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Monseñor Rolando Álvarez permanece detenido en una celda de máxima seguridad en La Modelo. El 19 Digital
El calvario de la Iglesia Católica en Nicaragua en fotografías
El régimen de Nicaragua ha emprendido una cruzada represiva contra la Iglesia Católica por su postura crítica contra las violaciones a los derechos humanos. Te presentamos 12 fotos que muestran el martirio que vive la Iglesia en Nicaragua.
“Entre cristianismo y revolución no hay contradicción”, rezaba una consigna a inicios del triunfo de los sandinistas cuando llegaron al poder el 19 de julio de 1979, tras derrocar a la dictadura somocista. Pero todo resultó ser una arenga política en la efervescencia del triunfo revolucionario, ya que en la década de los años ochenta la Iglesia Católica de Nicaragua sufrió persecución, asedio, y destierro. Igual que ahora.
Con la rebelión de abril de 2018, la Iglesia Católica apoyó a los manifestantes ofreciendo refugio en sus templos a quienes eran víctima de la represión y algunos sacerdotes y obispos se solidarizaron con los protestantes. Esto provocó que la Policía y paramilitares asediaran y profanaran parroquias y que varios sacerdotes recibieran amenazas de muerte.
El mismo Daniel Ortega ha vociferado en contra de los religiosos, y desde 2021 ha empezado a encarcelar y judicializar a sacerdotes. Algunos de ellos han sido desterrados y despojados de su nacionalidad. En el caso de monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, quien se negó a ser desterrado, permanece encarcelado en una celda de máxima seguridad en el Sistema Penitenciario La Modelo.
De igual manera, han sucedido atentados contra la Iglesia Católica, como la explosión que incineró la imagen de la Sangre de Cristo el 31 de julio de 2020 en la Catedral de Managua. A la Iglesia también le han confiscado sus medios de comunicación, centros de asistencia social, colegios, universidades y se ha expulsado a monjas y sacerdotes extranjeros.
El destierro y robo de bienes a la Iglesia es un proceso que la dictadura ha ordenado a lo largo de 2022, aumentando sus ataques en lo que va del año 2023. De acuerdo a un estudio de la abogada Martha Patricia Molina, quien se dedica a monitorear los ataques que recibe la Iglesia Católica, se contabilizan 529 ataques directos contra la Iglesia de Nicaragua.
El congelamiento de las cuentas bancarias de algunas Diócesis y la investigación sobre supuesto lavado de dinero que recientemente abrió la Policía, son una señal clara de que el calvario que sufre la Iglesia en Nicaragua aún no termina.
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