Me dice un amigo lector que leyó en un antiguo poema el nombre de Ifis y pregunta si hay algún mito acerca de un personaje así llamado.
Por lo que sé, en la mitología griega se menciona a varias personas de ambos sexos con ese nombre. Ifis era uno de los legendarios reyes de Argos. También se llamaba Ifis uno de los argonautas, o sea los aventureros que participaron en la expedición al Cáucaso para apoderarse del Vellocino de Oro, que fueron llamados de esa manera porque viajaron en un barco llamado Argos. Otro Ifis fue el padre de Eteocles, un héroe de la guerra de Argos contra Tebas, de quien se decía que su verdadero progenitor había sido Ares, el dios de la guerra. Ifis se llamaba una hermosísima doncella que Aquiles le regaló a su amigo Patroclo, después de conquistar la isla de Esciros, durante la Guerra de Troya. E Ifis era un joven de condición humilde que se enamoró de una hermosa princesa chipriota llamada Anaxáreta, hija de Teucro, rey de Salamina. Este Ifis se suicidó frente a la residencia de Anaxáreta, decepcionado porque la bella princesa no había correspondido a su amor.
Pero la Ifis más conocida de la mitología griega era una hija de Licto y Teletusa. Estos habitaban en Festo, una ciudad situada en la parte sur de la isla de Creta. Licto era comerciante y por su profesión a menudo tenía que viajar a otras ciudades.
Un día, antes de emprender un largo viaje, Licto le ordenó a su mujer, quien estaba embarazada, que se deshiciera de la criatura en el caso de que naciera niña, porque él quería un varón.
Teletusa quedó angustiada, porque su naturaleza maternal la obligaba a conservar y amar al ser que naciera de sus entrañas, pero por otro lado tenía el deber de acatar la voluntad del marido. Así se encontraba Teletusa cuando una noche, ya cerca del alumbramiento, vio en sueños a Isis, la diosa madre de los egipcios, quien le reveló que tendría una mujercita y le aconsejó que la disfrazara y educara como varón, para engañar al marido y preservarle la vida.
Nació la niña y su madre la llamó Ifis, nombre que igual se usaba para varones que para hembras. Y tan bien fue disfrazada y educada como varón, que Licto cuando regresó no dudó que lo fuera.
Pasó el tiempo, Ifis llegó a la pubertad y su padre quiso casar a Ifis, a quien creía varón, con una hermosa y rica muchacha de la ciudad llamada Yante. Teletusa ponía un pretexto tras otro para retrasar la boda, hasta que ya fue imposible seguir dando largas al asunto.
Teletusa invocó a Isis y le rogó ayuda para salir de aquella angustiosa situación, y la diosa le respondió. Así fue que en el momento en que se estaba realizando la ceremonia nupcial, Ifis se transformó milagrosamente en varón. E Ifis, después de haber consumado felizmente su matrimonio, pues ya no era hembra, sino hombre y amaba a Yante, fue al templo de Isis a hacer un sacrificio en acción de gracias. Después de consumado el sacrificio, Ifis grabó en la entrada del templo la siguiente inscripción: “Gracias a Isis, el joven Ifis cumplió los votos que hizo siendo doncella”.
Esa leyenda la contó el eminente mitólogo francés del siglo XIX, Jean Francois Michel Nöel, en su monumental Diccionario de Mitología Universal , de cuyo texto he adaptado esta versión.
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