Una final con emociones inesperadas, cargada de sorpresas y más cuando el Real Estelí parecía haber tomado las riendas del encuentro con el gol de Harold Medina que los colocaba dos goles por encima sobre el Walter Ferretti en el marcador global. Sin embargo, los capitalinos salieron de la tumba con el empate 1-1 al 61’ con gol del colombiano Yeison Mosquera en el remate, mientras que al 66’ Ronald López voló para cabecear un centro de Ismael Mendieta para voltear el marcador 1-2 y obligar el tiempo extra (4-4). La final con drama incluido se decidiría en la pena máxima en donde Douglas Forvis se convirtió en el héroe de la noche con dos atajadas, con espaldarazo del árbitro por no tener el valor suficiente de obligar a la repetición de esos disparos por el adelantamiento indebido del arquero.
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Y es que lo ocurrido en los 120 minutos anteriores se olvidaba, todos los focos estaban en la tanda de penaltis y ahí en esa caldera ardiendo, el árbitro central Miller López salía reprobado por ignorancia o cobardía. Estelí abría la tanda con Pablo Gállego batiendo al Pulpo Espinoza, entretanto Ismael Mendieta fallaba su disparo tras el adelantamiento de Forvis y la mirada perpleja de todos. Continuó Douglas Caé por Estelí y Jonathan Moncada por el Ferretti marcando sin problemas, luego Monserrat, Somarriba, Vinicius y el Pulpo cumplieron en sus tiros.
4-3 perdía el Ferretti y Brandon Ayerdis debía anotar para sentenciar la final, sin embargo, apareció el tentáculo del Pulpo para detener su disparo con ilegalidad incluía, al igual que Forvis, Espinoza aprovechó la inacción del central, adelantándose antes del disparo. Luciano Sanhueza era el encargado por el Ferretti de continuar soñando con arrebatarles el título en casa al Estelí y obligar la muerte súbita, no obstante, su disparo fue detenido por Forvis, quien nuevamente se adelantó descaradamente, dándole el título 19 al Tren del Norte y el boleto a la Liga de Campeones de la Concacaf.
