Este viernes, el Ministerio de Salud (Minsa) finalmente actualizó el sitio web del Mapa Nacional de Salud de Nicaragua, que revela que en el 2021 murieron 33,582 nicaragüenses, 8,244 personas más que en 2019, antes de que apareciera la pandemia de la covid-19 en el mundo y llegara a Nicaragua.
El Mapa Nacional de Salud de Nicaragua es un sitio web que solía ser actualizado cada cuatrimestre, pero no sé actualizó ni una vez en 2021.
Según las nuevas cifras reveladas de 2021, la mortalidad del país se ubicó en 50.4 muertes por cada 10,000 habitantes frente a los 51 por cada 10,000 habitantes en 2020. Sin embargo, antes de que llegara la pandemia de la covid-19, ese indicador andaba en 35.6 fallecimientos por 10,000 habitantes.
El Mapa de Salud indica que en 2021 fallecieron 33,582 personas por diferentes enfermedades, 68 menos que en 2020, cuando se registraron 33,650 decesos, pero no se refleja un gran impacto de la pandemia en el país.
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De acuerdo con el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, en Nicaragua solo han fallecido 225 personas por la covid-19, una cifra que muy pocos en el país consideran verdadera, tomando en cuenta que desde el principio la dictadura se esmeró en ocultar el verdadero impacto de la pandemia, y que un monitoreo independiente, del Observatorio Ciudadano, registra 5,984 muertes sospechosas de esta enfermedad.
2021 carente de información precisa sobre la pandemia
Desde la llegada de la pandemia de la covid-19, en marzo de 2020, el régimen no solo decidió ocultar información sobre la incidencia del nuevo coronavirus en el país, sino que, de acuerdo con voces médicas independientes, manipuló la información correspondiente a la situación de la pandemia y de otros padecimientos del país.
Desde que se reportó el primer caso de coronavirus en el país, hasta el 23 de febrero de este año, el Observatorio Ciudadano covid-19 Nicaragua reporta 32,032 casos sospechosos por el virus y 5,984 decesos posiblemente por esta enfermedad.
El Minsa solo ha reportado 13,958 casos confirmados y 225 fallecimientos.
El Mapa Nacional de Salud es un sitio web administrado por el Minsa. Contiene información sobre las enfermedades crónicas que padecen los nicaragüenses, las causas de hospitalización en el país, las causas de muertes en general, los tipos de tumores malignos que padece la población, la situación del VIH en el país, la situación de las enfermedades epidémicas e infecciosas y la inmunización (vacunas) de varias enfermedades. Durante 2021 se mantuvo desactualizado, como si en ese año no se hubiera reportado ninguna enfermedad, muerte o epidemia en Nicaragua.
Suben decesos en otras enfermedades
Según el Mapa de Salud, la primera causa de fallecimiento en el país fue el infarto agudo del miocardio, un padecimiento que provocó la muerte de 5,174 nicaragüense en 2020, y de 6,481 personas en 2021. Sin embargo, en 2019, solo 3,097 personas fallecieron por esa causa.
En segundo lugar, se posicionó la diabetes mellitus, una enfermedad que cobró la vida de 4,132 personas en 2020, y provocó 3,926 decesos el siguiente año. En 2019, antes de la pandemia, 2,253 nicaragüenses murieron de esta enfermedad.
En tercer puesto se encuentran los tumores malignos, que acabaron con la vida de 3,070 personas en 2020 y de 2,918 nicaragüenses en 2021.
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El cuarto lugar lo ocupó las enfermedades hipertensivas, que en 2020 se encontraban en el séptimo puesto. En 2020, causaron la muerte de 1,636 personas y en 2021 esta cifra se ubicó en 2,351. Pero, en 2019, solo 1,095 fallecieron por esa causa.
“Neumonía atípica”
Por otro lado, desde que se estableció la pandemia en Nicaragua, familiares de fallecidos con síntomas atribuibles al virus denunciaron que las autoridades de salud les extendieron epicrisis en las que se hacía contar que la causa del deceso había sido por “neumonía atípica”, pese a que les exigían que los “entierros exprés”.
Los números oficiales revelan que la neumonía terminó en 2021 en el puesto número cinco de las enfermedades que más provocaron muertes en Nicaragua, después que ocupó la posición número cuatro en 2020.
Sin embargo, en 2019, la neumonía era la novena enfermedad que provocaba muertes en el país, con apenas 539 fallecimientos.
“La covid-19 ya casi va de salida”
El epidemiólogo nicaragüense Álvaro Ramírez considera que, mientras no se demuestre lo contrario, todo aumento en la mortalidad del país puede atribuirse a la enfermedad que está afectando a la población en la actualidad y esa es la covid-19.
De acuerdo con el especialista, que vive en Europa, “la covid-19 ya casi va de salida”, pero aún así dejó entrever que las autoridades de salud nicaragüenses seguirán con su política de ocultamiento de la información.
“La covid-19 ya casi va de salida ¿Qué sucede en Nicaragua? Si el sistema de salud no hizo las cosas correctamente cuando el covid era severo en el 2020 o en el 2021, el Minsa no hará cambios a esta hora. Bueno, aunque nunca se sabe con estas personas. Pero ya el resto del mundo va saliendo de la covid, ya van relajando las medidas, ya se abrieron los hoteles, restaurantes, bares, etcétera. Ya hasta están sin restricciones de mascarillas”, opinó.
Explicó que la nueva variante ómicron y los programas de vacunación facilitaron el crecimiento de la inmunidad y que también se ha aprendido a manejar la pandemia.
Hospitales colapsaron en 2021
Entre mayo y septiembre de 2021, en Nicaragua se experimentó un repunte de casos de covid-19.
Tanto el Minsa, como el Observatorio Ciudadano, registraron ese incremento, aunque en distintas proporciones.
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Asimismo, el 1 de septiembre del año pasado la Organización Panamericana de la Salud (OPS) confirmó, a través de los datos oficiales del Minsa, que Nicaragua estaba viviendo un rebrote de la covid-19.
“Los datos oficiales del Ministerio de Salud de Nicaragua nos demuestran que ha habido un incremento del 12 por ciento cuando comparamos la incidencia entre las últimas dos semanas. Otras fuentes de información que captamos a través de nuestra vigilancia basada en eventos, nos dicen que los casos están distribuidos en todos los departamentos y regiones autónomas”, declaró durante una conferencia de prensa Enrique Pérez, asesor en Prevención y Control de Enfermedades de la OPS.
El rebrote del virus provocó el colapso del sistema de salud de Nicaragua. A mediados del año pasado, reportes de este Diario, con base en fuentes médicas independientes, señalaron que las salas de covid-19 se encontraban llenas de familias enteras contagiadas.
Los reportes describían un significativo aumento en el número de nicaragüenses acudiendo a los hospitales con graves afecciones respiratorias o muriendo por “neumonías atípicas”.
El 1 de junio, las asociaciones médicas alertaron mediante un comunicado que el virus en Nicaragua se encontraba en una etapa de “expansión acelerada” y “transmisión comunitaria” y convocaron a los ciudadanos a realizar una Cuarentena Nacional de forma voluntaria ante la falta de medidas del Gobierno.
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Los médicos denunciaban que el aumento exponencial de casos provocó un colapso del sistema de salud, tanto público como privado, generando “hospitales saturados, falta de camas, falta de medicinas y de productos tan esenciales como el oxígeno, se suman al hecho de que decenas de médicos y trabajadores de la salud se estén contagiando por la covid-19, con un saldo de un número importante de médicos, enfermeras y técnicos fallecidos”.
Datos del Observatorio indican que desde marzo de 2020 hasta el 23 de febrero de este año, un total de 1,430 trabajadoras y trabajadores de salud han sido reportados con sintomatología asociada o presuntiva del virus en todos los departamentos y regiones del país. Asimismo, al 23 de febrero reportan 235 muertes de personal de salud por causas sospechosas de la covid-19.
Mientras los hospitales públicos y privados reportaban ese incremento en hospitalizaciones y fallecimientos, el Minsa nunca pasó de registrar la muerte de una sola persona en la semana.
Jornadas de vacunación intensas
Entre agosto y septiembre del año pasado se intensificaron las jornadas de vacunación contra la covid-19 en el país. Se observaban kilométricas filas de nicaragüenses, que se formaban 24 horas antes, a veces bajo lluvia o del sol.
Desde tempranas horas la población colocaba sillas en las aceras para reservar sus lugares e inocularse con las vacunas que aplicaban las autoridades de salud.
Desde finales de septiembre se comenzó a registrar un descenso en los casos de covid-19 hasta principios de enero pasado, pero en las últimas semanas el Minsa ha registrado un incremento, que se podría deber a la aparición de la variante ómicron. Sobre esto, el Minsa tampoco habla.