- Presentan documento “La Nicaragua que queremos”, contraparte de la “Estrategia reforzada de reducción de la pobreza”
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Que el salario máximo de un funcionario público no exceda los 20 salarios mínimos, y que en la educación del país se invierta el siete por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), es parte de la Nicaragua que quieren las organizaciones no gubernamentales del país, quienes publicaron su propuesta el viernes.
“La Nicaragua que queremos”, el documento que presentó ayer la Coordinadora Civil para la Emergencia y la Reconstrucción, CCER, plantea que se eliminen las prebendas a los funcionarios públicos, y a favor de los trabajadores propone un sueldo mínimo que les permita adquirir los 53 productos de la canasta básica exentos de impuestos.
Pero la transparencia institucional y la mejoría económica de los empleados no son las únicas preocupaciones de la sociedad civil. La agenda de las organizaciones también tiene propuestas para las demandas sociales de la población.
Proponen, por ejemplo, elevar la inversión actual en educación y mejorar la calidad de la misma, a través de la profesionalización de los docentes y de impulsar reformas curriculares en los sistemas de preescolar, primaria y secundaria.
El documento aboga por una salud preventiva e integral con énfasis en la mujer y la niñez. Destaca una atención especial para las personas con discapacidad.
MEJORAR ACCESO A LA TIERRA
Y para levantar la economía del país se plantea la formulación y puesta en práctica de una estrategia “integral de desarrollo productivo agropecuario e industrial nacional” que, entre otras cosas, implica mejorar el acceso a la tierra y a los sistemas de comercialización productiva.
Ana Quirós reconoció que este documento es la versión desde la sociedad civil a la “Estrategia reforzada de reducción de la pobreza” del gobierno, texto al cual se le han señalado inconsistencias.
Quirós cree que un año de elecciones significa un “buen chance” para discutir este tipo de propuestas.
ARTESANOS EN FERIA
– Se les ubicó en un rincón de la Feria de ONG, que culminó ayer. No ofrecieron plegables ni revistas de promoción de lo que hace su organización. Ofrecen lo que elaboran.
– Son los niños y adolescentes del Centro Gerardo Barreto, de la 14 de Septiembre, quienes con sus retrateras forradas con fibra de coco y botellas forradas de cinta adhesiva se distinguen del resto de participantes en la feria del Olofito.
– Artículos como retrateras, botellas forradas, adornos y móviles hechos con cáscaras de jícaros, pintadas de color tierra, son elaborados por ellos. Los precios de tales manualidades oscilan entre los 25 y 100 córdobas.
– Pero en la feria se expuso también los trabajos manuales de colectivos de mujeres, así como de productos que desarrollan a partir de nuevas iniciativas de producción.