- Representante de OPS dice que está de acuerdo si es para mejorar calidad de vida de seres humanos
Valeria González y Gabriela [email protected]
El tema de la clonación nuevamente salta al tapete, después que un grupo de científicos estadounidenses afirmó que habían clonado el primer embrión humano en etapas tempranas, pero el representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en Nicaragua, Patricio Rojas, dijo que la investigación científica en este campo debe ser normada.
“La clonación en manos inexpertas, que no tengan un sentido ético definido puede producir desastres, por eso es preciso normar la investigación científica en este campo”, manifestó.
Expresó que él estaría de acuerdo con este tipo de experimento si mejoran la calidad de vida de los seres humanos y contribuyera a prolongar la vida de los enfermos, tras indicar que “esto tiene que ser el resultado de una discusión científica, donde estén representados todos los intereses tanto científicos como bioéticos”.
Los científicos que clonaron el embrión humano en un laboratorio norteamericano, ubicado en Massachussets (Estados Unidos) han expresado a la opinión pública que este experimento “prepara el escenario para la clonación terapéutica humana como una fuente potencialmente ilimitada de células con inmunidad compatible para ingeniería de tejidos y trasplante”.
“La clonación que está surgiendo en este instante en Estados Unidos, no tiene por objeto reproducir seres humanos, sino mantener células que pueden ser utilizadas para curar diversas enfermedades. Este experimento no pretende reproducir un ser humano de probeta, como se ha especulado”, sostuvo el representante de la OPS en Nicaragua.
Para la procuradora penal Alba Hury Toruño, si de la clonación de embriones se pasara a la de humanos, el mundo entraría en “un caos” de proporciones inimaginables, porque ante un hecho criminal en el que intervengan dos o más individuos clonados, una investigación policial se hallaría ante un callejón sin salida.
Agregó que perseguir el crimen sería imposible cuando se tratare de personas con doble identidad genética (clonadas), es decir con ADN, huellas digitales y palmares idénticas.
“Para mí eso no es un adelanto científico, y en todo caso, si se llegara a aplicar debería restringirse al ámbito humano, aunque en el animal o vegetal tal vez podría ser provechoso, desde el punto de vista que la humanidad podría duplicar los alimentos, entre otras cosas”, dijo Toruño.
Por otro lado, indicó, si la clonación humana llegara a ser instaurada, se atentaría contra la humanidad, porque la explosión demográfica podría agravarse”, dijo.
Por su parte, Mariángeles Argüello, titular de Salud (Minsa), comentó que la clonación es un tema que se está tratando a nivel de países desarrollados, y en Nicaragua “estamos muy largo para pensar en esa situación, porque esos avances científicos tecnológicos no están al alcance de nuestro país, por eso prefiero no opinar de ese tema”.
IGLESIA CONDENA MANIPULACIÓN GENÉTICA
La Iglesia condena la “manipulación genética”, que es la clonación humana, según monseñor Silvio Fonseca.
Explicó que se debe distinguir entre lo científico y lo moral. “La Iglesia no está en contra de los descubrimientos científicos, pero cuando se llega a las personas, la Iglesia apoya, promueve y defiende la vida desde su concepción”, subrayó.
Dijo que es peligroso que el hombre disponga de la vida humana, porque el día de mañana puede construir un “monstruo” a base de manipulación genética.
“Está en riesgo la vida de los seres humanos, porque la clonación pretende la selección de los seres humanos como lo practicó Hitler en la Segunda Guerra Mundial”, agregó.
Reiteró que la Iglesia no está en contra de la ciencia, pero en lo que se refiere a la experimentación humana, hay fronteras éticas que deberían estar protegidas por las leyes de los países.
Recordó que desde febrero de 1987 la Iglesia publicó un documento que se llama “El don de la vida”, donde desde entonces, advertía sobre el peligro de la clonación humana.
“Algunos intentos de intervenir sobre el patrimonio cromosómico y genético, no son terapéuticos, sino que miran a la producción de seres humanos seleccionados en cuanto el sexo u otras cualidades prefijadas. Estas manipulaciones son contrarias a la dignidad personal del ser humano a su integridad y a su identidad”, dice el texto.