Aunque de forma reiterada se ha rechazado la posibilidad de presencia de maras o pandillas en el país, existe una investigación de la Fiscalía de El Salvador, donde Nicaragua aparece como uno de los nueve países donde la Mara Salvatrucha MS-13 mantiene una estructura similar a la existente en esa nación centroamericana.
El alegato oficial del Gobierno aparece en el Libro Blanco sobre la delincuencia publicado en septiembre del año pasado, que establece que “no existen maras o pandillas”. Sin embargo, a mediados del 2017 endureció las medidas migratorias para el ingreso de salvadoreño.
Igualmente el responsable de comunicación de la Fiscalía de El Salvador, Salvador Martínez, en una comunicación vía correo electrónico, dijo a LA PRENSA, que la presencia de un nicaragüense entre los mareros detenidos en la operación Cuscatlán, no ameritó coordinación con Nicaragua porque no consideraron alguna relación.
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Sin embargo, el documento de la misma Fiscalía salvadoreña indica que “las clicas de los países antes mencionados están estructuradas de la misma manera que en El Salvador, es decir que si hay más de una clica es obligación que debe de existir una ranfla o un programa a la cual deben de estar sujetas las clicas, ese grupo es el que debe de llevar el control general”.
Estados Unidos, México Honduras, Guatemala, Panamá, España, Brasil, Italia y Nicaragua
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El documento de la Fiscalía de El Salvador explica que “la clica que crece en cualquiera de los países mencionados (Nicaragua entre ellos) busca crecer los ingresos de la pandilla por medio del sicariato tráfico de drogas, de armas o de personas.
En agosto del año pasado fue procesado Sergio Antonio Umaña Salamanca, miembro de la Mara Salvatrucha (MS) quien lideraba una clica y había adquirido propiedades en el país.