Cuando Luis Guillermo Argüello Sánchez falleció el pasado 13 de agosto en su casa en Nandaime, los doctores dijeron que fue a causa de un fulminante infarto.
Argüello, de 62 años, tenía un mes de sentirse mal y estaba en cama, pero los médicos no detectaron qué estaba mal.
Por una coincidencia, los hijos de su primer matrimonio se enteraron a inicios de diciembre que su papá pudo haber sido envenenado por su esposa, al mejor estilo de “Castigo Divino”, el reconocido libro de Sergio Ramírez.
Las sospechas hicieron que denunciaran el caso ante la Policía de Nandaime, en el departamento de Granada.
Exhumación de cadáver
La familia doliente exigió que el cadáver de Argüello Sánchez fuera exhumado, acción que se cumplió el pasado 6 de diciembre para realizarle una autopsia.
El 9 de diciembre el doctor Hugo España del Instituto de Medicina Legal (IML) tenía los resultados y confirmó las sospechas de los hijos de Argüello: su muerte no había sido natural.
Las investigaciones de la Policía llevaron a la detención de Braxy Yahoska Gutiérrez Castillo, de 34 años, quien era la esposa de Argüello.
Según información extraoficial, Gutiérrez habría proporcionado un “coctel” de distintos medicamentos para acabar con la vida de su esposo, entre los que había sedantes y hasta colirios, los cuales se los daba a beber en refrescos.
Detenida y en prisión
La Fiscalía interpuso acusación contra la mujer el pasado 22 de diciembre y al día siguiente Braxy Gutiérrez fue llevada esposada a los Juzgados de Granada al banquillo de los acusados.
Gutiérrez es acusada del delito de homicidio. La mujer procreó dos hijos con Argüello.
Una de las hijas mayores de la víctima publicó este viernes en su cuenta personal de Facebook: “¡El crimen perfecto no existe!”.
El juez Armando José Mejía Somarriba, del juzgado Distrito Penal de Granada, le decretó la prisión preventiva a Braxy Gutiérrez y admitió la acusación en su contra. La mujer enfrentará audiencia inicial hasta el 12 de enero de 2023. En esa audiencia se decidirá si es enviada o no a juicio por el crimen de su esposo.