Aunque Nicaragua ha avanzado en materia de gestión de riesgo desde el paso del huracán Mitch, falta que incorpore en sus planes de evacuación a los animales, destacó el veterinario Enrique Rimbaud, quien brindó asistencia a diferentes especies que fueron afectadas por las intensas precipitaciones de octubre.
Rimbaud, también decano de la facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad de Ciencias Comerciales (UCC), explicó que atendieron a especies menores y mayores en Tipitapa, Matagalpa y La Paz Centro, León, durante tres días. En total fueron 3,319 animales, de estos, un 40 por ciento fueron afectados directamente por el temporal.
En la jornada participaron 23 veterinarios, quienes revisaron, desparasitaron, vitaminaron y atendieron los casos clínicos. Los especialistas encontraron problemas de la piel, problemas respiratorios y también infecciones por garrapatas. Rimbaud indicó que los más vulnerables ante las inundaciones son las aves, los cachorros y los cerdos pequeños, principalmente, porque estos tienen menor resistencia en comparación con los animales grandes, que soportan un poco más.
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La pérdida de animales junto con la de cultivos impactan la vida de las poblaciones, que resultan afectadas por inundaciones o cualquier otro tipo de evento natural, ya que estos dependen de los productos que generan, por ejemplo, las aves de corral.
Por su parte, la Organización de Naciones Unidas, por medio del Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres (2015-2030), incluyó el reforzamiento y la promoción de la colaboración y la creación de capacidad para proteger los bienes de producción, incluidos el ganado, los animales de labor y las semillas.
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