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La mansión de verano de Roberto Rivas, en el exclusivo reparto “Playa Hermosa”, en la costa del Pacífico nicaragüense, según los pobladores del lugar.

“Bendecido” con tierras, ostentación cautiva a Rivas

Roberto Rivas Reyes, el reelecto presidente del Poder Electoral, gracias a un acuerdo con Daniel Ortega Saavedra, es conocido no solamente por su cercanía al cardenal Miguel Obando y Bravo, sino además, por su estilo de vida ostentoso e imperial. ¿Quién es el personaje detrás de la noticia? Eduardo Marenco yJorge Loá[email protected] Cada vez que […]

  • Roberto Rivas Reyes, el reelecto presidente del Poder Electoral, gracias a un acuerdo con Daniel Ortega Saavedra, es conocido no solamente por su cercanía al cardenal Miguel Obando y Bravo, sino además, por su estilo de vida ostentoso e imperial. ¿Quién es el personaje detrás de la noticia?

Eduardo Marenco yJorge Loá[email protected]

Cada vez que Roberto Rivas Reyes invita a una de sus fiestas en su casa de playa o en su mansión en la carretera a Masaya, el lujo se disfruta a borbollones, como si fluyera de un manantial inagotable.

“Es un anfitrión exquisito”, dijo una de sus amistades.

Quienes han tenido el privilegio de disfrutar los placeres de la vida terrenal junto a Rivas, en su casa de verano en “Playa Hermosa”, suelen recordar a los meseros de corbatín negro y guantes blancos haciendo equilibrio con bandejas llenas de vasos con whiskie y de exquisitos asados, el fragor de la fiesta y el buen gusto culinario del anfitrión, que contrata al mejor chef, si es preciso.

Rivas suele importar el filete de res que sus invitados degustan, para que se deleiten con la mejor carne internacional, según testimonios recabados por LA PRENSA.

Su mansión de verano en “Playa Hermosa”, color azul cielo, tiene un amplio balcón que es iluminado por las noches por cuatro postes de luz situados en el interior de la residencia, la que cuenta con piscina y una muralla adornada con peces de concreto que la protege de los curiosos. “En las noches de fiesta, cuando se oye la música y el chocar de las copas, se ve a los meseros de corbatín y a los invitados con sus copas en la mano… A uno le parece que es la casa de Julio Iglesias”, dijo un testigo que solicitó el anonimato.

Las fiestas periódicas son una faceta muy conocida de Rivas, lo cual corresponde a un estilo de vida ostentoso, inusual en un funcionario público, coinciden las fuentes consultadas. Si en algo coinciden amigos y enemigos de Rivas es en que se trata de una persona a la que le encanta la ostentación y la opulencia. No sólo le encanta, también tiene la plata para gozar de esos lujos. Sus amistades calculan sus ingresos mensuales en unos US$12,000 dólares, tomando en cuenta el sueldo de la Universidad Católica y del Consejo Supremo Electoral.

Rivas posee su residencia en el kilómetro 16 de la carretera a Masaya, construida en unos terrenos que fueron originalmente donados a la Iglesia Católica; y además tiene la mansión de verano en “Playa Hermosa”, una isla en Granada (frente al astillero El Diamante), una finca en Matagalpa, muchos vehículos y un yate valorado en US$118,000, el que introdujo al país libre de impuestos. También es reconocida su pasión por los cuadraciclos, aún antes de que éstos se pusieran de moda durante la Administración Alemán.

En círculos familiares se comenta que cuando una de sus hijas cumplió quince años, le obsequió un Mercedes Benz.

LA “DOLCE VITA” DE RIVAS

Un ex funcionario del Consejo Supremo Electoral (CSE) comentó a LA PRENSA que Rivas le dijo en una ocasión que estaba “fallando” por vivir en un barrio y no en una zona residencial. “Cuando uno es funcionario público lo primero que hace es comprar una casa en la zona residencial de la ciudad y se traslada a vivir allí, después te comprás una casa en el mar y cuando ya estás en la cúspide te comprás un yate; si no hacés eso, estás fallando”, le habría dicho Rivas, quien se negó, durante los últimos quince días, a conversar con LA PRENSA sobre su estilo de vida y los señalamientos que se le han hecho en la palestra pública.

Su estilo gerencial es descentralizado para eximirse de responsabilidades en caso de cuestionamientos futuros, según una fuente. En cambio, hay quienes valoran en él “su extraordinaria capacidad de trabajo y su aguda inteligencia”. Además, al grueso y barbudo magistrado, lo reconocen como un amigo que, cuando es incondicional, ayuda hasta las últimas consecuencias.

BAJO LA ÉGIDA DEL CARDENAL

¿Quién es Roberto Rivas Reyes? ¿Por qué su reelección como presidente del poder electoral provocó tres meses de crisis en ese poder del Estado?

Rivas Reyes adquirió importancia pública a mediados de los ochenta, cuando se convirtió en la mano derecha del cardenal Miguel Obando y Bravo para los asuntos humanitarios de la Iglesia (fue director de la Comisión Social de Promoción Arquidiocesana —Coprosa— entre 1981 y 2000), y asistió al Cardenal en la mediación que éste hizo para la pacificación del país.

Es bajo la égida del Cardenal que Rivas Reyes ha logrado ascender hasta las cumbres de la política nicaragüense. Su gestión al frente del poder electoral ha sido accidentada. Allí ha estado rodeado de personas de confianza de muchos años: Winston Betanco, su abogado, y Eduardo Ubilla, entre otros.’’

LA PASIÓN DE RIVAS

Los que conocen a Roberto Rivas Reyes coinciden: su pasión es el lujo y la ostentación. Según fuentes policiales, Rivas sacó hacia Honduras los dos Mercedes Benz que posee, para evitar que se los embargaran en caso de estallar un juicio penal en su contra.

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