14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Pedro Joaquín Chamorro Cardenal y la matanza del 22 de enero de 1967

Este 22 de enero de 2022 recordamos, como todos los años, uno de los episodios más sangrientos de la lucha política en el período histórico de la dictadura somocista.

El 22 de enero de 1967, al terminar  el programa de una manifestación política electoral de la oposición, ocurrió un incidente armado al cual el Ejército, entonces llamado Guardia Nacional (GN), respondió disparando a discreción contra la multitud. El saldo fue de alrededor de 200 muertos y una gran cantidad de heridos, según reporte de la Cruz Roja Nicaragüense.

La multitudinaria manifestación opositora era por el cierre de campaña electoral de la Unión Nacional Opositora (UNO), que llevaba como candidato presidencial al líder conservador Fernando Agüero Rocha y su coordinador nacional era el doctor Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, histórico director de LA PRENSA.

En el trasfondo de la tragedia estaba el recurrente problema político de Nicaragua que ha sido causa de guerras y matanzas entre hermanos nicaragüenses: la falta de elecciones libres y alternabilidad democrática en el ejercicio del poder presidencial.

En su discurso en la Plaza de la República, Agüero invitó al alto mando militar a sostener un diálogo con la oposición con el fin de acordar la posposición de las elecciones programadas para el 5 de febrero, y celebrarlas después de que se establecieran garantías legales y políticas de una elección limpia y libre, garantizada por la observación electoral de la OEA.

El día anterior, sábado 21 de enero, el doctor Chamorro Cardenal publicó en LA PRENSA un significativo editorial dirigido a los altos mandos de la Guardia Nacional, en el cual expresó: “Las Fuerzas Armadas son para proteger los derechos del ciudadano, y entre sus derechos está el de manifestar libremente, sin coacción, su voluntad a través del voto secreto, y también el derecho a que ese voto secreto, se cuente limpiamente”. 

Pero la fuerza militar del Estado desoyó el llamado patriótico del doctor Chamorro Cardenal, prefirió mantenerse fiel a la dictadura y disparar contra el pueblo, como otras veces lo ha hecho a lo largo de la azarosa y dramática historia política de Nicaragua.

El director de LA PRENSA  fue encarcelado junto con toda la dirigencia opositora. Sin embargo, a principios de  marzo de 1967 todos los presos políticos fueron liberados, gracias una amnistía dictada por el gobierno del dictador, general Anastasio Somoza Debayle, quien el 5 de febrero anterior había sido “electo” en un fraude electoral.

En el primer editorial de LA PRENSA, después de los sucesos del 22  de enero, publicado el 15 de marzo de 1967, el doctor Chamorro Cardenal dijo que no podía “entender cómo ha podido aflorar tanta bestialidad  en acciones de muchos hombres de mi propia tierra…”

Sin embargo, el director del Diario de los Nicaragüenses agregó: “No voy a inventariar el dolor ni me propongo recordar cómo y de dónde vino la afloración del salvajismo”. E indicó que era necesario esforzarse en olvidar y “concedernos mutuas amnistías”.

Pero eso no significaba la renuncia del doctor Chamorro Cardenal a la lucha por la libertad y la democracia, por elecciones libres y alternabilidad en el poder. A lo que renunció fue a la violencia como forma de lucha política, la que continuó cívicamente sin tregua ni descanso, hasta que lo asesinaron en la mañana del fatídico 10  de enero de 1978.

Editorial LA PRENSA periódico LA PRENSA archivo
×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí