Un grave deterioro a las viejas unidades de buses y un aumento en el riesgo para los cientos de miles que a diario usan las rutas urbanas de la capital es lo que ocurre con el empeoramiento de las principales vías de Managua.
A Claudio Almendárez, conductor de la ruta 116, el problema en las vías le provocaron que hace un mes se le quebraran las hojas de resorte del bus ruso que conduce.
- El mecánico Jorge Medal, con más de 20 años de experiencia, asegura que, ante los problemas de calles dañadas, lo mejor es el mantenimiento.
Con la hoja de resorte quebrada, el eje trasero del bus simplemente puede despegarse y eso es un riesgo mortal. El otro problema es que con las calles malas, la dirección del vehículo también sufre, indicó. En zonas como el barrio Las Torres, además del problema de las calles hay mucha inseguridad y los conductores de la ruta 165 ya anunciaron que dejarán de circular en ese barrio.
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Almendárez circula desde Villa Libertad pasando por el mercado Iván Montenegro, Rubenia, Multicentro, Tenderí, Ciudad Jardín, hasta el Seminario. Sin embargo “los tramos que están peores son los de la pasada cuando venimos por Mataburros Pancasán, la Chelita en Distrito VII, en la entrada de la Texaco en Guanacaste”, indicó.
Lo más grave, para él y hasta para los usuarios “es que estas hojas de resorte sólo las venden en Albatransporte y la piña cuesta 3, 500 córdobas. Entonces ni modo, la tuve que soldar y así la andamos”.
En el tramo que recorre la ruta 111 también hay serios problemas.
“Nosotros tenemos bastantes problemas por el mal estado de Los Laureles, que está (con la carretera) desbaratada y tiene años de estar así. La ruta que va de la Kativo a la Shell Waspán también está desbaratada y de Enel a la UNAN también está desbaratada”, cuenta Rigoberto Beteta, conductor de un bus de la ruta 111.
BUSES DESBARATADOS
En Managua, unos 800 mil usuarios utilizan a diario las rutas urbanas.
“Estos buses siempre andan fregados y la verdad es que las calles tampoco están buenas, entonces los que sufrimos al final de este cuento somos nosotros”, asegura Martha Irene Quezada, una de las usuarias que ayer viajaba en la ruta 111.
Para los usuarios de las casi diez rutas que circulan en el sector del mercado Oriental, la situación también es difícil.
“Parece que se olvidaron del Oriental; ya van como dos o tres años que no le dan mantenimiento a esta zona. Las vías están desbaratadas; todo eso ya no sirve (…) a mí ya se me quebraron las hojas de resorte por los hoyos”, indicó Marvin Ramírez, conductor de la ruta 172.
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