14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Aprende a ser responsable de tus decisiones

Estimada Psicóloga: Tengo 14 años, me enamoré locamente de un chico de 22 años, empezamos a salir, pensé que mi vida iba a cambiar totalmente y que mejoraría pero me equivoqué. Anduve con él dos meses y medio, en ese tiempo tuvimos caricias fuertes. Hasta que un día él me dijo que quería tener relaciones […]

Estimada Psicóloga: Tengo 14 años, me enamoré locamente de un chico de 22 años, empezamos a salir, pensé que mi vida iba a cambiar totalmente y que mejoraría pero me equivoqué.

Anduve con él dos meses y medio, en ese tiempo tuvimos caricias fuertes. Hasta que un día él me dijo que quería tener relaciones sexuales conmigo y acepté porque lo quiero.

El problema es que él tiene su novia formal y ya tiene con ella ochos años. Él me prometió que si me entregaba formalizaría todo conmigo, le creí y me entregué a él sin medir consecuencias.

Nunca imaginé que me iba a hacer esto y me siento mal porque lo quiero y siento que me trató como a una mujer de la calle.

Ruego me aconseje por favor.

Respuesta: Tu historia es como muchas que se repiten una y otra vez, donde hombres como el que conociste satisfacen su hombría realizando actos tan bajos y sucios como es el utilizar el engaño, la manipulación y la falsedad para lograr el propósito de tener sexo sin ninguna otra satisfacción, y donde hay adolescentes y jóvenes como vos que creyendo en ellos se entregan “sin medir consecuencias”.

Es muy claro entonces que en estas relaciones hay que aprender a medir consecuencias porque es tu cuerpo, tus sentimientos y tus emociones las que entran en juego y si esto no es valioso para vos ni para ninguna de nosotras como mujeres que podemos vernos involucradas en situaciones como éstas, ¿qué se espera de nuestra felicidad? ¿Cuál es entonces el motivo de nuestra existencia?

Ninguna persona en este mundo merece tanta entrega de parte tuya que te lleva a olvidarte de vos misma, entonces tu vida deja de tener lógica y sentido. Vos y cada una de nosotras nacimos con un propósito y una misión, la tuya no puede haber sido nacer para que a tus 14 años estés sufriendo una decepción amorosa, tu vida también tiene otros objetivos. Vos sos distinta a él y esto hace que muchas veces la entrega no sea recíproca ni el interés auténtico.

Haber creído en él y entregarte no te hace menos valiosa. Evalúa qué aprendiste de positivo de esa experiencia. Date cuenta que sos capaz de amar y de hacerte responsable de tu vida donde antes de decir sí o no va a prevalecer tu voluntad y no la de otros, tus deseos, sentimientos y pensamientos antes que los del otro.

Aprende a ser consciente y responsable de tus decisiones, asumiste tener una relación con él, aún a sabiendas que existía una tercera persona.

¿Qué ventajas podés tener? ¿Crees que él vale la pena como para que inviertas tus energías y tus pensamientos en él?

Vos valés mucho y sos importante, sácale la ganancia personal a esa experiencia y date la oportunidad de crecer y ser vos misma, esto implica caer, pero volver a levantarte, caminar segura, consciente de tu existencia y de que cada día que abres tus ojos vuelves a nacer a un nuevo día, y es tu responsabilidad que este día sea distinto al otro.

Tu vida debe continuar porque la vida no se detiene, todo lo que te limite a hacerlo elimínalo de tu vida, siempre recuerda que lo más importante es que no te hagas daño. SE FELIZ.

Aquí Entre Nos

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí