fue calculado, aunque el nicaragüense cuando le cierran una puerta siempre se las ingenia para abrir una ventana. El periodismo en el exilio tiene muchos retos, pero lo cierto es que han sabido ingeniárselas y unirse en medio de lo que les ha tocado enfrentar hasta ahora.

La desaparición de los medios impresos con la última publicación impresa de LA PRENSA parecía una victoria para quienes no deseaban escuchar más voces que las suyas, pero lejos de callar al periodismo fue un momento para ir consolidando un compromiso con el lema de “al servicio de la verdad y la justicia”. Es claro que los ataques a LA PRENSA tenían mucho de color político por lo que este medio ha representado para la historia de Nicaragua, pero nuevamente un efecto no calculado es que ha sido escuela de muchos periodistas que pueden criticar diferentes aspectos laborales, pero siempre reconocen lo aprendido en un medio de tanta trayectoria y la mayoría le tiene cariño.

Otro efecto inesperado es que por temas de seguridad los periodistas ya no se identifican, ya no está aquel orgullo de ver tu nombre en una nota de portada, aunque por la tarde en un puesto te envuelvan con el mismo periódico un aguacate. Ahora se trata más de reconocer las verdades reveladas, productos bien trabajados y medios de comunicación que sobreviven por el esfuerzo de equipo. Es cierto que el periodismo ha perdido mucho, pero también tiene una ganancia incalculable. Se quedan en este campo personas que aman lo que hacen, verdaderos comprometidos con la libertad de expresión y esos, esos son los imprescindibles.

Un estudiante me preguntó una vez por qué daba clases si me pagaban tan poquito y le dije que eso no lo hacía por lo que me pagaban, era más por preparar a las siguientes generaciones y contribuir con la formación de aquellos que años después transformarían el periodismo. El momento llegó y varios de esos jóvenes no me fallaron, se volvieron colegas, se convirtieron en comunicadores y creadores de contenidos, pero sobre todo profesionales con los ojos bien abiertos, que no se dejan engañar ni por un discurso ni por dinero. Con ellos estaré eternamente agradecida.

Para cerrar quiero recordar la edición especial de LA PRENSA que da muestra de una de las razones por las que se unen tantos vigores dispersos. En un recorrido por el río San Juan el equipo habló de lo que sentía al reportar en territorio nicaragüense, testimonios que mueven el piso de los que alguna vez ejercimos el periodismo, sobre todo al saber por qué siguen en una profesión tan difícil y tan golpeada: “Porque amamos el periodismo y amamos Nicaragua”.

La autora es licenciada en Ciencias de la Comunicación.

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