A Pancasán Arce, presidente de la Liga de Beisbol Profesional Nacional (LBPN), le tocó tomar el timón de un barco dentro de una tormenta. El fuerte oleaje golpea constantemente al órgano encargado de organizar la máxima competencia de pelota en Nicaragua. Desde 2018 la crisis económica no han hecho más que empeorar y el más reciente comunicado de la LBPN dejó perplejos a los más fieles seguidores del deporte rey del país: “No se está en capacidad de efectuar dicha edición, hasta tener claro el respaldo publicitario y apoyo con el que dichas franquicias contarán”.
LA PRENSA conversó con Arce y respondió todas las interrogantes al respecto. “Hemos visto la reacción de los fanáticos. La gente está acostumbrada a la Liga Profesional y saben que es una parte del entretenimiento. Ya es algo como si estuviera institucionalizado y el hecho que exista la posibilidad de no realizarse preocupa a muchos”, indicó, agregando que desde hace meses venían analizando la situación: “Desde que finalizó la temporada pasada, lo primero que hacemos en febrero es entregar los resultados finales de la parte económica, análisis de los reglamentos y las fallas que se dieron para no repetirlas. En marzo nos reunimos y hablamos de cara a la temporada siguiente y ahí las franquicias que son socios de la liga y, tienen sus finanzas aparte, nos hicieron ver que ellos cumplieron con los compromisos financieros, porque no se le debe a ningún jugador, pero tuvieron que poner dinero de su bolsillo para sanear deudas, solventaron el déficit de su propio capital”, explicó.
Según Arce, se han planteado muchas opciones en las diferentes reuniones. “Esta decisión que se tomó es algo se ha venido analizando con bastante tiempo desde marzo e incluso por parte de la liga llevamos propuestas de reducir a dos meses y medio, así los equipos se ahorran una quincena de salario, también se propuso que hiciéramos la temporada regular más corta y el round robin más largo. También se habló de la reducción de extranjeros, hubo una propuesta de hacer una liga como en Panamá de un mes, pero no tendría atractivo para los patrocinadores ni para muchos jugadores que preferirán irse a otros lados que jugar solo un mes”, señaló.
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Al preguntarle sobre la opción de hacer una liga con solo jugadores nacionales, confesó que a los socios no les agradó tanto la idea. “Sería deslucir el campeonato y sería una especie de Pomares, todo eso se analizó hasta llegar al comunicado que publicamos el pasado fin de semana, que tendremos hasta la última semana de agosto para que los equipos hagan bien su sondeo de perspectivas económicas con patrocinadores y al hacer cuentas ver si se puede o no continuar este año con la Liga Profesional. Los cinco equipos están pasando por dificultades”, aseguró.
Ante la compleja economía global ningún socio de los equipos quiere repetir la receta de años atrás. “Hemos pasado por momento difíciles, la liga sacó un préstamo para financiar el campeonato en el pasado, el cual se pagaba a dos años con ciertos intereses favorables, pero se vio que algunos equipos tuvieron problemas en pagarlos. Ahorita nadie se quiere endeudar. En este momento no hay unanimidad entre los socios de qué camino tomar, por eso será clave la próxima reunión, en un dado caso que no encontremos solución, se suspendería este año y el próximo regresaríamos con más fuerza”, concluyó Arce.