14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Los esposos Minerva Sevilla Lumbí y Domingo del Socorro Narváez Gómez. La niña Belki Suvielka, en una foto cuando tenía un año de edad. Ahora tiene cuatro.

Disputa por niña de cuatro años

El matrimonio Narváez Sevilla asegura que inscribió a la niña como propia porque les fue regalada por su madre biológica Sin embargo, ésta dice se las dejó cuidando por cuatro años, mientras ella iba a trabajar a Costa Rica Mercedes Sequeira/[email protected] JUIGALPA.- Una pareja de casados que crió e inscribió con sus apellidos a una […]

  • El matrimonio Narváez Sevilla asegura que inscribió a la niña como propia porque les fue regalada por su madre biológica
  • Sin embargo, ésta dice se las dejó cuidando por cuatro años, mientras ella iba a trabajar a Costa Rica

Mercedes Sequeira/[email protected]

JUIGALPA.- Una pareja de casados que crió e inscribió con sus apellidos a una menor sin consentimiento de su madre biológica lograron su excarcelación bajo fianza, luego que el juez dictara auto de prisión para ambos, supuestamente por cometer delito en el Estado Civil de las Personas en perjuicio de la menor, la que hoy es devuelta en brazos de su progenitora tras reclamarla después de sus cuatro años de existencia.

La menor Belki Suvielka Narváez Sevilla fue supuestamente inscrita por los esposos Minerva Sevilla Lumbí y Domingo del Socorro Narváez Gómez como hija propia sin consentimiento de su madre biológica.

Marta Felícitas López, madre de la pequeña, acusó al matrimonio Narváez Sevilla de robarle a su hija y reclamó la potestad, ya que ésta se encontraba al cuido de sus padres de crianza.

Según los procesados, Marta Felícitas López les regaló a la pequeña Belki desde que nació, puesto que ésta no podía criarla por falta de recursos económicos, entregándole el epicricis de la niña que le dieron en el Hospital “Asunción”, usurpando el nombre de la acusada, para que la inscribiera en el Registro Civil de las Personas como su propia hija.

Sin embargo, esta versión fue negada por Felícitas, argumentando que su hija “simplemente” la había dejado al cuido de Minerva y Domingo, mientras ella se iba a trabajar al vecino país de Costa Rica, porque es madre soltera y tenía que mantener a otros tres de sus vástagos.

“Ella (Felícitas) nos regaló a la niña y acordamos que podía verla, siempre cuando deseara. La verdad sobre quién es su madre la iba a saber cuando comprendiera”, sostuvo Minerva Sevilla.

Felicitas López, quien vive en Puerto Díaz y llega a vender pescados a la ciudad, declaró ante el juez, que fue Minerva quien se ofreció a cuidarle a la pequeña para que pudiera trabajar, pero que ésta se aprovechó de la ocasión y la registró con sus apellidos, tal como si la había procreado.

Tanto Minerva como Domingo buscarán la forma de que la pequeña les sea devuelta, porque según dicen, no pueden vivir sin ella. “Yo siento que la he perdido, como que se me ha muerto mi niña”, dijo Minerva llorando.

“Yo quiero que me ayuden, que Mifamilia investigue la vida de ella (Felícitas) y la mía, porque no es justo que me la arrebaten de mis brazos después de cuatro años, cuando le he dado todo, desde sus medicamentos, ya que padece de asma, hasta la ropa que se pone, mientras que ella nunca se preocupó por Belki”, apuntó la acusada.

Por su parte Domingo Narváez, también implicado en el caso, manifestó que él sintió la presión del juez para que regresaran a la niña. “Mi abogado me dijo que el juez había dicho que si no la entregábamos caíamos presos, por lo que decidimos regresarla. Yo responsabilizo a las autoridades de lo que le pase a la niña. Si la felicidad de mi hija depende de que me corten la cabeza, prefiero írsela a poner al juez y que me la vuelen”, sentenció el padre de crianza de Belki.


JUEZ:”HAY DELITO”

El Juez de Distrito del Crimen, doctor Octavio Rothschuh, dijo a LA PRENSA que los acusados fueron puestos en libertad a petición de la madre biológica de la menor, ya que ésta quería solamente que le regresaran a su hija. Pero afirmó que la pareja cometió delito inscribiendo a Belki como sus verdaderos padres, violentando el artículo 222 del Código Penal al no seguir el debido procedimiento del proceso de adopción.  

Nacionales

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí