Monseñor Juan Abelardo Mata dijo que la adopción de la niña Freydell Monserrat Castillo Cruz es parte del desorden que existe en el país y comparó el hecho con el incumplimiento de las leyes por parte de quienes también deberían de velar por el medioambiente.
“Me parece que son los desórdenes en algo tan importantísimo, así como son los desórdenes en el despale y que se juega con las leyes y la gente que está destinada a que se cumpla la Ley, son los que están dando permisos indebidos asesinando el ecosistema”, dijo.
El obispo consideró justa la reacción de la familia que reclama de diferentes formas. “No me parece justo porque he sabido que a raíz de los reclamos a una persona que trabajaba en el Estado la corrieron (al abuelo de la niña) y eso me parece que es venganza”, dijo. Estas declaraciones fueron brindadas después de la misa este Martes Santo.
La niña Freydell Monserrat Castillo Cruz fue separada de su hogar por el MiFamilia en la comunidad de Colocondo, San Juan de Limay, aduciendo que había quedado en abandono. Luego fue dada en adopción a unos españoles y luego se hizo el proceso en Jinotepe donde no fueron notificados debidamente los parientes y frente a estos -que reclamaban la devolución de la menor- el juez Carlos Espinoza la declaró en abandono.
“El Ministerio de la Familia debería pronunciarse, debería custodiar la seguridad de los niños y la seguridad comienza en el entorno de la familia. Si papá o mamá no pueden hacerse cargo de la criatura, pues allí están los otros parientes cercanos que justamente la sienten suya a la criatura”, dijo el obispo.