Tendré la ilusión de haber amado
cuando te vayas o regreses,
el ayer nunca será olvidado
cuando con el destino te tropieces.
La gran Torre de Babel me hablará,
podré conocer el inmenso Amazonas,
porque el mágico amor te tocará
cuando te niegues a querer más.
Amor, tan ajeno para otros,
tan difícil para otros;
que emerge de los fogosos humos
haciendo una partida mil destrozos.
Por él, por ti, pierdo la ilusión,
me recorre la incertidumbre,
y me nubla la destructible razón.
No te detengas, aunque duele razonar;
llegaría por ti mi temida soledad
y contigo o sin ti me resignaría
a que duele volver a amar.
Conaryssa Rothschuh