Diecisiete meses después de haber tomado el plantel industrial del Diario LA PRENSA y a cinco meses de consumar su confiscación para entregarlo al Instituto Nacional Tecnológico (Inatec) —que anunció lo convertiría en el Centro Cultural y Politécnico José Coronel Urtecho—, aparentemente la dictadura también pondrá a funcionar la rotativa.
En los últimos días, LA PRENSA recibió información extraoficial de que el régimen Ortega Murillo recontrató al personal especializado en el manejo de la rotativa y otras máquinas de la imprenta comercial. Además, adquirió insumos para el funcionamiento de estos equipos.
Las versiones dadas a LA PRENSA indican que el régimen echará a andar la imprenta comercial y también la rotativa donde se imprimía el Diario y se pueden elaborar libros en cantidades grandes. Se supo que ya retomaron sus cargos los operadores que en agosto de 2021 fueron forzados al desempleo por la dictadura, tras la toma ilegal de las instalaciones y posterior encarcelamiento de su gerente general Juan Lorenzo Holmann.
Al régimen no le habría quedado otra opción más que contratar a los mismos trabajadores, ya que en el país no hay muchas personas con conocimientos para manejar una rotativa o los equipos más especializados de la imprenta comercial. En Nicaragua solo existían dos rotativas, la que se le confiscó al Grupo Editorial LA PRENSA y la del extinto El Nuevo Diario.
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Bienes confiscados valen entre 18 y 20 millones de dólares
También se supo que junto a la contratación del personal se comenzó a adquirir diversos insumos necesarios para el funcionamiento de estas maquinarias y equipos.
Según el más reciente evalúo, junto con el edificio, la maquinaria y equipos confiscados tienen un valor comercial de entre 18 y 20 millones de dólares. Este dato se actualizó recientemente tomando en cuenta el inventario de lo que quedó dentro del edificio al momento de la toma el pasado 13 de agosto del 2021.
En un primer cálculo el Grupo Editorial LA PRENSA cuantificó las pérdidas en unos 10 millones de dólares. Pero en un reciente ajuste, el valor comercial del terreno, edificio, rotativa, maquinaria industrial de la imprenta, otros equipos y mobiliario, esta se fijó entre 18 y 20 millones de dólares.
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¿Elaborarán un nuevo periódico?
Según fuentes cercanas al régimen, la recontratación del personal y adquisición de insumos obedecería al interés de elaborar un nuevo periódico. Esta sería un empresa que funcionaría en una zona aparte del Centro Cultural y Tecnológico que el Inatec instalará en el edificio.
Sin embargo, personas vinculadas al negocio de la elaboración de material impreso no creen que el interés sea hacer un periódico, sino entrar al mercado de la elaboración de libros, revistas y todo tipo de material impreso.
En 2007, tras su retorno al poder Daniel Ortega fracasó en su intento de tener su propio periódico. Lo llamó El 19, aunque lo regalaban en todos los semáforos de la capital. Pero no logró la aceptación del público por lo que tuvo que desistir y convertirlo en un medio digital que reproduce la propaganda oficial.
Sin embargo, es posible que por razones políticas la dictadura pueda insistir en un periódico impreso. Pero personas vinculadas al sector consideran que el interés de echar a andar la rotativa debe ser quedarse con todo el negocio relacionado con la elaboración de libros. En los últimos años, organismos internacionales financiaron la elaboración de hasta 4 millones de libros por año.
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Imprimir en la maquinaria más moderna del país
La rotativa del Grupo Editorial LA PRENSA tiene capacidad para tirar en plazos cortos grandes cantidades de libros. Incluso en algunas ocasiones ganó las licitaciones para elaborar textos para el Ministerio de Educación (Mined) que financiaba el Banco Mundial y otros organismos internacionales. Además, en el plantel también hay varias máquinas para poner la portada, encuadernar y hacer el acabado de los libros, revistas y otros materiales impresos.
A criterio de los conocedores de este tipo de negocio, si Ortega entra a este mercado afectaría a las dos o tres empresas grandes que actualmente son las que tienen capacidad de elaborar estos productos en grandes cantidades. Eso incluso podría sacarlas del juego, ya que no podrían competir para quedarse con las licitaciones de los libros, que es el negocio más atractivo del sector.
En los próximos días podría conocerse cuáles son los verdaderos planes del régimen. Ya que el pasado 6 de diciembre de 2022, a través de una resolución administrativa el Inatec eligió a la empresa Servicios de Ingenierías y Proyectos SA (Sipsa) para realizar la remodelación del plantel en un plazo de 90 días. Además, desde agosto pasado se anunció que en febrero el Centro Cultural y Politécnico José Coronel Urtecho abrirá sus puertas para atender a unos 13,090 estudiantes.
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