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Broca café

LA PRENSA/ A. LORÍO

Un hongo puede ser la solución a la broca del café

El Beauveria bassiana es un hongo que crece de forma natural en todos los suelos y cuya capacidad de invadir insectos de diferentes especies lo convierte en un potente insecticida biológico.

Pese a que el sector privado mantiene la petición de que se abra la frontera a insecticidas elaborados con endosulfán —pues los consideran la única opción para frenar la plaga de broca que afecta actualmente los cafetales— cada día surgen nuevas evidencias de la eficacia del hongo Beauveria bassiana para erradicarla. A la defensa de este mecanismo de control biológico que hacen los promotores de la agricultura orgánica se suma un estudio realizado por instancias especializadas.

No obstante, representantes del sector cafetalero consideran que su poca disponibilidad, la ausencia de un organismo rector que avale su uso y hasta el desconocimiento de su oferta evitan la masificación de su uso.

El Beauveria bassiana es un hongo que crece de forma natural en todos los suelos y cuya capacidad de invadir insectos de diferentes especies lo convierte en un potente insecticida biológico.

En tanto, el endosulfán es el ingrediente activo de insecticidas y acaricidas que por décadas se usaron en el país, últimamente con ciertas restricciones. Pero debido a su alta toxicidad hace unos seis años Nicaragua decidió seguir los pasos de otros cincuenta países que han prohibido su comercialización y uso.

Pero hace algunas semanas la Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (Upanic) solicitó a las autoridades levantar la prohibición de importarlo, ya que aseguran es el único producto que puede frenar la incidencia de la broca.

ENTRA DE CONTRABANDO

Además, según el presidente de Upanic Michel Healy, al levantar esta prohibición se evitará que el endosulfán siga entrando de contrabando y usándose indiscriminadamente, “ya que esto puede ser más dañino para el manto acuífero y el subsuelo”.

Hasta ahora la petición no ha recibido respuesta, ya que el Gobierno realizó un monitoreo en 127 fincas y según Healy la incidencia que encontró fue del 1 por ciento. Ante este hallazgo Upanic decidió inspeccionar las fincas para determinar el grado real de afectación, ya que representantes del sector dicen que anda entre el 12 y 15 por ciento. De momento la recomendación es otra opción, usar trampas y no dejar granos en el suelo para evitar que la plaga se continúe propagando.

Sin embargo, un estudio que inició en 2013 determinó la eficacia del hongo Beauveria bassiana en el control de la broca del café “comprobando así que hay alternativas amigables con el medioambiente y la salud humana distintas al uso del endosulfán”.

La investigación surgió como respuesta a la prohibición de usarlo y para reducir la toxicidad en el medioambiente.

En su momento participaron el Ministerio Agropecuario y Forestal (Magfor) —antes del cambio de nombre y funciones—, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés) y la empresa Agritrade de Nicaragua.

Se establecieron cinco parcelas demostrativas. Tres en fincas de Matagalpa y dos en Jinotega y en todas ellas se constató la eficacia del hongo para el control de la broca, explica Luis Rafael Salgado Rosales, gerente general de Agritrade.

COMBINADO CON LABORES NORMALES

Según Salgado, las únicas condiciones que requiere el uso del hongo es que la incidencia sea baja y que haya humedad relativa alta o lluvia “que la mayoría de zonas altas la tienen, porque en las zonas altas, aunque no llueva a partir de junio, las condiciones ambientales proporcionan la humedad requerida.

Adicionalmente se deben realizar las actividades culturales propias de la actividad, como recepa para asegurar la renovación de la vegetación, recoger los rastrojos y los granos de café para evitar que otros hongos se desarrollen.

También se deben realizar las actividades agrícolas propias de cada fase del ciclo cafetalero.

De darse el caso de que el hongo no logre el control total de la plaga, Salgado dice que queda la opción de combinar su uso con el de químicos de baja toxicidad o banda verde, cuyo uso está autorizado por el Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria (IPSA), entre ellos Tiametoxam o Benzoilfenil urea.

Se estima que de las 180,200 manzanas de cafetales que existen en el país solo entre el 15 o 20 por ciento utiliza este mecanismo de control biológico. Para Salgado las razones culturales son el principal obstáculo para la masificación del uso de este hongo, ya que los cafetaleros están acostumbrados a usar productos que actúan al momento de aplicarlo y este toma hasta siete días para actuar.

Sin embargo, Aura Lila Sevilla Kuan, dirigente de la Alianza Nacional de Cafetaleros de Nicaragua (ANCN) asegura que es la poca disponibilidad la que impide el uso masivo de este hongo.

Accesible y a bajo costo
El uso del hongo Beauveria bassiana como mecanismo para el control de la broca requiere de unos 400 gramos del producto por cada manzana de cafetal. Esto representa un costo de unos veinte dólares por manzana y deben realizarse entre dos y tres aplicaciones en cada ciclo productivo. “Se recomienda utilizar el hongo al inicio de las lluvias y una vez que se establezca el invierno, de ser necesario combinarlo con productos químicos”, dice Luis Rafael Salgado Rosales, gerente general de Agritrade.

CAFETALEROS “HUÉRFANOS”

“La gente que produce plaguicidas orgánicos ofrece cantidades pequeñas. Entonces de qué me sirve ponerle a veinte o treinta manzanas y con el resto qué voy a hacer”, cuestiona la también presidenta de la Asociación de Cafetaleros de Matagalpa (Asocafemat).

Además, quién me garantiza la efectividad, porque la producción de café orgánico es muy poca para tomarla como referencia. A diario, según Sevilla Kuan aparecen decenas de empresarios ofreciendo productos “que dicen son la octava maravilla” pero mientras no existe una entidad gubernamental o un laboratorio privado que avale su eficacia, siempre habrá reservas de parte de los productores.

“Mientras en el país no exista investigación, validación ni certificación de productos para el café esto va a seguir así, porque quién avala su eficacia y hay estafas de estafas, entonces no vamos a invertir en algo que oficialmente nadie lo valida”, sostiene Sevilla Kuan.

En cuanto al hongo que se está reproduciendo industrialmente, la dirigente dice desconocerlo e insiste en la necesidad de establecer un laboratorio que avale estos productos.

“Pero el laboratorio que ofreció la Conatradec (Comisión Nacional para Transformación y Desarrollo de la Caficultura) sigue en veremos, esto representa la orfandad en que estamos los cafetaleros porque esa comisión cada vez es más burocrática y el Estado tampoco actúa, estamos a la deriva”, lamenta Sevilla Kuan.

CÓMO ACTÚA EL HONGO

El Beauveria bassiana es un hongo que al caer sobre la piel del insecto (la broca) genera una sustancia que la ablanda y le permite traspasarla para entrar a su sistema interno. Una vez dentro del insecto se disemina y desarrolla y se alimenta de la hemolinfa (que es el equivalente del sistema sanguíneo de los humanos) esto provoca la obstrucción de sus diferentes sistemas hasta causarle la muerte al insecto. Este proceso toma varios días, detalla Luis Rafael Salgado Rosales, gerente general de Agritrade.

El hongo se encuentra en el ambiente y existen diversas cepas que se pueden reproducir en el laboratorio. La agresividad con la que actúa contra la broca depende del tipo de cepa que se elija. Este puede reproducirse entre los ocho y los cuarenta grados y es altamente sensible a los fungicidas por lo que su uso no puede combinarse con estos.

Se reproduce artesanalmente y también de forma industrial en laboratorios de algunas empresas dedicadas a la elaboración de productos biológicos. Este organismo vivo debe mantenerse a una temperatura estable de entre 20 y 23 grados y una vez aplicado se reproduce y se transporta a través del ambiente, que luego muere por las altas temperaturas por lo que debe aplicarse cada año, explica Salgado.

Economía Broca café Endosulfán archivo

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