Rosa María Catriciano y otra hermana sollozaban ayer mientras suplicaban que alguien de la Estación Tres de Policía las atendiera, pues según dijeron a LA PRENSA tienen días de estar llegando muchas veces a pie y aguantando hambre, en busca de justicia pues tienen un sobrino grave tras ser atropellado y el autor anda libre.
Las afectadas dijeron que su sobrino Walter José Aguirre, de 19 años, quien quedó mutilado de una de las piernas y con raspones en todo el cuerpo, urge de una cama y una silla de ruedas y no se las pueden dar porque ellas son muy pobres.
Angustiadas dijeron que cuando le ponen una inyección que cuesta 75 córdobas, pasan varios días casi sin comer en la casa, pues tienen grandes dificultades de dinero.
Molestas dijeron que la Policía no les da respuestas y ni siquiera pasaron el caso a la Fiscalía.
Relataron que Aguirre con un hermano y su padre, fueron secuestrados en el Malecón la madrugada del primero de enero por dos sujetos y dos mujeres a quienes les ayudaron a empujar supuestamente una camioneta placas M 097449 en ese sector y a cambio les ofrecieron ride .
Sin embargo, estando en el kilómetro 7 Sur los lanzaron del vehículo y luego se lo echaron encima, sufriendo Aguirre la peor parte.
Agregan que supuestamente el vehículo es de un policía de nombre Uriel de dicha delegación y que los autores fueron reconocidos por las víctimas, pero gozan de libertad.
Según las denunciantes, ya no hayan a quién más recurrir para que se haga justicia pues señalaron que “ no es justo que los autores anden libres y felices mientras el joven sufre depresión por la condición en que lo dejaron y no puede valerse por sí solo”.
Las angustiadas parientes piden a la población que les ayuden a conseguir una silla de ruedas aunque sea usada y esperan que otro organismo les apoye con el medicamento y quizás con apoyo psicológico para el afectado.
Hicieron un llamado a la primera comisionada para que les apoye igual al Ministerio Público Central.
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