La primera dama y vicepresidenta designada, Rosario Murillo, anunció este martes que el 24 de diciembre iniciará con el “banderillazo navideño de la Policía Nacional” en horas de la mañana, en ocasión de la víspera de navidad.
El último “banderillazo” de la Policía Orteguista (PO) fue el pasado sábado 5 de diciembre, con motivo del Plan María, que supone un operativo de seguridad civil por las actividades religiosas de las Purísimas. Sin embargo, lo que se vivió ese día fue el incremento de la represión policial contra los opositores a nivel nacional.
Murillo dijo en su comunicación por los medios oficialistas que “la Policía defiende a capa y espada el derecho del pueblo a vivir tranquilo, en concordia, en seguridad…”, pero en Nicaragua la Policía se dedica a reprimir, hostigar y asediar a los opositores, para evitar que protesten o se manifiesten contra el régimen de Daniel Ortega.
En diciembre de 2018, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) determinó que la Policía de Nicaragua, junto a civiles armados, cometieron “crímenes de lesa humanidad”, por orden del régimen Daniel Ortega.
En abril de ese año comenzó la represión armada contra las protestas civiles que demandan cambios del gobierno. Más de 300 personas murieron por esa represión, según un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Desde entonces, Nicaragua vive bajo sitio policial, no se permiten protestas, oposición ni reclamos al gobierno, y se encarcela a quienes salen a manifestarse.