Más cuestionamientos sobre las inconsistencias en las cifras oficiales y los cambios abruptos que las autoridades del Banco Central de Nicaragua (BCN) están haciendo al sistema de Cuentas Nacionales surgieron ayer, luego que el economista Néstor Avendaño, en su blog personal también criticara la forma de cómo dicha institución está registrando algunas cifras.
Tras recordar el prestigio y confianza que el BCN ha acumulado en los últimos años, Avendaño criticó la desactualización de varios indicadores económicos y además cuestionó el porqué el máximo órgano bancario “acepta y publica indicadores elaborados por otras instituciones públicas con metodologías bastante discutibles”.
El economista menciona por ejemplo, que “la serie anual de la población total del país fue modificada por el Instituto Nacional de Información de Desarrollo (Inide) desde el año 2006, haciendo caso omiso de las proyecciones intercensales del país realizadas por organismos internacionales especializados en demografía. El BCN publica en su página web y en su anuario estadístico un dato poblacional con una tasa de crecimiento de 1.3 por ciento en 2005, que salta a 3.44 por ciento en 2006 y luego desciende a 1.24 por ciento en 2007”.
Esas cifras de población, agrega luego, demuestran “una falta de seriedad en el manejo de la información nacional. Por lo tanto, los nicaragüenses podemos dudar de los niveles de algunos indicadores por habitante, tales como el PIB, el gasto público de educación y salud, y también del índice de pobreza resultante de la próxima Encuesta de Medición de Nivel de Vida que realice el Inide”.
EXTRAÑO SECRETISMO
Además Avendaño se suma a las críticas de los economistas Adolfo Acevedo y Alejandro Aráuz sobre el secretismo que ahora impera en las cifras del Banco Central de Nicaragua. Un secretismo “que no debería existir”, insiste.
Por ejemplo, Avendaño menciona que en 2014 en su informe de deuda externa, el sector público recibió el perdón por 123.7 millones por parte de un país que el BCN no quiso revelar su nombre, pese a que en su informe especificaba las condonaciones de 2.1 millones de dólares de Perú, 1.9 millones de dólares de España y 0.2 millones de Alemania.
“Consulté, a través de la Oficina de Acceso a la Información Pública (OAIP) del BCN, la más eficiente del país, cuáles eran los países que habían condonado deuda pública externa por 123.7 millones de dólares, y la instancia técnica del BCN, o sea, la Gerencia Internacional, argumentó que no podían responder porque el acreedor había solicitado que no publicaran su nombre”, asegura el economista en su artículo titulado La información económica y las políticas públicas .
Avendaño le recuerda al BCN y sus técnicos que la deuda pública es pagada con impuestos de los ciudadanos y por tanto debería ser transparentada.
Aráuz denunció esta semana el grave deterioro que está sufriendo el sistema de Cuentas Nacionales, por el desorden que hubo desde que se cambió al año base 2006, así como por el involucramiento de delegados del Frente Sandinista en la recolección de información.
Tal es la crisis en el manejo de la información, que el economista Acevedo, quien fue el primero en denunciar la grave situación de las cifras oficiales, cree que las Cuentas Nacionales ya no reflejan la realidad económica. Están colapsadas, tildó.
Acevedo denunció que el BCN estaba haciendo revisiones hacia atrás de las estadísticas históricas de tal envergadura que había transformado la estructura sectorial de la economía, lo que implicó que sectores que antes aportaban menos a la formación del Producto Interno Bruto ahora aparezcan con mejor desempeño y otros que estaban sólidos ahora aparecen deteriorados.
Más secretos e inconsistencias
El economista Néstor Avendaño también cuestiona la decisión del Banco Central de Nicaragua de ocultar “los nombres de las principales empresas exportadoras e importadoras del país, datos que siempre están disponibles para el público en general en los países con economía de libre mercado”.
Igualmente cuestiona que hasta hoy se desconozca “el valor del Ingreso Nacional o Producto Interno Neto a Costo de Factores (PNNcf) porque el BCN no logra estimar la depreciación de activos fijos (edificaciones y maquinaria y equipo), un componente del valor agregado de las actividades económicas”.
Además critica la forma en cómo el BCN viene presentando los datos de la producción mensual de los principales bienes industriales, cuya información como índices “no son útiles a los inversionistas porque ellos esperan conocer la oferta total de dichos bienes en unidades de producción física, en otras palabras, si la demanda de dichos bienes está o no está satisfecha con la oferta interna. El presidente del BCN, Ovidio Reyes, tiene la potestad de corregir la publicación de estos datos”.
Ver en la versión impresa las páginas: 2 C