Isidro Rodríguez Silva
Leer es una actividad necesaria, es a través de ella que desarrollamos destrezas, hábitos y habilidades, pero sobre todo debe ser una actividad voluntaria, que solo con la motivación llegaremos a ser grandes lectores.
El hábito lector se alcanza con la constancia y la práctica, donde la lectura es una conversación entre el autor y el lector a través del texto.
La lectura debe de llevarnos al conocimiento, a la creatividad y la imaginación. Es por eso que necesitamos niños y jóvenes motivados. Motivados significa que va a estar interesado, divertido, entretenido, en juego e imaginar, pero sobre todo debe sentir y saborear con placer cada libro que nos abre las puertas a nuevos mundos.
La red de bibliotecas
Para incentivar el desarrollo y la promoción de la lectura creativa el Ministerio de Educación en León y el programa hermanamiento León-Zaragoza, se han apoyado en la Red de Bibliotecas de la comunidad rural de El Tololar.
Estas cuatro bibliotecas, dos de ellas inauguradas el año pasado en Palo de Lapa y Los Pocitos, y dos más que se inauguran hoy en el colegio Rebeca Rivas, de la comunidad Aguilo Morales y el colegio Concepción de María, de la comunidad La Morita, apoyan estos esfuerzos de promover leer.
“La solidaridad es la ternura de los pueblos”, dice la escritora Gioconda Belli. Esa solidaridad se ha vuelto palpable entre las ciudades de Zaragoza, España y León de Nicaragua. Este año se cumplen 21 años de continuos vínculos de colaboración, que nació a partir del maremoto de septiembre de 1992.
La lectura creativa promovida en estas bibliotecas incorpora otro concepto en el trabajo bibliotecario, en ver la biblioteca como un centro lector y de creación e imaginación.
Es por eso que los maestros no debemos de forzar, ni obligar, ni imponer la lectura como una obligación académica, para que el alumno no la asuma como un castigo.
Motivar en la lectura
Para desarrollar la motivación lectora debemos de ver los libros como unos objetos valiosos y de gran importancia para el crecimiento personal, en una actitud placentera, curiosa, activa y creativa, que desarrolla sus conocimientos, que también lo lleva a un pensamiento crítico en valores. A través de la lectura se logran nuevos aprendizajes y se logran nuevas competencias.
La lectura creativa es un camino pedagógico para la motivación lectora, sobre todo para aplicar los niveles de comprensión lectora. Debemos de estar claros que leer es interpretar y comprender; si no interpreto o comprendo no leo.
La lectura creativa permite transformar un texto en un juego lúdico, en una dramatización, en una presentación de títeres, en un juego de trabalenguas, en canciones, en coplas, en dibujos y pinturas, en collage de fotografías, en roles expresivos gestuales y corporales, en juegos como la gallina ciega, o el juego de roles, como la dinámica de estatuas.
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