Josué Bravo
CORRESPONSAL / COSTA RICA
Miles de nicaragüenses que retornan vía terrestre desde Costa Rica, tienen que atravesar una frontera sucia, vieja y abandonada, ubicada en Peñas Blancas, en el lado costarricense. Según Migración y Extranjería, de 45 mil personas que cruzarán de Costa Rica hacia Nicaragua por este puesto fronterizo, 40 mil son inmigrantes nicaragüenses.
Las oficinas migratorias de Costa Rica ubicadas en esta frontera, ocupan el diez por ciento de un viejo edificio construido hace 50 años. El restante 90 por ciento lo ocupa un restaurante. Es por eso que los usuarios deben hacer enormes filas para sellar su pasaporte a la intemperie y debajo del sol, muchas veces entre el polvo; sin sillas donde esperar y sin acceso a servicios sanitarios.
Para hacer necesidades fisiológicos el viajero debe pagar 100 colones (alrededor de 3 córdobas) a los administradores del restaurante o al responsable de una terminal de buses hacia San José.
Además de cansado, al viajar entre Costa Rica y Nicaragua o viceversa, las persona tienen que atravesar una frontera sucia con mucho polvo en ambos lados de la aguja que divide a los dos países, porque la de
Nicaragua tampoco presta las condiciones óptimas para los viajeros.
Aparte de las carencias, el poco personal que atiende en las oficinas costarricenses genera enormes filas que desgatan al transeúnte.
Costa Rica anunció que realizará mejoras en su viejo edificio de Peñas Blancas, para facilitar la atención y tránsito de turistas nacionales y extranjeros, incluido a miles de nicaragüenses que anualmente cruzan esta frontera, pero aún se desconoce con exactitud la fecha en que será remodelado.
El director general de Migración, Mario Zamora, informó que hasta febrero la administración de este viejo edificio estaba en manos del Instituto Costarricense de Turismo (ICT), pero tras firmar un convenio que los traspasa a la entidad que él dirige, podrá brindar un mejor acondicionamiento de las áreas para atender a los usuarios.
“Este acuerdo es un gran paso en tarea que ha venido realizado la Dirección de Migración para mejorar los servicios que ofrece en todas sus oficinas”, indicó Zamora.
Dentro del convenio también se acordó que el ICT colaborará con la instalación de un sistema de tratamiento de aguas residuales y pluviales para evitar la contaminación en la zona; ya que por este puesto fronterizo transitan aproximadamente un millón cien mil personas anuamente, en su mayoría nicaragüenses que viajan a Costa Rica
a trabajar.