La vicepresidenta del Parlamento Europeo, Dita Charanzová, reveló este martes que el grupo legislativo estaría discutiendo y aprobando en julio próximo una nueva resolución para ampliar las sanciones selectivas en Nicaragua y a su vez iniciar el proceso de activación de la cláusula democrática, que suspendería la participación del país dentro del Acuerdo de Asociación (AdA) con la Unión Europea (UE).
En declaraciones al medio de comunicación por suscripción NTN24, la funcionaria del Parlamento Europeo recordó que en octubre del año pasado aprobaron una resolución y “estamos hablando sobre otra posibilidad de tener otra resolución en julio y está claro que si sacamos esta resolución, el Parlamento va a pedir ampliar las sanciones selectivas, pero también utilizar lo que tenemos en el Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Centroamérica”.
“Es decir activar la cláusula democrática que dice que si hay violaciones contra la democracia, contra los derechos humanos, se puede suspender el acuerdo. Dicho esto, pienso que ya lo sacamos (pedir la suspensión del AdA) en la antigua resolución, el Parlamento piensa que dadas las circunstancias actuales de Nicaragua, se puede activar esa cláusula, eso va a tener un impacto económico en Nicaragua”, precisó.
Además, Charanzová insistió en que la Unión Europea no puede ser la única voz, “que lucha por los derechos humanos en el mundo, y en el caso de los países latinoamericanos siempre necesitamos nuestros aliados, necesitamos actuar conjuntamente y pienso que debemos redoblar este esfuerzo, trabajar con otros países de la región, trabajar también con los Estados Unidos”.
La presión del Parlamento Europeo para suspender a Nicaragua del AdA se sumaría a la que están ejerciendo los legisladores estadounidenses con el fin de que la administración de Joe Biden suspenda a Nicaragua del DR-Cafta, siendo ambos pactos comerciales los más importantes que tiene el país hasta ahora.
En declaraciones a LA PRENSA, el presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Nicaragua (APEN), Guillermo Jacoby, dijo recientemente que en “términos del AdA, es una economía de 500 millones de personas; aunque ahí solo exportamos 300 millones de dólares, la realidad es que es un mercado que hay que seguir abriendo, es un mercado importante. Por ejemplo, lo que nosotros exportamos en su totalidad, Costa Rica básicamente lo exporta a Europa. Eso te da dos cosas, primero la importancia del mercado y, segundo, el potencial que tiene el mercado europeo”.
Por su parte, el excanciller Francisco Aguirre Sacasa dijo esta semana que el impacto sería mucho menor, “sencillamente porque nuestras exportaciones de industria ligadas a Europa son mucho menores, pero esto reforzaría la imagen de que no existe un clima de inversión favorable en nuestro país”.
A diferencia del DR-Cafta, que no contiene una ruta específica para suspender a un país miembro del acuerdo, en el caso del AdA sí contempla el componente, además de cooperación y comercial, político, que ahonda en asuntos de respeto a los derechos y la democracia.