El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo aprovechó este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, para anunciar la nueva asignatura “Derecho y Dignidad de las Mujeres” y catalogarlo como “un hito para la educación pública de Nicaragua”. A través del Ministerio de Educación (Mined), los funcionarios —quienes exaltaron a la pareja dictatorial por esta acción— señalaron que este hecho forma parte de la “lucha y respeto” por los derechos de la mujer nicaragüense que hace el orteguismo.
Sin embargo, cuando la LA PRENSA consultó a docentes de colegios públicos de Managua, Granada y Bluefields sobre esta nueva materia, señalaron que hasta ahora la dirección no les ha informado al respecto y desconocen los detalles de cómo será impartida esa clase. Además, manifestaron que tampoco han recibido capacitación sobre el tema.
Según el Mined, la nueva clase se incorporará al plan de estudio de primaria y secundaria y se impartirá una vez por semana. El contenido incluirá temas de derechos de las mujeres, protagonismo y liderazgo, prevención de la violencia y abuso, dignidad y respeto, valores y cultura de paz y relaciones complementarias para convivencia en la familia, escuela y comunidad.
Pero los docentes se preguntan quién será el encargado de dar la clase, cómo ordenarán el horario escolar o si ellos serán previamente capacitados, todas estas inquietudes válidas para que haya un adecuado abordaje del tema.
“Eso lo anunció la señora Rosario, pero en el centro de trabajo no han dicho nada sobre esa asignatura, ni idea de quién daría la clase. Todos deberíamos recibir orientaciones (sobre esa noticia), pero no se hace”, reprochó una docente de Granada, quien por temor a represalias omite su nombre.
Lea además: “Educación cancaneada”: El posible fracaso escolar de 2020 en Nicaragua
La inquietud de la maestra es también conocer cómo el Mined hará para integrar esa nueva asignatura cuando “la carga horaria está completa” y el año lectivo ya inició. “Eso es otra estrategia para manipular a la gente”, terminó diciendo la docente.
Los demás maestros también destacaron la falta de comunicación que hay entre el Mined y los colegios, pues muchas veces hasta los mismos directores desconocen las nuevas orientaciones, y en este caso la incorporación de una nueva clase.
“A nosotros no nos han capacitado ni nada sobre eso. Es una línea (de información) que tienen a nivel macro, pero a nivel micro no ha llegado nada. Si nos van a dar información, sería hasta el Tepce (ahora llamado Encuentro Pedagógico de Interaprendizaje, EPI)”, consideró una maestra de primaria que labora en Managua.
Materia con intenciones políticas
“Nosotras seguimos desde ese mandato del comandante Daniel y la compañera Rosario asegurando que la educación sea de calidad y no solamente gratuita como un bien restituido… Desde esta asignatura rescatamos esa promoción de respeto y dignidad hacia las mujeres”, dijo Mendy Aráuz, directora de las Consejerías de las Comunidades Educativas, durante la presentación de la nueva clase.
Pero la paradoja de este anuncio es que mientras los funcionarios hablan de respeto y dignificación, el 8 de marzo el régimen ordenó a la Policía Orteguista asediar la protesta pacífica que realizaron jóvenes feministas contra la impunidad de los femicidios, y cercó la vivienda de opositoras para impedir que salieran de las mismas. Sin mencionar la represión que sufren las madres de las víctimas de 2018, los familiares de presos políticos o las defensoras de derechos humanos.
Puede interesarle: Régimen de Ortega ha pisoteado a las mujeres en Nicaragua, dicen defensoras. Les mató a sus hijos, las persigue y encarcela
Al respecto, Melba Castillo, doctora en Educación y especialista en Políticas Educativas, declaró que el abordaje de los derechos de la mujer dentro del plan educacional es una buena noticia para el desarrollo del país, sin embargo, el desempeño que ha tenido el Gobierno en este tema apunta a que el lanzamiento de esta nueva clase obedezca a intereses políticos. La experta consideró que la noticia es parte de una campaña electoral.
“Para impartir una nueva asignatura tenemos que capacitar a los maestros. Entonces, ¿quién va a impartir esa asignatura de conocimiento sobre las mujeres? Un tema que en Nicaragua se ha discutido bastante”, expresó Castillo.
Se requiere apoyo de expertas
A criterio de la especialista Melba Castillo, para abordar y enseñar sobre la dignidad y derechos de la mujer, se debe contar con el apoyo de otros sectores, como las propias organizaciones feministas, para capacitar a los maestros primeramente en los derechos constitucionales del ciudadano.
“Es fundamental conocer cuáles son los derechos de la mujer, del ciudadano (…) Pero tiene que haber una capacitación (para los maestros) y para eso, aquellos que van a formar a los docentes deben tener una formación, deben saber los derechos de las mujeres en todos los ámbitos”, manifestó Castillo.
“Estoy de acuerdo que se le enseñe a los niños que las mujeres pueden defenderse, que pueden acceder a posiciones en la política, en la ciencia… pero no que le enseñen a obedecer a un partido político, no es decir que las mujeres participan porque hacen la comida (merienda) en la escuela, que estoy participando porque hago la comida, no, eso no es una participación, es una colaboración con la escuela”, aclaró la experta en Educación.
Lea además: Pandemia vino a marcar más la brecha en educación pública, apunta especialista en Educación Rafael Lucio
Por su parte, la defensora de derechos humanos y presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, enfatizó que se debe tener claro que hablar de derechos de la mujer no es referirse a determinado derecho humano, pues todos le pertenecen a la mujer, sin embargo, se debe destacar aquellos en los que refieren a este grupo de la sociedad.
“Todos los derechos humanos les pertenecen a las mujeres, como parte del conglomerado social. Hay derechos humanos que nos pertenecen a todos por igual, a hombres y mujeres, no hay que decir que estos derechos no le pertenecen a la mujer, sin embargo, hay derechos específicos de la mujer, por ejemplo, los derechos sexuales y reproductivos”, explicó la defensora.
Núñez agregó la importancia del concepto de dignificación, que en el país está mal empleado y usado con fines políticos, para cumplir con la paridad de género. “Un paradigma central (de la dignificación) es que todo lo que rige los derechos humanos debe tener como eje central la dignidad de la persona, la realización plena de todos los derechos y valores que le corresponde”, dijo Núñez.