Mario Acevedo estaba cansado de lo mismo: entrenaba todos los días y jugaba el fin de semana. La rutina se repetía una y otra vez todo el año. No tenía fines de semana libres y pocos días de descanso. Así es la vida del futbolista. Por esa razón —afirma— decidió retirarse en 2008 porque estaba cansado. “Aún jugaba y tenía ofertas para seguir, pero había pasado mucho tiempo entre inferiores y profesional que se volvió desgastante”, señala el nicaragüense desde Guatemala donde se marchó a los 5 años y se formó futbolísticamente.
Con su título de licenciado en Mercadeo (1997) bajo el brazo y un técnico en comercio internacional (2000), Acevedo cambió los zapatos y short por la camisa formal y pantalón. Al poco tiempo de dejar el futbol empezó a trabajar como gerente de la sucursal más importante de la empresa deportiva Futeca, al mismo tiempo que cursaba el segundo año de entrenador. “No era mi ilusión serlo porque el futbol ya lo había disfrutado y no quería seguir en la misma línea, sino dedicarme a mi carrera y los negocios”, explica el capitalino de 48 años, quien en febrero debutó como entrenador en la Liga Nacional de Guatemala convirtiéndose en la sensación llevando a Santa Lucía, un humilde equipo, a la final ante el poderoso Comunicaciones a partir de este jueves (12:00 p.m.).
Puede interesarte: ¿Por qué fracasó el Real Estelí, equipo favorito para levantar el título?
Acevedo aseguró que tomó los cursos de entrenador porque Dwight Pezzarossi, a su actual asistente técnico, le pidió meterse juntos para que algún día hicieran pareja. “Pensé, bueno tal vez algún día me sirve, no lo vi como una opción real o viable para dedicarme en un futuro a esto”, confiesa el nicaragüense, quien en el 2010 se estrenó como técnico de la Sub-17 del Comunicaciones, donde el argentino Iván Sopegno lo integró como asistente en su grupo de trabajo, cambiando todos sus planes.
El nicaragüense al entrar a Comunicaciones empezó a trabajar medio tiempo de gerente. Sopegno asumió el equipo la segunda mitad del año y lo apoyó en el cuerpo técnico que terminó campeón. Al finalizar el torneo en diciembre, el argentino le ofreció ser empleado del club tiempo completo y decidió renunciar a su trabajo para tomar el camino que nunca pensó seguir. “Era gerente de una sede importante y estaba bien”, cuenta Acevedo, quien en los primeros seis partidos junto a Sopegno perdieron cinco en fila y todos pidieron sus cabezas. “Yo pensé en ese momento, y así renuncié a mi trabajo”, cuenta en forma de anécdota porque en ese Clausura 2011 se coronaron.
A partir de ese momento, Acevedo y el argentino cosecharon cuatro títulos (Clausura 2011, Clausura 2013, Apertura 2013 y Clausura 2014) en dos etapas diferentes, mientras el nica dirigía los planteles Sub-17 o Sub-20. Después asumió el costarricense Ronald González, actual seleccionador de Costa Rica, y lo pidió como asistente coronándose juntos en el Apertura 2012.
El nicaragüense se convirtió en la mano derecha de Sopegno tanto en el Comunicaciones como en la Selección de Guatemala donde estuvieron juntos en 2014 y debutaron justamente en un amistoso ante la Azul y Blanco en agosto. Acevedo estuvo a la par del argentino durante 10 años hasta que en enero asumió la dirección del humilde equipo de Santa Lucía que se encontraba en puestos de descenso y, ahora, disputa su primera final.
Plano personal
Mario Acevedo nació en Managua el 17 de junio de 1972. Es hijo del exfutbolista nicaragüense Mariano Acevedo, mejor conocido en su carrera a nivel nacional como el Griego. Militó en diferentes conjuntos como Santa Cecilia y Zandak. El Griego y su esposa Silva Ruiz decidieron, por la situación social de país de los años setenta, marcharse a Guatemala para terminar sus estudios y se quedaron allá. “Siempre llegué a Nicaragua a pasar las vacaciones y mi papá viaja también”, indica Acevedo (hijo).
Acevedo debutó en la Liga Nacional de Guatemala con el Municipal en 1992, club del que salió en 1994. También jugó en Antigua FC, Escuintla FC y USAC. Su mejor etapa fue en Comunicaciones donde se coronó en 1996. En la Azul y Blanco participó en la eliminatoria mundialista de Corea y Japón 2002 y la Copa Centroamericana 2003, en la que Nicaragua ganó por primera vez al derrotar a Panamá, y en la edición 2005.