La muerte de al menos cuatro sacerdotes a causa del Covid-19 en lo que va de agosto tiene en alerta a la comunidad católica. Monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador de la Diócesis de Estelí, alertó que la pandemia está dejando una «tendalada» de muertos y enfermos en el país, por lo que llamó a no estar ajenos a la realidad que enfrentamos.
«Yo sé que hay hermanos que de pronto les entra tanta aflicción por la pandemia y claro que es comprensible (…) aunque no tengamos directamente un familiar con el Covid-19, pero es la sociedad, en el mundo que está siendo azotado por una pandemia, un virus que está dejando tendalada de muertos en el mundo, en Nicaragua está dejando tendalada de muertes, miles de enfermos y eso, claro, duele el corazón», manifestó el religioso.
El cardenal Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua, dijo este miércoles que 13 sacerdotes han fallecido con síntomas asociados de Covid-19 en todo el país desde marzo de 2020, pero la cifra aumentó a 14 con el fallecimiento del sacerdote Francisco Valdivia, párroco de la iglesia San Juan Bosco y director de Cáritas Diocesana de la ciudad de Estelí, quien falleció la tarde del miércoles.
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«Afligirnos por las enfermedades es comprensible, preocuparnos por la situación del país es necesario, pero lo que no es correcto es que esas aflicciones y esas preocupaciones reinen en nuestras vidas, porque Cristo es el que nos sostiene», dijo al respecto monseñor Álvarez.
El acelerado incremento de casos de Covid-19 que se registran en Nicaragua y el agresivo comportamiento de la enfermedad, que mantiene en estado delicado a otros sacerdotes católicos, podría forzar a las autoridades eclesiales a suspender la participación de los feligreses en los actos religiosos presenciales, según declaró Brenes.
Parroquia de Ticuantepe suspende misas
La primera parroquia en tomar medidas fue la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, del municipio de Ticuantepe, Managua. A través de un comunicado se informó que a partir de este sábado 21 de agosto se suspenden “por un periodo prudencial” las eucaristías en todas las comunidades del municipio.
También se suspenden temporalmente la celebración de misas de cuerpo presente, las confesiones y las visitas de los sacerdotes a los enfermos.
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Únicamente habrá misas presenciales en el templo central parroquial y las capillas Perpetuo Socorro, Inmaculado Corazón de María (del Reparto) y San José (de Cuatro Esquinas) en los horarios establecidos. En dichas celebraciones se aplicarán protocolos de seguridad por lo que se solicita a los feligreses presentarse veinte minutos antes de la hora fijada para la misa.
Dicho protocolo contempla el uso obligatorio de mascarilla para adultos y niños, toma de temperatura, lavado de manos y aplicación de desinfectante, antes de ingresar al templo. Para garantizar el distanciamiento, solo se permitirá que se sienten tres personas en las bancas grandes y dos en las pequeñas; las bancas también se ubicarán respetando la distancia.
Desde ahora, el párroco Yuer Baltodano también solicita a los feligreses que asistan a las celebraciones eucarísticas que tanto dentro como fuera del templo eviten agruparse para platicar. A los grupos de riesgo y a las personas que presenten algún síntoma les piden que eviten asistir de manera presencial a las misas y los invitan a unirse a ellas a través de las transmisiones en Facebook.
