Por supuesto que no ha habido, lo que sí ha habido en esa granja del “Buró Político del Comité Central del Partido Comunista” es una farsa de democracia en la que entre ellos mismos se reparten el poder. También existe una mal llamada Asamblea Nacional del Poder Popular que está integrado por 605 diputados del partido del régimen. Lo que prevalece es un remedo de supuesto ejercicio del “poder popular”.
Decir que hay democracia en Cuba es sueños de opio. Miguel Díaz-Canel Bermúdez, hijastro político de los hermanos Fidel y Raúl Castro, es usado para darle continuidad al proyecto comunista castrista. Pregunto: ¿quién eligió a Miguel Díaz-Canel? El sistema unipartidista de la Isla data de hace 60 años, lo que hay es disidencia.
En ese país antillano al opositor lo declaran proimperialista y otros calificativo típicos en los mal llamados socialistas. Fuera del marco de la libertad que no existe en Cuba, lo cierto es que hay pocos partidos y jefes de Estado que aún simpatizan y le patentizan respaldo al castrismo, ejemplo: Nicaragua, Bolivia, Argentina y Venezuela.
No es que avale las elecciones en los países procastristas antes señalados, donde hubo elecciones libres. En Venezuela, Hugo Chávez Frías mediante elecciones libres recibió la presidencia por parte del social-cristiano Rafael Caldera, pero con el paso del tiempo, Chávez —quien se describía como marxista y antimperialista— se alineó a los gobiernos con mentalidad socialista y al mejor estilo cubano. Venezuela, la que le llamaban la “Venezuela Saudita” por su petróleo, hoy en una segunda Haití en pobreza.
Daniel Ortega en el 2006 fue ganador de unas elecciones bien garantizadas por el conservador Enrique Bolaños Geyer, las que fueron justas, limpias y bien observadas. Y por qué no decirlo, el mismo expresidente ya fallecido lo dijo: “le entrego la mesa servida”, dirigiéndose a Ortega.
Evo Morales gobernó desde el 20 de enero del 2006 con derecho constitucional a otros mandatos en 2009 y 2014. pero con un remedo de reforma que hizo a la Constitución intentó perpetuarse en el poder vía fraude electoral. Y ante intensas protestas popular a que calificó de intento golpe de Estado, terminó exiliándose en México en 2019.
No me cabe la menor duda que estos gobernantes fueron electos por la voluntad popular, pero en más de 60 años a los cubanos no les han dado ese derecho a elegir libremente.
En la Cuba de los brontosaurios “revolucionarios” no hay verdadero sistema electoral porque no existe la democracia, lo que rige es la dictadura. Hay leyes especiales contra las libertades políticas. Ante el despertar de los cubanos —sean disidentes o no— un conflicto interno de muchos años debido a la carestía de vida y la escasez de los productos básicos; el Gobierno, en vez de buscar una salida usa las fuerzas militares. El uso de la confusión de las autoridades de ese régimen recurre oficiosamente a la sombra del antimperialismo, algo que ni ellos mismos se la creen, los fracasos ellos la crearon. Que no sigan con el cuento de que las penurias en la Isla son culpa de los Estados Unidos; pues si tiene suficientes flujos para exportar sus productos, puede comerciar con la Unión Europea y sus socios políticos Rusia, China, Irán, etc.
Esperar un sucesor mejor que Díaz-Canel, capaz de hacer un milagro en Cuba es ser iluso. Todos son iguales.
El autor es vicepresidente de APN.