Gerald Hernándezgerald.herná[email protected]
Mientras Jimmy González se convertía en el primer artillero de 400 puntos con bate de madera, Donald Calderón le brindó solidez al poco confiable staff de los Tiburones, al punto de imponer una nueva marca de juegos salvados para los campeonatos nacionales de béisbol.
Calderón lanzó ayer el noveno inning en la victoria de Granada 4-1 sobre el Rivas para llegar a 14 salvamentos, dejando atrás el registro de 13 que consiguieron Julio Espinoza en 1986, Darwin Gutiérrez en 1996 y Omar Varela en el 2000.
Calderón salvó la mitad de los 20 triunfos de los Tiburones en la segunda vuelta.
También fue impresionante el desempeño del derecho metropolitano Romualdo Caballero, que ganó el liderato en efectividad con un microscópico 0.94, que es la cifra más baja desde que Claudio Ulloa tiró para 0.98 en 1985. Y algo aún más sorprendente es que ambos lo hicieron en plan de novatos.
En materia de triunfos, Chico Rayo y Diego Sandino terminaron empatados con 10 cada uno. Sandino fue el lanzador más trabajado de la liga con 129.0 episodios y ganó el liderato de ponches con 76.
Jimmy fue el mejor bateador de la liga con su formidable porcentaje de .405, producto de 87 imparables en 215 turnos, superando por amplio margen el .369 de Henry Roa, quien ligó 73 cañonazos en 198 oportunidades.
Freddy Chévez y Francisco Hernández compartieron el liderato en cuadrangulares, con 9 cada uno.
El gigante Chévez fue además el líder en empujadas con 43, sacándole dos de ventaja Marlon Abea y Nemesio Porras.
Edgard López ganó su segundo título consecutivo de bases robadas, al asaltar 21 colchonetas, y también encabezó los dobletes con 18.
Ernesto Garay anotó 49 veces, Juan Blandón descargó 4 triples, Nemesio Porras negoció 41 boletos y Juan Villagra se tragó 44 ponches.