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Después de las pérdidas millonarias provocadas por el gorgojo descortezador del pino, los técnicos del Inafor han encontrado tres especies más.

Gorgojos siguen molestando

Tres especies están afectando pinares segovianos Mayda Isabel Meléndez [email protected] Tres tipos de gorgojos están habitando los pinares de Dipilto, Jalapa y San Fernando, municipios del departamento de Nueva Segovia, por lo que técnicos del Instituto Nacional Forestal (Inafor) se movilizaron a la zona a realizar labores de monitoreo y de esta manera detectar a […]

  • Tres especies están afectando pinares segovianos

Mayda Isabel Meléndez [email protected]

Tres tipos de gorgojos están habitando los pinares de Dipilto, Jalapa y San Fernando, municipios del departamento de Nueva Segovia, por lo que técnicos del Instituto Nacional Forestal (Inafor) se movilizaron a la zona a realizar labores de monitoreo y de esta manera detectar a tiempo una posible plaga de los mismos.

Carlos Hernández, delegado departamental del Inafor en Nueva Segovia, aseguró que los ataques de los gorgojos descortezadores “dendroctonus aproximatum, isp calligraphus e ips grandicollis” se conocen como “secundarios”, y hasta cierto punto su existencia es considerada normal después de ejercer control sobre el gorgojo descortezador del pino (“dendroctonus frontalis”).

Según el funcionario, cuando se mata al famoso gorgojo descortezador, los insectos secundarios se mantienen en el área de regeneración atacando principalmente árboles débiles por la sequía, quemas, viento, sierra y otros.

NO HAY QUE TALAR

Hernández dijo que hasta el momento, en un espacio de 40 hectáreas se han encontrado tres focos de infección, los cuales se concentran en grupos que abarcan entre 15 y 20 árboles cada uno.

A fin de evitar la propagación de insectos, los técnicos decidieron no talar los árboles afectados pues, según explicó Hernández, el “dendroctonus aproximatum” se desarrolla más fácilmente en el “tocón” de los árboles. Es decir, en el tronco que queda plantado.

En cambio, los dos tipos de “isp” antes mencionados, prefieren vivir en árboles talados, aunque también viven en árboles en pie. Por tanto, de ninguna manera se deben talar los árboles habitados por estos gorgojos secundarios.

Hasta el momento sólo se han reportado dos hectáreas dañadas sin pérdidas económicas que lamentar, sin embargo se mantiene un sistema de monitoreo porque, aunque la tendencia general es que la afectación desaparezca, hay que estar pendientes de que no se convierta en una plaga.  

Economía

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