El coronel en retiro Víctor Boitano Coleman fue sacado de su casa por al menos 10 policías vestidos de civil el pasado miércoles 24 de abril, tras haber puesto una denuncia en la Policía, porque le quebraron las ventanas al carro de su esposa, en lo que suponen fue un intento de robo.
Una fuente cercana a un pariente de Boitano detalló que el ex militar sandinista fue sacado esposado de su casa en Managua y lo llevaron con rumbo desconocido. Previo a este hecho, Boitano había denunciado que el carro de su esposa, Eugenia Valle, había amanecido con las ventanas quebradas cuando estaba aparcado frente a su casa.
Tras la detención, algunos de sus allegados ahora creen que el daño al carro fue provocado para confirmar que Boitano estaba en el país, porque debido a su discreta presencia, era difícil saber que había regresado.
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La familia de Boitano ha preguntado por él en todas las estaciones policiales de Managua, pero en ninguna le han dado respuesta, lo que lo suma a la lista de personas desaparecidas.
Boitano tenía dos meses de haber regresado a Nicaragua de Italia, donde estuvo viviendo los dos últimos años. El ex militar sandinista tiene doble nacionalidad, italonicaragüense.
El cambio de Boitano
Boitano fue coronel del Ejército del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) en los años ochenta, pero como muchos sandinistas, pasó a la disidencia y se convirtió en un duro crítico de Ortega, que acusaba a su régimen de perseguirlo y amenazarlo. Sin embargo, en 2011 tuvo una experiencia que cambió radicalmente sus declaraciones públicas.
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En el contexto de las votaciones nacionales de 2011, Boitano era candidato a diputado de la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN) cuando este partido estaba en manos de Enrique Quiñóñez. Sin embargo, Quiñónez denunció en plena campaña electoral que Boitano iba a secuestrar a la hija de Ortega, lo que tuvo como consecuencia su detención con lujo de violencia, según denunció su esposa, Eugenia Valle, tras el arresto.
Dos días después Boitano salió de la cárcel, pero su discurso cambió de manera favorable al régimen de Ortega, pidiendo la estabilidad nacional y acusando de injerencismo a Estados Unidos.
Los últimos seis años de crisis política, Boitano estuvo totalmente ausente de la vida pública, hasta ahora.
Desde 2018 Ortega ha expulsado del país a los opositores más destacados de la política nacional, a la vez que miles de personas han salido del país por la persecución, el hostigamiento policial y la falta de oportunidades del país. Actualmente, el régimen orteguista está dedicado a perseguir e investigar a sus propios funcionarios públicos, magistrados, jueces, policías y trabajadores públicos.