En una acción conjunta, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro, el Departamento de Estado y el de Seguridad Nacional de Estados Unidos publicaron un combo de sanciones al centro de capacitación ruso en Managua, a dos empresas mineras y emitieron restricciones de visas para funcionarios leales al régimen, así como una advertencia a la industria de viajes que mueve migrantes que buscan llegar a EE. UU. por medio de Nicaragua.
La OFAC sancionó este miércoles al Centro de Capacitación del Ministerio del Interior de Rusia en Managua, a la Compañía Minera Internacional, Sociedad Anónima (Comintsa) y a la empresa Capital Mining Investment Nicaragua, Sociedad Anónima (Capital Mining), por “manipular el sector del oro y beneficiarse de operaciones corruptas”.
De acuerdo con la información del Departamento del Tesoro, el centro de capacitación ruso “es una subdivisión con sede en Nicaragua del Ministerio del Interior del Gobierno de la Federación Rusa” y se dedica a entrenar a funcionarios de la dictadura Ortega-Murillo “bajo el manual de opresión del gobierno autoritario ruso”.
“Es un actor clave en la represión de la sociedad civil por parte del régimen nicaragüense y en la detención y encarcelamiento injustos de personas por expresar disidencia o ejercer pacíficamente sus derechos humanos y libertades fundamentales”, dice el documento de las sanciones.
Apunta a la relación con Rusia
Con su hijo Laureano Ortega Murillo al frente, la dictadura nicaragüense ha ido fortaleciendo su relación con la Rusia de Vladímir Putin. Constantemente el posible sucesor al poder viaja a reuniones con altos funcionarios de seguridad de Moscú para sostener encuentros, firmar acuerdo, entre otros.
Por ello la OFAC apuntó que Nicaragua es “uno de los principales socios de Rusia en Centroamérica”. Dentro de esos acuerdos firmados se instaló en Managua el centro ruso de capacitación, donde los funcionarios de Putin han capacitado a miembros de la Policía, “lo que ha permitido las brutales tácticas represivas del régimen”.
Lea también: Las opciones que tiene Ortega si quiere hacer realidad el “cuento chino” del Canal
Mineras bajo la operación de Laureano Ortega y Salvador Mansell
Mientras que las empresas auríferas están afiliadas al Gobierno y “generan ingresos para el régimen Ortega-Murillo”.
“El oro es el principal producto de exportación de Nicaragua, y esta acción tiene como objetivo degradar la capacidad del régimen Ortega-Murillo para manipular el sector y beneficiarse de las operaciones corruptas de Comintsa y Capital Mining”, dice la OFAC.
Sobre Comintsa, las autoridades norteamericanas afirman que es una de varias empresas alineadas con el régimen que operan en el sector aurífero de Nicaragua. Se le entregaron concesiones mineras luego de revocar la licencia de operación de otra empresa minera artesanal. “Se informa que Comintsa es propiedad y está dirigida por Salvador Mansell Castrillo, quien se encuentra bajo sanciones de la OFAC”, afirma el Tesoro.
Mientras que Capital Mining “es un intermediario en el sector aurífero controlado por Laureano Ortega Murillo y Mansell Castrillo”, quien “cobra a algunas empresas mineras de oro para hacer negocios en Nicaragua”.
Por medio de la capacitación que recibe de los rusos y los ingresos que genera al explotar el sector del oro, el régimen Ortega-Murillo “ha continuado su campaña antidemocrática de represión contra sus ciudadanos”, dijo el subsecretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, Brian E. Nelson.
Restricciones de visa a funcionarios
Adicional a las sanciones al centro ruso y a las mineras, el Departamento de Estado de los Estados Unidos emitió más de 250 restricciones de visa para funcionarios nicaragüenses, incluidos policías y personal paramilitar, funcionarios penitenciarios, fiscales, jueces y funcionarios de educación superior pública.
Asimismo se impuso la restricción a “actores no gubernamentales”, pero que actúan como tal en apoyar al régimen Ortega-Murillo en sus ataques a los derechos humanos y las libertades fundamentales, la represión de las organizaciones de la sociedad civil y su aprovechamiento de los migrantes vulnerables, refiere el Departamento de Estado.
De acuerdo con el Departamento de Estado, Daniel Ortega, Rosario Murillo y quienes están bajo su mando “continúan deteniendo injustamente a quienes abogan por una sociedad civil libre, la libertad religiosa y la libertad de expresión, y enriquecen su régimen mediante la explotación de migrantes vulnerables”.
Advertencia a la industria de viajes
Como parte del combo de sanciones, el Departamento de Seguridad Nacional publicó un aviso para alertar a la industria de viajes sobre las formas en que los contrabandistas están facilitando la migración ilegal a los Estados Unidos por medio de Nicaragua, que se ha convertido en un trampolín para quienes buscan el “sueño americano”.
“Cada vez más, los migrantes atraviesan la región utilizando Managua como punto de desembarco para continuar el viaje hacia el norte por vía terrestre. Estados Unidos ha compartido inteligencia divulgable con el sector de la aviación destacando esta tendencia y subrayando la necesidad de una mayor aplicación de las políticas de las aerolíneas con respecto a los vuelos dentro y fuera de Managua”, dijo el Departamento de Seguridad Nacional. “En particular, las acciones del Gobierno de Nicaragua son motivo de grave preocupación”.
Según Seguridad Nacional, Ortega y Murillo han implementado políticas migratorias permisivas para crear oportunidades para que las redes de tráfico de migrantes exploten a las personas para obtener ganancias económicas y fomenten viajes peligrosos e irregulares hacia la frontera suroeste de Estados Unidos.
Y es que Ortega ha eliminado el requisito de visa para ciudadanos de diferentes países —sobre todo africanos con quienes ha “fortalecido” su relación de pares autoritarios— para que usen Nicaragua como puente y posteriormente cruzar a Honduras por tierra y emprender el camino hacia Estados Unidos. La más reciente restricción eliminada fue para ciudadanos de Angola.
Murillo reacciona en acalorado monólogo
La vocera de la dictadura, Rosario Murillo, reaccionó a las sanciones de Estados Unidos y arremetió contra opositores, a quienes tildó de vividores, oscuros, villanos, oportunistas, entre otros epítetos.
“Los traidores y cobardes, los vendepatrias que se ofrecen a servir al yanki, los que continúan creyendo que el entreguismo les generará dividendos no son más que vividores, oscuros villanos, oportunistas, promotores de falsos y teatrales miedos, de sobre actuados calambres”, dijo Murillo a través de su acostumbrada alocución en medios de comunicación oficialistas.
Además, tildó a críticos del régimen como “sucios relatores de fábulas” que serán recordados “por la infamia, la ignominia, la ingratitud y la ignorancia”.
“Ellos son los infelices usurpadores de sueños, dueños de los estruendosos fracasos, de todas las grandes derrotas y la pérdida absoluta de credibilidad porque no conocen a Sandino”, añadió Murillo.