CORRESPONSAL/ LEÓN
En León, 12 carretas cargadas de leña fueron retenidas en un operativo que realizó la Policía del Distrito Dos de la Terminal de buses, tras conocer extraoficialmente que la leña era vendida de manera ilegal.
La intención de la Policía falló, ya que los dueños de la leña se opusieron y gritaron a los policías que la leña era legalmente de ellos y no iban a permitir que le decomisaran el producto.
Nicolás Vargas, de 45 años, dijo que la actitud de la Policía fue “arrogante y violenta”.
“No nos avisaron que nos iban a quitar la leña ni tampoco nos han dicho que hay que pagar un permiso nuevo, sino que la Policía actuó de forma irresponsable y nos llevaron a la delegación policial de León sin ninguna explicación”, dijo Vargas.
Los leñeros dijeron que la intención de la Policía era quitarles la leña, lo cual no permitieron, ya que ésta provenía de sus fincas.
Ramón García, de 35 años, dijo molesto que “están jugando con el estómago de nuestros niños; el dinero que se realiza de esta venta de leña es para llevar el pan de cada día y el sustento de nuestros hijos”.
Por su parte Óscar Romero, delegado de Inafor, dijo que quieren que “las personas comprendan que el sector leñatero no está esquematizado como el principal destructor del recurso natural, nos dimos cuenta que los compañeros que están sacando leña es de sus plantaciones”.
Luego de cinco horas retenidos, la Policía soltó a los leñeros.
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