14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.
empleo, desempleo,

LA PRENSA/ARCHIVO

¿Qué está pasando en la “delgada” clase media de Nicaragua? Cuatro indicadores que pueden dar luces sobre este grupo social

Para el economista y sociólogo Óscar René Vargas la clase media en Nicaragua se redujo a su máxima expresión por dos razones: la crisis sociopolítica sumada la pandemia, más las medidas recaudatorias impuestas por el régimen

Contenido Exclusivo CONTENIDO EXCLUSIVO.

Aunque en el primer semestre del año se ha observado una especie de recuperación de la economía, especialmente la ligada a la producción, los indicadores estrechamente vinculados a la clase media de Nicaragua si bien varios están creciendo, aún no se logran los niveles vistos antes de la tormenta perfecta que se asentó sobre este reducido grupo población: recesión y pandemia.

La evolución de estos indicadores hace temer a los  economistas que la raquítica clase media, gravemente golpeada por tres años de recesión, todavía deberá esperar un buen tiempo para alcanzar el nivel de bienestar exhibido hasta 2017.

La circulación de tarjetas de crédito, la importación de electrodomésticos, de vehículos y la entrega de crédito hipotecario, entre otros, no logran recuperar los niveles vistos previo a la recesión económica, según muestran números oficiales. Inclusive algunos de estos indicadores están en descenso.

Antes de la crisis sociopolítica se estimaba que un 15 por ciento de la población nicaragüense pertenecía a la delgada clase media que, según el sociómetro del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), comprende la población que gana entre 12.4 y 62 dólares al día, es decir, de 372 a 1,860 dólares al mes, o bien desde 4,464 hasta 22,320 dólares al año.

La complicada situación de la clase media se puede observar en los indicadores de empleo, cuyos datos hasta mayo muestran que de las 153,697 plazas que se perdieron desde el 2018, hasta ahora solo se han podido recuperar 37,293, es decir que aún hay más de 120 mil sin trabajo, donde se incluiría a personas que están dentro de los parámetros establecidos por el BID como clase media.

Para el economista y sociólogo Óscar René Vargas, la clase media en Nicaragua se redujo a su máxima expresión por dos razones: la crisis sociopolítica sumada la pandemia, más las medidas recaudatorias impuestas por el régimen como la reforma a la Ley de Concertación Tributaria. A criterio de Vargas, ahora gran parte de este sector ha caído en la zona de vulnerabilidad, un escaño antes de entrar al ámbito de la pobreza, según la clasificación del BID.

Lea además: ¿Regresa el negocio de las tarjetas de crédito de los bancos? Solo este año se han aprobado más de 6,000

“Si hacemos una definición de la gente en cuanto a su ingreso, hablamos que el 80 por ciento de los nicaragüenses tienen ingresos menores de 10,000 córdobas mensuales (unos 285 dólares mensuales). Esta gente vive arráncame la vida, un 15 por ciento es parte clase media, aquellos que ganan más de 500 dólares mensuales y cinco por ciento concentra la riqueza de este país”, dijo Vargas.

El sociólogo señala que antes de la crisis la clase media de Nicaragua era tan vulnerable, de tal manera que evidentemente cualquier desequilibrio económico iba afectar a este segmento de la población.

¿Se ha recuperado la clase media?

Y aunque este año se ha observado una recuperación en varios indicadores ligados a la clase media, Vargas considera que no es una señal de bienestar, sino algo temporal.

“La clase media está regresando para comprar cosas que necesita porque pasaron tres años sin comprar nada, están reponiendo lo que no tenían, pero no significa que es algo que va a permanecer, es un porcentaje muy pequeño, es una leve recuperación y no es señal de bienestar”, dijo Vargas.

A partir de lo planteado por Vargas, ¿cómo están evolucionando los indicadores relacionados con la clase media, o sea, las personas con capacidad para comprar o contratar servicios financieros?

Lea también: Más de 800 nicaragüenses interesados en comprar una casa, según Cadur

1. Tarjetas de crédito

Hasta la primera mitad del año se observa un crecimiento importante en este tipo de financiamiento, después de tres años de caída, aunque aún no se logra llegar al nivel que se tenía en el 2017.

Entre enero y junio de este año, según cifras de la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif), se registran 791,869 préstamos aprobados mediante tarjetas de crédito, lo que significa que hay 6,264 tarjetas nuevas circulando respecto al cierre del 2020, cuando había 785,605.

Pero si se compara con marzo del 2018 (antes que iniciara la crisis sociopolítica), cuando había 1,190,961 préstamos en tarjetas, se han perdido hasta junio de este año 399,092 créditos de este tipo, según cifras de la Siboif. En saldo, el monto pasó de 11,917 millones de córdobas a 8,966 millones, equivalente a una reducción real de 2,951 millones de córdobas de marzo 2018 a junio 2021.

2. Crédito hipotecario

Y aunque en las tarjetas de crédito se observa una recuperación, eso no se refleja en el mercado inmobiliario, pese a que la Cámara de Urbanizadores de Nicaragua (Cadur) asegura que hay una recuperación y muestra de ello es que hasta en los primeros cuatro meses dice que lograron colocar 750 casas y otros 800 nicaragüenses mostraron interés en adquirir una vivienda durante su última feria en Managua.

Cadur lo atribuye a que la banca ha decidido reabrir el grifo de los créditos hipotecarios, desde finales del 2020. Sin embargo, al menos hasta junio, los números de la Siboif no muestran recuperación.

Los datos oficiales indican que la cartera de crédito hipotecario sumaba 19,997 millones de córdobas repartidos en 19,155 préstamos, lo cual es inferior al saldo de 20,432 millones que se tenía hasta diciembre del 2020, distribuidos en 19,543 préstamos.

La contracción es más notoria si se compara con marzo del 2018, previo a la crisis, cuando se habían colocado 22,228 préstamos hipotecarios, lo que sumaban un saldo de 22,502 millones de córdobas. Los que aspiren a comprar una casa en Nicaragua como mínimo se les pide un ingreso de 500 dólares mensuales.

3. Compra de vehículos y electrodomésticos

Otro indicador ligado a la clase media es la compra de vehículos y, según el Banco Central, hasta mayo ha crecido la compra de automotores y repuestos un 61 por ciento con respecto a igual lapso del año pasado. No obstante, cuando se revisa la evolución del crédito para este tipo de bien, el mismo sigue en descenso, lo que podría indicar que detrás de ese robusto crecimiento puede estar la importación de repuestos, principalmente.

Y al igual que el crédito hipotecario, para adquirir un financiamiento de este tipo, debés tener ingresos mayores de 500 dólares al mes, además de contar con un 20 a 30 por ciento de prima.

En concreto, los datos de la Siboif indican que en diciembre del año pasado el saldo de cartera de crédito vehicular andaba en 4,745 millones de córdobas, mientras que a junio de este año se redujo a 4,284 millones; eso representa una caída de 9.71 por ciento. En cuanto al número de préstamos vehicular, hasta junio se perdieron 2,792.

De igual forma, la baja se ve abismal si se compara con marzo del 2018, puesto que para entonces había 40,252 préstamos, es decir 21,482 más que a junio de este año.

Puede interesarle:¿Por qué se están importando tantos electrodomésticos? Se dispara la compra de televisores, cocinas y refrigeradoras

4. Crece demanda de electrodomésticos

Otro indicador que podría revelar cómo está este segmento de la población es la importación de electrodomésticos, la cual ha crecido un 54.5 por ciento hasta mayo de este año, puesto que hasta el quinto mes del año pasado se habían importado 5,020 toneladas, mientras que en el mismo lapso de este año se compraron 7,756 toneladas.

Además, si se compara con los primeros cinco meses del 2017, se observa un crecimiento del 24 por ciento, puesto que hasta mayo del 2017 se compraron 6,228.9 toneladas de electrodomésticos, inferior a las 7,756 toneladas facturadas en igual lapso de este año.

Y pese a que varios de estos indicadores están mostrando un cierta recuperación y que son movidos por la clase media, el sociólogo Cirilo Otero se muestra pesimista y considera que este segmento de la población ha desaparecido.

“En Nicaragua tradicionalmente hemos ido perdiendo a la famosa clase media, que prácticamente ha desaparecido, y comenzó con la revolución sandinistas en el 1987. Lo cierto es que en el país tenemos una realidad bastante compleja, tenemos una masa bastante grande del 80 por ciento que se ha empobrecido, un 15 por ciento que se está enriqueciendo desmesuradamente y un cinco por ciento que atrapó toda la riqueza, hay una desigualdad enorme en la composición social”, dijo Otero.

Recuperar clase media es clave

Un economista, que prefirió no ser citado, explica que para que haya crecimiento económico sostenido en el tiempo se requerirá una recuperación rápida de la clase media, que es quien principalmente consume bienes y servicios.

“La clase social debería estar distribuida de la siguiente manera: un 20 por ciento de la clase alta, un 60 por ciento de la clase media y 20 por ciento de la clase pobre, es decir que debe haber un buen porcentaje de la clase media para que eso te permita crecer, porque esa es la clase que consume más, pero en el caso de Nicaragua lo que hemos tenido es una asimetría, donde tenemos una clase alta que es bien reducida, la clase baja es bastante amplia y la clase media ha sido empobrecida por la política pública”, sostuvo.

Según datos del Banco Central de Nicaragua, hasta el primer trimestre de este año el Producto Interno Bruto se había expandido 3.4 por ciento, por encima del 1.2 por ciento observado en igual periodo del año pasado, previo al impacto de la pandemia.  El consumo individual de los hogares estaba creciendo 2.3 por ciento.

Economía Clase media exclusivo premium vehiculo archivo

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí