La inclusión de la situación de Venezuela y de Nicaragua en la agenda de la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) centró el debate en la primera sesión plenaria de ese organismo, entre Estados que defienden y los que rechazan esa propuesta.
Ambos países atraviesan una situación de crisis social, política y económica por el autoritarismo del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela y de Daniel Ortega en Nicaragua.
Este miércoles, en el segundo y último día de la sesión plenaria de la Asamblea General —en la que participan los cancilleres de los 34 Estados miembros—, se votarán dos proyectos de resolución correspondientes a Venezuela y Nicaragua.
Plazo para reforma electoral
En el caso de Nicaragua, la resolución insta al régimen de Ortega a implementar una reforma electoral para modernizar y reestructurar el Consejo Supremo Electoral (CSE) a más tardar en mayo de 2021, es decir, seis meses antes de las elecciones presidenciales y legislativas del país. El CSE está bajo el control del partido gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), encabezado por Daniel Ortega, por lo que carece de credibilidad y confianza de la ciudadanía.
La situación del país será abordada bajo el título “El restablecimiento de las instituciones democráticas y el respeto de los derechos humanos de Nicaragua, mediante elecciones libres y justas”, propuesto por Canadá, Chile, Colombia, Paraguay y Estados Unidos.
De manera extraoficial se conoció que Argentina y México votarán en contra de esas resoluciones. En la sesión de este martes dieron las primeras señales.
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México, un país que generalmente se abstiene de votar sobre la situación de Venezuela y de Nicaragua desde que llegó al poder Andrés Manuel López Obrador, enfatizó en la sesión de ayer su rechazo a la acreditación de una delegación de Venezuela por parte del gobierno interino de Juan Guaidó, señalando que el gobierno de Nicolás Maduro formalizó su salida del organismo en 2019.
La embajadora de México ante la OEA, Luz Elena Baños, expresó que la Carta Democrática no faculta al organismo a reconocer a Estados o Gobiernos, ni a intervenir en asuntos internos de Estados Unidos.
Por su parte, Argentina es otro país que giró a la izquierda en 2019 con el triunfo electoral de Alberto Fenández, lo que significa un voto menos en el grupo que llegó a sumar hasta 22 países a favor de las Resoluciones que han exigido democracia, institucionalidad, cese a la represión y elecciones libres para Nicaragua desde 2018. Los votos duros a favor de las Resoluciones democráticas serían 18.
El canciller argentino, Felipe Solá, se quejó en su cuenta de Twitter de que “Argentina no fue incluida en las negociaciones de los proyectos sobre Venezuela y Nicaragua”, en momentos que se estaban dando las discusiones el día de ayer.
La OEA debe ser contención, mediación y sobre todo garante de la pacificación en nuestra América. Nunca juez o gendarme político. No con posiciones personales, y menos cuando estas terminan alimentando el problema que debieran ayudar a solucionar (Bolivia). Asamblea Gral; hoy. pic.twitter.com/3aSv9DrAi8
— Felipe Solá (@felipe_sola) October 20, 2020
Además, Solá criticó las “sanciones” y las “imposiciones” a estos países en plena pandemia.
“La OEA debe ser contención, mediación y sobre todo garante de la pacificación en nuestra América. Nunca juez o gendarme político. No con posiciones personales, y menos cuando estas terminan alimentando el problema que debieran ayudar a solucionar”, manifestó Solá ante el plenario virtual, pero también en su cuenta de Twitter.
La posición de Solá generó varias críticas en las redes sociales, entre ellas la de la anterior embajadora de Argentina, Paula María Bertol.
El canciller de Nicaragua miente en la #AsambleaOEA negando la violación sistemática de los derechos humanos documentada ampliamente por la @CIDH plasmado por el grupo independiente de trabajo registrando ejecuciones extrajudiciales y torturas de todo tipo por parte del Estado.
— Paula María (@PaulaBertol) October 20, 2020
Bertol también escribió que sintió “vergüenza ajena” por como el canciller Solá negó las violaciones de los derechos humanos en Nicaragua. “Dijo que no callaría los abusos de DD. HH. fueren donde fueren y se lavó las manos. Inaceptable complicidad”, manifestó la exfuncionaria.
Bertol además tuitió el informe sobre los hechos de violencia ocurridos entre el 18 de abril y el 30 de mayo de 2018, que demuestran la brutal represión contra las protestas civiles.
La asociación civil Cultura Democrática publicó un hilo de Twitter contrastando las declaraciones de Solá.
#Argentina @felipe_sola no puede desconocer RES.2943 de AGOEA sobre “La situación en Nicaragua,” y “la preocupación de la comunidad interamericana por el deterioro de las instituciones democráticas y los #DDHH en Nicaragua y su apoyo a una solución pacífica a la crisis política.
— Cultura Democrática (@CultDemocratica) October 20, 2020
Lamentos del representante de la dictadura orteguista
Como era de esperarse, el canciller del régimen orteguista y representante de Nicaragua ante la OEA, Denis Moncada, se quejó y rechazó ese punto de agenda en la primera parte de la sesión de ayer, por la mañana.
“Hay una tendencia en la Organización de Estados Americanos de utilizar la organización como un instrumento de actuación injerencista con Nicaragua y de realmente mentir, utilizar situaciones tergiversadas, utilizar falsas informaciones y noticias; elaborar proyectos encaminados a desestabilizar al gobierno constitucional y legítimo de Nicaragua. Solamente queremos expresar que toda declaración que esté dirigida en esa dirección, Nicaragua definitivamente no la acepta y la rechaza”, dijo Moncada.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Canadá, François-Philippe Champagne, en su intervención pidió al gobierno de Ortega que detenga las violaciones a los derechos humanos en el país.
“Canadá invoca al Gobierno de Nicaragua para que detenga todas las violaciones de derechos humanos y defienda la libertad de los medios y trabaje con la OEA en la elección”, manifestó el representante de Canadá ante la OEA.
Luego el embajador de Nicaragua interrumpió la siguiente intervención para contestarle a Canadá.
“No aceptamos, Nicaragua no acepta, el gobierno de reconciliación y unidad nacional no acepta la intervención y el señalamiento que ha hecho el señor canciller de Canadá. Exigimos respeto”, dijo Moncada.
Brasil y Chile demandan elecciones libres, justas y observadas
Por la tarde, en la segunda parte de la sesión del martes, Brasil y Chile también se pronunciaron sobre la situación de Venezuela y Nicaragua, demandando una salida pacífica a través de elecciones libres, justas y observadas.
“Chile desde el año 2018 ha condenado la violencia, la represión a la sociedad civil, las transgresiones a los derechos humanos, la persecución a opositores políticos y, en general, el deterioro de las instituciones democráticas. Por tales razones, Chile apoyará la resolución sobre Nicaragua que insta al gobierno de dicho país a realizar una reforma electoral con miras a la celebración de elecciones presidenciales y legislativas libres y justas en 2021, permitiendo el despliegue tanto de misiones de observación electoral como asimismo de la Comisión Interamericana de derechos humanos”, expresó el embajador de Chile ante la OEA. Chile prometió su voto a la resolución sobre Nicaragua.
EE. UU. espera resolución contundente
El secretario de Estado de Estados Unidos (EE. UU.), Mike Pompeo, también aprovechó su intervención para demandar una resolución contundente sobre la situación de Venezuela y Nicaragua.
“Estados Unidos espera que este órgano apruebe una fuerte resolución para condenar al régimen de Maduro de una forma que no reconozcan las elecciones ilegítimas de Venezuela, pasadas y futuras. El presidente Ortega también socava la democracia en su país y restringe los derechos básicos de expresarse, de reunirse, incluso ataca a las iglesias. Esperamos que la OEA apruebe una resolución para condenar el hecho de que el gobierno de Ortega no se ha mantenido a la altura de los principios democráticos más básicos. La resolución también debe exigir el respeto de los derechos humanos y señalar reformas electorales concretas para tener elecciones libres e imparciales en Nicaragua”, afirmó Pompeo.
Nicaragua vive en crisis desde abril de 2018, cuando comenzó la represión armada contra las protestas civiles que demandan la salida de Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo del poder.