La atención médica para los migrantes indocumentados que residen en Estados Unidos representa un gran obstáculo, debido a que su estatus no permite que sean elegibles para los programas públicos de salud.
A pesar de ello, existen algunas alternativas que los inmigrantes pueden utilizar a su favor para ser atendidos.
En caso de una emergencia, Anita Wells, miembro de la organización Nicaraguan American Human Rights Alliance (NAHRA), asegura que una personas migrante puede acudir a un hospital público, en primera instancia, y será atendido sin importar su estatus migratorio. “No van a dejar morir a ninguna persona, quien pague por este costo eso viene después”, explicó a LA PRENSA.
Wells, quien es una activista nicaragüense y ayuda a migrantes, aclaró que las opciones para los migrantes que no cuentan con documentación para su estadía legal en Estados Unidos son muy limitadas. La única opción que tiene un inmigrante indocumentado “es pagar de su propio bolsillo”, pero las cuentas podrían implicar miles de dólares, de acuerdo con Wells.
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Si la persona es atendida por una emergencia, Wells dice que esta atención generará una deuda enorme, pero que puede solicitar ayuda a organizaciones no gubernamentales y que ayudan a los inmigrantes; y a trabajadoras sociales del mismo hospital.
También recomienda asistir a las clínicas comunitarias que hay en las ciudades o contactarse con la organización Caridades Católicas que cuentan con estas clínicas o pueden orientar a las personas sobre dónde puede ir.
Una segunda opción sería acudir a hospitales escuela, escuelas de dentistería y hospitales universitarios o buscar ayuda con iglesias evangélicas que ofrecen apoyo a los migrantes. “Iglesias que iban en misiones a Nicaragua, por ejemplo, si alguien tiene esa conexión pueden llamar a esas iglesias”, recomendó la activista.
La activista nicaragüense destacó la importancia de buscar siempre en internet los recursos locales que disponen las ciudades donde viven las personas migrantes; y pone de ejemplo organizaciones como Casa Maryland.
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¿Se puede optar por un seguro privado?
Aunque los indocumentados en Estados Unidos no tienen muchas opciones para acceder a un seguro médico, existen algunas compañías de seguros, en el mercado privado, que sí venden el servicio sin importar el estatus migratorio.
Lilly Araujo, directora de la compañía de seguros All-State Health Solutions, asegura que la empresa ofrece pólizas de seguro médico en todo Estados Unidos.
En entrevista vía telefónica con LA PRENSA, Araujo aseguró que los migrantes indocumentados pueden adquirir este servicio sin tener un seguro social. Como únicos requisitos, la empresa pide un domicilio en Estados Unidos –puede ser el lugar donde alquila–, y una cuenta bancaria; o bien una tarjeta electrónica que se pueda recargar para hacer los pagos.
Sobre el costo de los seguros, explicó que estos dependerán del presupuesto de cada persona o familia, edad, si es hombre o mujer y qué clase de cobertura requiere.
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“También tenemos pólizas de accidente, tenemos pólizas de dentista, de lentes y todo. Los precios están muy baratos, tenemos pólizas que empiezan a 19 dólares para toda la familia y este te da un doctor por teléfono, y te da descuentos en los dentistas y para los lentes”, aseguró.
En el caso de las mujeres, Araujo explicó que el seguro abarca todo, menos el embarazo, salvo tengan una complicación, ni la atención del parto. Y una vez que nazca su hijo, puede decidir si incluirlo o no en el seguro.
Lo que debe tener en cuenta
Debido a los altos costos económicos y requisitos migratorios que representa tener un seguro de salud, Anita Wells aseguró que este seguro ni siquiera es un beneficio para quienes cuentan con residencia o tienen años de vivir en ese país. “Es muy costoso, si no te lo da tu trabajo, te cuesta una barbaridad de dinero”, afirmó.
Además aseguró que esta situación complica la atención médica de los nicaragüenses que han llegado a Estados Unidos en los últimos años, con enfermedades crónicas como la diabetes o enfermedades provocadas por la mala dieta.
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“Esto no es fácil de obtenerlo, ni es barato. Es una de las dificultades que cuando se migra a Estados Unidos no nos damos cuenta de que vamos a incurrir y digo, me incluyo en el paquete, porque hace cuarenta y tantos años que vine, yo terminé en la emergencia del Hospital General de Los Ángeles porque no tenía seguro médico y tenía una infección espantosa y me atendieron, me tocó pagar poco a poco, pero hay programas que te ayudan”, dijo.
Wells instó a inmigrantes que quieren comprar un seguro de salud a que no se dejen engañar y busquen asesoría de una compañía de seguros que sea creíble, que tenga buenas recomendaciones en internet. “¿Qué debe buscar un inmigrante? No caer en el engaño de que le vayan a ofrecer programas de salud que en realidad no le cubren mucho. Leer, informarse bien de cuáles son sus opciones y sus derechos”, aseguró.
Por su parte, la agente de seguros de salud, Patricia Illescas, recomendó a quienes quieran comprar un seguro en el mercado privado “someterse a lo que puedas según tu economía”.
También hizo hincapié en que deben fijarse que el deducible que pide la compañía de seguros dé bajo, es decir, que la cantidad de dinero que se debe pagar antes de recibir algunos servicios no sea tan alta.
Lo segundo es que la prima, es decir la mensualidad del seguro, sea cómoda o accesible. Y que el máximo de costo de bolsillo no sea elevado.
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Opciones gratis o a bajo costo
A pesar de que las opciones son limitadas, algunos estados poseen políticas más flexibles para que los indocumentados puedan acceder a servicios de salud.
El Centro Nacional de Leyes de Inmigración asegura que en ciertos estados los niños y las mujeres embarazadas pueden obtener cobertura médica sin importar el estatus migratorio. En la ciudad de Nueva York, las embarazadas pueden calificar para recibir atención prenatal, de parto y posparto gratis, según el Departamento de Salud.
En el caso Nueva York, independientemente de su estado migratorio, los menores de 19 años pueden obtener seguro médico de bajo costo o gratis a través del programa Child Health Plus.
Según el Departamento de Salud de Nueva York, los inmigrantes, que cuenten o no con un seguro médico, puede obtener atención médica de bajo costo o gratis a través del sistema de salud de hospitales de la ciudad de Nueva York.
En California, el estado ofrece un seguro médico gratuito o de bajo costo a personas de bajos ingresos económicos y que sean elegibles al programa Medi‑Cal.
El Departamento de Servicios de Atención Médica de Californa (DHCS por sus siglas en inglés) asegura que las personas de 19 años o más podrían calificar para beneficios limitados de Medi‑Cal, aunque no tengan número de seguro social (SSN) o no puedan comprobar su estatus migratorio. El plan cubre emergencias, servicios relacionados con el embarazo y atención médica de larga duración.
En el caso de los niños, estos podrían calificar para recibir los beneficios completos de Medi‑Cal, independientemente de su estatus migratorio. Aquí puede revisar todos los requisitos.
En Texas, los indocumentados pueden ser beneficiados con el Programa de Seguro Médico para Niños (CHIP) y Medicaid, si cumplen con ciertos requisitos. También en el estado hay organizaciones sin fines de lucro que ofrecen asistencia para que se inscriban en los programas.
También puede aplicar al Programa del Condado de Atención Médica para Indigentes que brinda atenciones como vacunas, pruebas médicas de detección, exámenes físicos anuales, visitas al hospital como paciente interno o ambulatorio, entre otros. Puede obtener más información aquí.