CARTAS DE AMOR A NICARAGUA
Querida Nicaragua: Generalmente se dice que los camaradas luchando por el poder siempre dan un paso atrás y dos hacia adelante. Y es la realidad de los hechos la que hizo popular esta sentencia. Fidel Castro, el jefe de la operación comunista penetrando en la América Latina no dio uno sino veinte pasos atrás proclamando que luchaba por la democracia, por erradicar la maldad y los vicios y corrupciones que se habían apoderado de Cuba, se proclamaba como el libertador de su país tan largamente sufrido y toda Cuba, y toda América y todo el mundo le creyó el cuento chino que venía contando. Inclusive cuando entró triunfante en La Habana en los primeros días de enero del 59 lo hizo exhibiendo un hermoso Cristo en su cuello, como proclamando su creencia religiosa y sus buenas intenciones para cambiar el mal por el bien, la corrupción por la honradez, la pobreza por la riqueza y la abundancia, la esclavitud por la libertad. A los pocos días comenzó a dar pasos hacia adelante haciendo prisioneros a centenares de ciudadanos cubanos completamente inocentes, que nunca habían apoyado al tirano Batista. Comenzaron los fusilamientos a los militares batistianos sin importar su comportamiento, todo militar era reo de muerte. Comenzó el reguero de sangre en todo el país y el reguero de lágrimas de miles de madres cubanas, y comenzó la angustia por sacar de los teatros y centros de prisión a hombres inocentes que jamás habían participado en política. Y naturalmente comenzó la fuga escandalosa de todos aquellos que se vieron de pronto en bancarrota, con sus bienes confiscados y sin tener a quién recurrir ante tanto saqueo, asesinato y muerte de la democracia.
Desde entonces comenzaron las angustias en países que vivían en paz en el continente. Castro abrió las puertas de Cuba a todo joven que quisiera superarse, estudiar, prepararse sin tener que pagar en las universidades de la izquierda tanto en algunos países de América como muchos conocidos de Europa y Asia como focos de subversión, como creadores de escuelas de terrorismo, manejo de armas de toda clase, desde los conocidos AK-47 hasta tanques, misiles, aviones de combate, etc. Cientos de jóvenes sin recursos en su mayoría y otros con recursos, pero con sus mentes envenenadas por profesores comunistas infiltrados en universidades de países democráticos, viajaron a Cuba, Rusia, Bulgaria, Palestina y muchos otros países.
Veinte años más tarde y después de una cruenta lucha donde perdieron la vida miles y miles de campesinos y de jóvenes supuestamente revolucionarios, cayó sobre nuestra Nicaragua el terremoto político de la llamada “revolución popular sandinista” que vino a repetir las hazañas del nunca bien ponderado don Fidel Castro Ruz. El propio Fidel vino a celebrar la inauguración de su obra maestra.
Desde entonces algunos izquierdosos de algunos países siguen dando dos pasos adelante y uno hacia atrás con lo cual han logrado adelantar sus posiciones y engañar a los pueblos martirizados por una derecha ingrata que los mantiene en la pobreza, y entusiasmarlos con la idea de que el socialismo, o populismo o comunismo, como quieran llamarle, resolverá todos sus problemas y le quitará todo a los ricos para repartirlo entre los pobres. Ejemplos a la vista: Cuba, Venezuela, Ecuador con Correa, Bolivia con Evo Morales, Argentina con los Kirchner y ahora con Fernández y otros donde siguen dando dos pasos adelante y uno hacia atrás. Esto es como una pandemia y hay que cuidarse de ella y proteger con la vida a nuestros países.
El autor es empresario radial. Fue candidato a la Presidencia de Nicaragua.