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Algunos productores han tenido pérdidas que superan el treinta por ciento y responsabilizan al Gobierno por haber autorizado importaciones excesivas. LA PRENSA/LUIS E. MARTÍNEZ

Cebolleros siguen perdiendo

Aunque en los principales mercados y en algunas pulperías de la ciudad de Matagalpa una libra de cebolla vale diez córdobas, a los productores de este rubro los comerciantes apenas les ofrecen 180 córdobas y hasta menos por un quintal del producto.

Luis Eduardo Martínez M.

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1,270 manzanas de cebolla son cultivadas en el país, según el informe final del IV Censo Nacional Agropecuario, de las cuales casi la mitad está en el departamento de Matagalpa, principalmente en el municipio de Sébaco.

[/doap_box][doap_box title=”Se sienten burlados” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]

Países que antes compraron cebolla nicaragüense, como Costa Rica, han frenado sus importaciones, según Adolfo Treminio Vega, dirigente de la Asociación de Productores de Cebolla de Sébaco, “gracias a los importadores que tenemos nosotros” porque presuntamente se negaron a comprarle a los ticos para importar cebolla holandesa.

La productora Esmeyling González dice que el Gobierno tico “apoya a sus productores” y frenó las importaciones, mientras que “nosotros somos la burla del Gobierno”.

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Aunque en los principales mercados y en algunas pulperías de la ciudad de Matagalpa una libra de cebolla vale diez córdobas, a los productores de este rubro los comerciantes apenas les ofrecen 180 córdobas y hasta menos por un quintal del producto.

“Eso es demasiado bajo, si producir un quintal de cebollas cuesta 340 córdobas, sin incluir el costo de maquila”, dice Adolfo Treminio Vega, dirigente de la Asociación de Productores de Cebolla de Sébaco, municipio que aporta la mayor producción del rubro en el país.

Sin poder comercializar, los productores han tenido pérdidas que en algunos casos superan el treinta por ciento y responsabilizan al Gobierno del inconstitucional Daniel Ortega por haber autorizado “importaciones excesivas” que han saturado los mercados del país.

Hay productores que reportan pérdidas de hasta 20 por ciento en campo, además de mermas similares en la cebolla que mantienen acopiada a la intemperie.

Treminio considera que el Gobierno debe reunir a los importadores del país “a que den la cara” porque “nos han hecho la vida imposible”.

EXPORTAR EL PRODUCTO

“Hay importadores que dicen que requieren de tres mil quintales mensuales, otros que supuestamente no ajustan con seis permisos (de importación) y ahorita que está la cosecha nacional ¿qué compran?… ahí estamos que no hay a quién venderle”, refirió Treminio, mostrando más de mil quintales de cebolla que mantiene bajo la sombra de árboles frutales en la finca La Tajona, dos kilómetros al oeste de la Villa Chagüitillo, en Sébaco.

Ese municipio produce más del 60 por ciento de la cebolla nacional, mientras que el resto lo aportan productores de zonas como Namanjí en San Rafael del Norte, La Concordia, Sacaclí y las orillas del Lago Apanás en el departamento de Jinotega, así como en El Dorado, jurisdicción de Estelí; San Juanillo, en el municipio de Darío; Las Delicias en Terrabona y El Viejo en Chinandega.

Otra arista del problema es que pronto saldrán las cosechas de esas zonas y “el Gobierno debe preocuparse porque estos productores encuentran el mercado saturado, a quién van a venderle, entonces la solución que nosotros vemos es que haya salida (exportaciones) de cebolla, para cualquier lugar para que el mercado nacional se descongestione”.

Ver en la versión impresa las páginas: 7 A

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