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Mario Genaro González señaló que en la finca tienen alrededor de 10,000 plantas sembradas en un área de 1,000 metros cuadrados.

Cómo Nicaragua está produciendo fresas en Jinotega con tecnología de EE. UU., para dejar atrás las compras a Guatemala y Costa Rica

Esta es la historia de dos productores que están haciendo historia en Jinotega con la producción de fresas que hoy se venden en todos los supermercados del país

En Jinotega, dos productores están conquistando los supermercados del país con sus cultivos de fresas, un cultivo no tradicional en el país que antes se debía importar desde Guatemala o Costa Rica. En este esfuerzo la inversión estadounidense está siendo fundamental, lo que permitirá al país dar un paso más a la diversificación de su matriz productiva.

Mario González Almandárez y Luis Alberto Udiel son los dos productores que decidieron confiar sus recursos en la producción de fresas y el 30 de mayo de 2021 cada uno sembró 10,000 plántulas de fresas variedad Festival que fueron importadas desde California, Estados Unidos, con la autorización del Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria (IPSA), junto al apoyo logístico, técnico y financiamiento de Walmart de México y Centroamérica.

Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

De hecho, ambos productores tomaron esta iniciativa de la mano del Programa Tierra Fértil, de Walmart, que les gestionó la adquisición de las plántulas importadas, para así iniciar el primer proyecto de producción de fresa legalmente registrado en el país.

¿Cómo surgió este proyecto?

Mario González Almendárez, productor y propietario de la finca Santa Enriqueta, ubicada en Jinotega, compartió a LA PRENSA que su familia era cafetalera desde hace más de 100 años, pero su vida cambió luego que en el 2000 el precio del grano cayó a 50 dólares, quebraron y esa situación los impulsó a sembrar hortalizas de manera tradicional.

“Después, un organismo nos ayudó a ver la producción intensiva de hortalizas para supermercados, entonces hicimos eso y bum, nos funcionó y es lo que hacemos hoy. Entonces por eso ya somos una referencia para supermercados, además que tenemos más de 15 años en esto y es la razón por la que Walmart nos dijeron ´dale ya, con ustedes sí lo hacemos´”, recordó.

De izquierda a derecha, Mario Genaro González, Mario González Almendárez y Edgard Lira. Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

Siguiendo esta línea, explicó que su familia vende a la empresa alrededor de 15 productos y producen aproximadamente 30 productos que no son tradicionales en el país, “por ejemplo, producimos diferentes tipos de especias para las comidas, eso no hay en Nicaragua, por lo tanto, no tenemos competencia”, sostuvo.

“El último proyecto que hemos desarrollado con Walmart es la producción de fresas, es un proyecto muy importante para nosotros y creo que también para el país porque significa desarrollar un cultivo no existente en Nicaragua de la forma correcta, es decir, con la tecnología adecuada, donde Walmart jugó un papel importante para ayudarnos con la introducción de materiales genéticos adecuados para poder hacer este proyecto exitoso”, dijo González Almendárez.

Por su parte, su hijo, Mario Genaro González, ingeniero agrónomo y también productor de fresas y otros cultivos, compartió a este Diario que desde hace más de 20 años se dedica a cultivar hortalizas y estudió esa carrera “precisamente porque me gusta la finca y para poder seguir desempeñando lo que me gusta con mayor conocimiento”.

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“Con Walmart hemos ido en un proceso metiendo tecnología nueva y cultivos hidropónicos. Hemos venido evolucionando para ser más competitivos en el mercado, porque igual nuestros productos tienen que competir con la calidad de los productos importados. Todo lo que producimos va para los supermercados y tenemos una planta de proceso donde se empaca, todo aquí sale empacado y etiquetado directo a las tiendas”, explicó.

Actualmente, cada finca está cosechando entre 500 y 800 libras de fresas a la semana y tanto González como Udiel, de la finca El Amanecer, también de Jinotega, estiman una producción de 40,000 libras de fresas al año.

“Nosotros calculamos tener una producción estable por el manejo que estamos haciendo con sistema de riego por goteo, control de plagas y cultivo sobre sustrato de coco, lo que nos está dando como resultado una plantación con un desarrollo sostenido bastante bueno para un año de producción más”, indicó Udiel.

Financiamiento del proyecto

Mario Genaro González compartió que el financiamiento del proyecto asciende a más de 30,000 dólares. “Son 10,000 plantas, todo el material es importado, las plantas venían congeladas desde California y este material de sustrato de fibra de coco viene desde afuera porque no lo comercializaban aquí en el país”.

Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

“Desde octubre hasta ahorita, ya tenemos seis meses produciendo todo el tiempo, todos los días, aquí todos los cultivos son intensivos, se cosechan todos los productos todo el año”, enfatizó.

Por su parte, su padre agregó que “Walmart asumió una parte en calidad de financiamiento como crédito, nosotros conseguimos desde el banco algún poco de dinero para poderlo hacer. Mucho trabajo, esfuerzo, perseverancia, paciencia y dedicación, esa es la base fundamental para hacer que un proyecto camine”.

Diferencias entre las fresas nicas y las que se importaban

González Almendárez explicó que cualquier fresa que se traiga del exterior no puede competir con la producida en Nicaragua, porque en este caso el periodo entre la cosecha y la entrega al consumidor es inmediato, a diferencia de la importada.

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“Cualquier fruta u hortaliza que se mete en refrigeración durante 3 o 4 días se deshidrata, si tiene un inicio de infección de algún hongo, se desarrolla, y eso le afecta el sabor y la calidad. En cambio, nosotros cosechamos hoy las fresas y el camión carga todos los productos y a las 5:00 de la mañana los está entregando y va refrigerado. Nosotros cosechamos y entregamos el producto prácticamente el mismo día, de manera que su calidad está garantizada”, detalló.

El productor también explicó que la finca está ubicada en el municipio de Jinotega, entre Matagalpa y Jinotega, a 1,400 metros sobre el nivel del mar. “Este es un lugar que tiene un clima que alcanza unos 24 grados, en la noche puede bajar hasta 14 grados, en diciembre baja a 7 u 8 grados la temperatura, eso hace que estos lugares sean particularmente buenos para el cultivo de vegetales y frutas de este tipo que necesitan el frío para su formación”.

En la finca también se cultivan tomates cherrys, cebollines, brócoli, apio, cilantro, romero, entre otros comestibles. “Al día de hoy nosotros tenemos más o menos unos 30 productos diferentes que cultivamos en pequeñas cantidades porque son productos que se desarrollan en base a un mercado creciente porque el detalle es que en la población hay muchos de ellos que no son conocidos”, detalló.

Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

“También producimos especias aromáticas que se usan en los alimentos y que no son muy usuales en el país. Tenemos unas 18 yerbas diferentes que hemos traído al país, hemos ido desarrollando y precisamente ahorita están ya con la etiqueta de Walmart porque ellos ya la tienen en sus tiendas, o sea que vamos avanzando poco a poco de forma sostenida en un proyecto de desarrollo para mejorar la dieta alimenticia de los nicaragüenses”, aseguró.

“La producción de fresas en Nicaragua ya no es un mito, sino una realidad”

Edgard Lira, gerente de Compras de Frutas y Vegetales de Walmart Nicaragua, explicó que desde hace tres años la empresa se propuso producir fresas y ahora la producción semanal entre ambos productores es de, aproximadamente, unas 1,000 libras y pretenden triplicarlo, a unas 3,000 libras por semana.

Asimismo, recordó que aunque en Nicaragua se ha producido fresas desde hace muchos años, la cantidad y la calidad de estas era muy baja. “Una de las cosas que notamos una vez que hicimos la revisión fue que no había tecnología adecuada para producirla y los materiales que se estaban utilizando en Nicaragua ya eran muy viejos o ya estaban degenerados”, agregó.

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Compartió que una de las razones que los impulsó a cultivar este producto en territorio nacional es que cuando el producto importado ingresaba al país, la compañía desechaba más del 50 por ciento por maceración u otros problemas.

“Cuando nosotros importábamos se botaba más del 50 por ciento, porque los tránsitos de Guatemala a Nicaragua y de Costa Rica a Nicaragua en promedio son 5 días, entonces cuando queríamos abrir la carga, por el contexto de temperatura y tiempo, la calidad de los productos había bajado. Entonces nos pusimos la meta de producir y comenzamos a ver el tema de los materiales”, expresó.

Lira expuso que en Centroamérica la compañía no pudo conseguir los materiales que cumplieran todos los requisitos de ley y viajaron hasta Estados Unidos para conseguirlos. Además, detalló que los productores nicaragüenses trabajan con un sistema de producción hidropónico, el primero que se estableció en Nicaragua, lo que permite producir de una manera más ergonómica, con una cantidad de carga química mínima.

Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

“Hoy es un éxito tener la producción de fresas ya en las tiendas. Hoy tenemos en las tiendas de La Unión y las tiendas de Walmart y la idea es también llevarles a los Palí y Maxi Palí”, aseguró.

De hecho, la bandeja de fresas en la presentación de 400 gramos se encuentra disponible en los establecimientos antes mencionados, con un precio que ronda los 140 córdobas. La etiqueta contiene un código QR para conocer la historia del proyecto, además de la fecha de cosecha —mismo día que se empaca— y el nombre del productor que cultivó la fresa.  

Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

“La fresa es un cultivo interesante, que no es tan tradicional en el país y este sistema como es nuevo, también estamos aprendiéndolo, tenemos una asesoría especializada. Incluso nos alegra que ya hay otros productores en Nicaragua que están replicando la técnica y ya se está cultivando fresas en Nicaragua, eso es lo bonito, que ya en el país la fresa no va a ser un mito, un sueño, ya va a ser una realidad”, manifestó.

Lira indicó que el siguiente paso de la compañía es traer a Nicaragua plantas nuevas y tienen planeado producir arándanos y moras. “El enfoque y el segundo paso después de las fresas es arándanos, es un cultivo que tiene muchas cualidades nutritivas y queremos que Nicaragua también aprenda a tenerlas”.

Planean exportar plantas a la región

Al ser consultado sobre si tienen previsto exportar la producción en un futuro, Lira compartió que en este momento solo están enfocados en abastecer completamente al mercado nacional. “La idea es abastecer Nicaragua ahorita”, agregó

“Walmart tiene otras filiales en Centroamérica y también estamos impulsando el proyecto en otros países, estamos replicando la misma historia de acá, lo que sí vamos a hacer ahorita es traer más variedades a Nicaragua, para que más productores puedan tener acceso a este sistema de producción”, afirmó.

Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

No obstante, explicó que “con el tema de los materiales, si nosotros logramos hacer los bancos genéticos posiblemente exportemos plantas a la región, porque es más viable que las plantas viajen, en lugar de estar mandando las frutas”.

“Como Nicaragua sí estamos exportando mucha fruta a la región, como sandias, plátanos, verduras como tomates, pero en el caso de las fresas, creemos que lo mejor es mandar las plantas y que los otros países hagan el mismo sistema que hicimos nosotros para que sea más sostenible”, consideró.

Calidad y características de las fresas cultivadas en Jinotega

Mario Genaro González señaló que en la finca tienen alrededor de 10,000 plantas sembradas en un área de 1,000 metros cuadrados. “Esperamos producir alrededor de unos 100 a 200 kilos semanales”, sostuvo.

“Montamos toda la estructura, con un cultivo hidropónico en mesas con sustrato de fibra de coco inerte que tiene un sistema de irrigación por donde se le suministra los nutrientes para que la planta se desarrolle y pueda generar frutos”, describió.

Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

Cabe destacar que los sustratos a base de fibra de coco también fueron importados y el cultivo no está directamente en el suelo, lo que permite obtener un producto bastante limpio para el consumidor nicaragüense.

Al respecto, Lira explicó que, al no tener exposición con el suelo, “nos estamos evitando el alto riesgo de contacto con babosas que son plagas muy peligrosas para la salud humana, así como otras enfermedades que pueden acabar con el cultivo en una semana”.

Por su parte, Mario Genaro González agregó que “luego de que se establecieron las plantas, alrededor de cuatro meses y medio después ya empezamos una producción. Como el 15 de octubre ya empezamos a producir fresas que ya se podían comercializar en las tiendas de Walmart”, dijo.

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El joven productor detalló que las fresas son de la variedad Festival, que “es una fruta de tamaño mediano de muy buen sabor, hay otras variedades que son más grandes, pero tienden a ser menos dulces, esta es una fresa un poco más dulce, además, la palatabilidad es muy sabrosa”.

Posterior al corte, los productores explicaron que las fresas pasan directo al área de empaque y no se lavan, pues es una fruta muy delicada y así evitan que sufra problemas de maceración.

“Pasamos al área de empaque y son selecciones según su tamaño y calidad, toda la fresa que no da la calidad es descartada. Algunas se venden en las bandejas, otras se pueden hacer mermeladas o se venden para batidos, etcétera. Pero la fresa no se lava, el contacto tiene que ser mínimo porque es muy delicada, por eso es que necesitamos que el área donde se cosecha sea lo más inocuo y limpio posible”, añadió.

Área en donde empacan las fresas. Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

Posteriormente, luego de ser empaquetadas, las fresas van directo a refrigeración para poder ser transportadas. “Su vida de anaquel es corta, entonces se tiene que cosechar en un punto de maduración intermedio para que en su proceso logístico llegue a la tienda en un estado de maduración adecuado”, explicó el productor.

Sobre los costos de producción de las fresas, Mario González Almandárez señaló que en este caso la inversión principal es la inicial, que es la instalación. “Por ejemplo, cada metro de eso, que es fibra de coco, vale 6.50 dólares y hay que traerlo de Tailandia, es plástico, pero aquí no lo sabemos hacer”.

“A ver si un industrial de Nicaragua se anima y comienza a producir cosas como estas, porque son cosas necesarias y si queremos expandir estos cultivos, está demostrado que es esta fibra en la que se produce la fresa. Entonces hay que desarrollarla, ese debe ser el incentivo para todos”, expresó.

“Urgen políticas para incentivar a productores”

González Almandárez planea traer más variedades al país y motivar a que otros productores puedan tener este tipo de cultivos, “porque nosotros vamos a tener plantas madres en el futuro para darles a otros productores para que puedan producir fresas”.

Foto tomada por Jader Flores/LA PRENSA

“Creemos que debe ser motivador para que el Gobierno, el área que corresponde al Ministerio de Agricultura y el IPSA, por ejemplo, establezcan políticas e incentivos para que los cultivos se desarrollen, para que la gente pueda importar los materiales y las semillas, porque son una dificultad en el país”, lamentó.

Además, a su criterio, existen problemas importantes de resolver, como el estado de las carreteras, las que califica en mal estado. “Es importante la visión de la Alcaldía y del Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI) sobre estas rutas que producen alimentos para todos los nicaragüenses”.

“Esta es una zona altamente productiva de hortalizas de todo tipo, aquí se nutren los supermercados y el mercado, de manera que se requiere un esfuerzo conjunto de productores, Gobierno, empresas grandes como Walmart, y otras empresas que participen en un desarrollo adecuado de una agricultura más intensiva, más calificada, con mejores resultados para todos”, comentó.

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El productor considera que las personas interesadas en producir deben salir un poco de lo tradicional, “se necesita que el productor pueda ver con más claridad lo que necesita el mercado, pero también se necesita que el Gobierno establezca una política más clara, donde tengas un Ministerio de Agricultura que sea beligerante, en cuanto a proponer políticas y que diga ´vamos a cultivar zanahorias, pero vamos a incentivar y conseguir financiamiento para que las zanahorias se laven en centros de lavados y no en las quebradas, en agua que tiene heces y que enferma a la gente´”, ejemplificó.

“Se requieren políticas claras y específicas, y se requiere que el productor se capacite y aprenda, y consiga un poco de dinero, se necesita financiamiento de los bancos y que sean accesibles”, añadió.

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