Génesis Hernández Núñez
Cada vez más jóvenes lideran empresas y organizaciones en Nicaragua. Ejemplo de ello es Eduardo Ortega, quien con tan solo 27 años asumió la gerencia general de Invercasa Puesto de Bolsa. Pero Eduardo no es un caso aislado en el puesto de bolsa, según cuenta entre el 70 y 80 por ciento de quienes integran su equipo son menores de 35 años.
“Son jóvenes que han aceptado los retos, asumen grandes responsabilidades y tratan de mejorar día a día con nuevas ideas”, afirma. Y este relevo también se está dando en las empresas familiares.
Daniel Garzón y su hermano Rafael, gerente de ventas y gerente de producción de Joyería Garzón, respectivamente, tomaron las riendas del negocio al morir su padre, Carlos Garzón, en el 2007.
Casi cinco años después dirigiendo la reconocida joyería, Daniel reconoce que “sí se están abriendo oportunidades a la nueva energía y fuerza de los jóvenes”.
LA EDUCACIÓN: PIEZA CLAVE
La buena educación es vital para que un joven logre un óptimo desarrollo y aun más si aspira a convertirse en gerente de una empresa o fundador de una; en eso coincidieron estos ocho líderes del sector privado del país. “Yo me eduqué en el mejor lugar del mundo: la familia.
Es increíble cómo marcan la vida unos padres que quieren que sus hijos se superen y les inculcan el estudio, el trabajo en equipo”, explica Alfredo Antonio Artiles, socio director de KPMG Nicaragua, una empresa que presta servicios de Auditoría, Impuestos y Asesoría.
Carlos Vargas, gerente general de Cisa Agro, recomienda continuar siempre la preparación. “La maestría se ha convertido en lo que era hace cinco o diez años un estudio universitario… pero tampoco te podés quedar con la maestría, sino estar incursionando en nuevas capacitaciones”, afirma.
MÁS JÓVENES EN POLÍTICA
Pero los jóvenes con aspiraciones no solo deben limitarse a la preparación académica, también deben incursionar en la vida política del país. En esto están de acuerdo Bosco Noguera Mayorga, abogado socio de Mayorga MG & Asociados, y Raquel Barrios, directora ejecutiva de Un Techo Para Mi País-Nicaragua, la cual afirma que “hacen falta más jóvenes en política”.
Para Noguera “los jóvenes han tenido una participación importantísima en los últimos años en todo lo que ha estado relacionado con la sociedad civil y la política”, sin embargo Barrios opina: “Falta que se abra el espacio y las instancias para que los jóvenes podamos participar también, tenemos que empezar a pensar de forma más holística”.
Carlos Téllez
Para Téllez, de 33 años, aún hay cierta resistencia en el país para ver el cambio generacional, sin embargo, afirma: “La gente joven, educada, egresada de buenas universidades, con más de un idioma y especializaciones en áreas particulares, van a ir gobernando o, teniendo papeles importantes en el sector privado”. Téllez es abogado, estudió en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, se especializó en Negocios Internacionales en el Incae. Está casado y tiene un hijo.
Daniel Garzón
Daniel y su hermano Rafael asumieron el mando de la joyería familiar cuando su padre falleció. Daniel expresa que para él la clave de todo es el estudio y que “lo más difícil de ser joven en este negocio ha sido saber distinguir qué proyectos te van a dar mayor rentabilidad, saber escoger correctamente basado no solo en intuición, sino también en números”. Daniel, de 33 años, es ingeniero en sistemas, graduado de la Universidad Americana, es casado y padre de gemelos.
Ana Gabriela Vargas
Según Ana Gabriela, de 31 años, es importante que “la gente con más experiencia que ha logrado consolidarse, que nos transmitan esos conocimientos, que nos guíen y que nos tengan paciencia y estén dispuestos a acompañarnos en nuestros procesos”. Vargas, estudió Mercadeo en el Tecnológico de Monterrey, es casada, madre de dos niños y reconoce que ahora los jóvenes tienen “más medios, más formas de exponer lo que hacen”.
Carlos Vargas
Carlos piensa que contratar jóvenes “es un riesgo que van tomando las empresas, porque en los negocios, o vas cambiando o te vas muriendo”. Este ingeniero mecánico, de 32 años, graduado en la Universidad de Texas, resalta la “gran fortaleza, el nuevo espíritu, las ganas de innovar y de romper los patrones que traen los jóvenes”. Vargas es casado, padre de dos hijos y tiene una maestría en Administración de Empresas con enfoque en Mercadeo.
Eduardo Ortega
Para Eduardo, corredor de Bolsa Nacional e Internacional, que el mundo sea más competitivo ha servido para que los jóvenes crezcan rápidamente a nivel profesional y para que “muchos de ellos desarrollen proyectos sociales, fundaciones, organizaciones, se está creando una red de emprendimiento mucho más fuerte”. Ortega, de 27 años, es soltero, estudió Economía y Finanzas con especialización en Desarrollo Económico en St. Mary's University en Texas, Estados Unidos.
Raquel Barrios
Según Raquel, se está dando espacio a muchos jóvenes, pero “hace falta un poco más de presencia sobre todo en el aspecto político; lamentablemente la política en el país se ha tergiversado un poco y eso nos ha alejado a los jóvenes de la participación directa, sin embargo, podríamos hacer un gran aporte desde ese sector”. Barrios estudió Relaciones Internacionales con énfasis en Comercio Exterior en la Universidad Internacional de Las Américas en Costa Rica, tiene 25 años y es soltera.
Alfredo Artiles
Alfredo expresa que el éxito “uno no lo logra solo, siempre se necesita gente que te ayude, que te dé un espaldarazo”. Para él, los jóvenes que han logrado posicionarse como líderes de empresas y organizaciones en el país son personas esforzadas, que “han invertido en su educación, que tienen una clara visión de lo que quieren”. Artiles, de 34 años, estudió en University of Mobile, hoy Ave María University, es casado y tiene cuatro hijos.
Bosco Noguera
Este joven abogado y notario público, de 28 años, expresa: “Uno de los principales problemas que hay es la falta de espacio y apertura por parte de las generaciones anteriores, la misma gente ha estado ocupando los espacios gremiales, políticos, sociales y empresariales, pero cada vez estamos viendo más esa apertura, cada vez hay más jóvenes activos”. Noguera estudió en la Pontificia Universidad Católica de Chile, está casado y es padre de dos hijos.