En medio de las pocas expectativas generadas por la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) con China, ya que a un mes del anuncio, productores y exportadores todavía no conocen el contenido del acuerdo, especialistas en comercio exterior no ven muchas oportunidades para el sector pesquero, que tiene algunos de sus productos en la canasta de desgravación inmediata. Como en otros sectores, la limitada producción local, que además está comprometida con clientes que no pueden descuidarse, es el principal motivo del desanimo ante el nuevo mercado.
Tras el anuncio de la firma del TLC con China, Jesús Bermúdez, titular del Ministerio de Fomento, Industria y Comercio (Mific) detalló que algunos de los productos del sector acuícola y pesquero que entraron en la canasta de acceso inmediato con 0 por ciento de arancel son: pescado, camarón, langosta y pepino de mar. Mientras que en la cesta que se desgravará en cinco años, contados a partir de la entrada en vigencia del convenio, es decir que seguirán pagando aranceles, se incluyó: filete de pescado, preparaciones de pescado y despojos de pescado.
Tal como ocurre con otros productos primarios que también entraron en la cesta de desgravación inmediata, algunos del sector pesquero no pagaran ningún arancel para entrar al mercado chino desde enero de 2024, cuando está previsto que entre en vigencia el TLC. Pero especialistas en comercio exterior que solicitan anonimato por temor a represalias, consideran que la producción local es escasa y ya está comprometida.
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Sector pesquero nunca ha exportado a China
Incluso, los especialistas recuerdan que la cadena de producción del sector pequero incluye a empresas extranjeras llegaron al país para abastecer a determinados mercados. Por tanto, consideran que solo abandonarían a esos clientes, si los chinos les ofrecen precios más atractivos y contratos con ventajas adicionales a las que reciben actualmente.
Cosa que dudan que ocurra, no solo por la volatilidad del mercado, sino también por aspectos culturales e intereses comerciales en los que los superan los abastecedores tradicionales. Esto, sin olvidar que China es uno de los principales productores de productos pesqueros del mundo, aunque también es un gran importador de estos productos.
Añaden que el Acuerdo de Cosecha Temprana que está vigente desde el 1 de mayo es prueba concreta de que ningún exportador abandonará a sus clientes o dejará de cumplir con sus contratos para ir a probar suerte en el mercado chino. Y es que los crustáceos son uno de los siete grupos de productos a los que desde el 1 de mayo, el acuerdo les suspendió los aranceles de ingreso al mercado chino. Sin embargo, los reportes de comercio exterior del Banco Central de Nicaragua (BCN) no reportan envíos de estos productos a ese mercado.
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Estados Unidos entre los principales compradores
De hecho, entre enero y julio de este año, los mercados de destino de las langostas, camarones y pescados frescos han sido los mismos de los últimos años. Estados Unidos, Puerto Rico y España han sido los principales compradores de langosta. Reino Unido, México y Costa Rica fueron el principal destino de los camarones.
Mientras que el pescado fresco tuvo como principales destinos Ecuador, Costa Rica y Estados Unidos. Otros compradores de pequeños volúmenes de estos productos son Bélgica, Colombia, Francia, El Salvador, Guatemala, Honduras, República Dominicana y Jamaica. El único asiático que figura en la lista de compradores de este año es Singapur.
Otro cliente asiático que el sector tenía era Taiwán, pero desde el 2021, es decir, cuando el dictador Daniel Ortega rompió relaciones con ellos para aliarse con Pekín, el BCN no registra envíos de estos productos a ese mercado. Y en el caso de China, en los últimos diez años los reportes del BCN no registran envíos del sector pesquero a ese mercado.
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Merma la producción de algunos productos
Tal como mencionan los especialistas, el bajo volumen de producción de este sector se ve reflejado en los ingresos que generan sus exportaciones. De acuerdo a los reportes de Comercio Exterior del BCN entre 2017 y 2022 el aporte de los ingresos que genera la exportación de productos pesqueros ha oscilado entre 120 y 150 millones de dólares. En términos porcentuales esos ingresos solo representan entre el 3 y el 6 por ciento del total de los ingresos que generan los envíos al exterior de productos del régimen general.
En cuanto a la producción, las estadísticas del BCN reflejan que en los últimos siete años la de camarón de cultivo ha tenido un crecimiento sostenido. Pasó de 54.86 millones de libras en 2017 a 69.49 millones de libras en 2022. Lo mismo ocurre con el pescado, el sector pasó de producir 16.95 millones de libras en 2017 a 32.90 millones de libras en 2022.
Pero con el camarón marino las cosas no han ido bien, la producción bajó desde 3.06 millones de libras en 2017 a 1.13 millones en 2022. Algo parecido ha ocurrido con la captura de langosta, que bajó de 11.33 millones de libras en 2017 a solo 7.11 millones de libras en 2022. El sector también produce otros productos, como pepino de mar marino y de cultivo, medusa, caracol rosado y otros. Sin embargo, sus volúmenes son tan reducidos que los reportes de producción y exportación los engloban como “otros productos del mar”.
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Efectos del cambio climático
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, conocida mundialmente como FAO, la producción acuícola disminuye por diversas razones, entre ellas el agotamiento o merma de las áreas de producción y la disminución de la vida marina.
“El aumento de la temperatura del agua y la acidificación son dos de los principales mecanismos por los que el proceso del cambio climático está repercutiendo en la biodiversidad marina y afectando tanto la productividad como la distribución de las poblaciones de peces marinos. La escala y la magnitud de estos cambios ecológicos revisten crucial importancia para las sociedades cuya subsistencia depende de la pesca marina”, dice un reciente estudio de la FAO.
Según el Mapa Nacional del Sector Acuícola y Pesquero, en 2022 el sector generó 43,700 empleos directos e indirectos. Del total 31,500 trabajan en el sector pesquero y 12,200 en el acuícola. Gran parte de estas personas trabajan en las 35 plantas procesadoras, cuatro laboratorios de producción de semillas para la acuicultura, 97 centros de acopios, 140 embarcaciones industriales y 6,861 artesanales. Y en el marco de la estrategia de fomento de la acuicultura a pequeña escala, en marzo de 2023 funcionaban 2,870 estanques activos en todo el país.