Pese a que en los últimos dos meses más de 13 mil empleos formales se han destruido en el mercado del trabajo, el régimen de Daniel Ortega asegura que la economía continúa su proceso de consolidación en su crecimiento en la primera mitad de este año.
“Así, la economía nicaragüense ha seguido consolidándose en una trayectoria de crecimiento estable, con una baja tasa de desempleo, manteniendo un buen desempeño en la mayoría de los sectores económicos y la demanda interna, a la vez que la inflación sigue reduciéndose”, afirmó el Banco Central de Nicaragua (BCN) en su informe de Política Monetaria y Cambiaria publicado ayer.
Y aunque la autoridad monetaria califica de baja la tasa de desempleo, lo cierto es que una actualización sobre la base de afiliados del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) refleja que en los últimos dos meses la entidad ha perdido más de 13,000 contribuyentes, aunque comparado con diciembre del año pasado, hay un leve aumento.
Hasta junio, el INSS reportó 799,057 asegurados, por debajo de los 812,151 que contabilizaban en abril, que había sido el máximo registrado en lo que va del año. Es decir, una pérdida de 13,094 plazas formales, en una economía que sigue mostrando dificultades para crear empleos pese a que el Gobierno habla de un crecimiento que está por encima del 4 por ciento.
Limitada creación de empleos
Tal es la fragilidad del mercado del trabajo, que comparado con diciembre pasado, el INSS solo ha afiliado a 7,144 personas, es decir a un ritmo de 1,191 por mes. Y comparado con junio del año pasado, hay un aumento de 8,660, lo que implica que la economía en el último año apenas ha conseguido crear 722 empleos cada mes. Hace un año habían 790,397 asegurados.
“El crecimiento económico sigue siendo acompañado de una baja tasa de desempleo, la que se ubicó en tres por ciento en mayo de 2024, con aumento del empleo formal”, dice el BCN, pese a que en el quinto mes del año se perdió gran parte de los 13 mil puestos en el bimestre mayo-junio.
El BCN dice que las plazas formales que se han creado en el último año se deben a incrementos en los sectores de servicios, industria manufacturera, y minas y canteras.
Pese a ello, el régimen afirma que “el empleo se mantiene consistente con el desempeño de la actividad económica, aunque persiste una tasa global de participación laboral menor a la registrada antes de la pandemia del covid-19, de tal manera que el mercado laboral continúa reflejando la recomposición entre la oferta y la demanda de trabajo que causó la pandemia”.
En términos de promedio anual, la tasa de participación laboral se ubica en 67.6 por ciento (66.8 por ciento a mayo 2023), reflejando un aumento respecto al año anterior, lo que podría ser indicativo de una mejoría en ese indicador y sería una señal de un ajuste gradual del mercado laboral al ritmo de la actividad económica, precisó.
Suaviza crisis de precios
Incluso el régimen habla de una inflación en proceso de desaceleración, pese a que la canasta básica en junio rompió récord al superar los 21,000 córdobas, tras experimentar un alza de 1,200 córdobas en seis meses. Pese a ello, el BCN dice que la inflación se enfrió con mayor fuera en el segundo trimestre, “en un contexto de descenso gradual de los precios internacionales, expectativas de inflación ancladas en un nivel más bajo, deslizamiento cambiario en cero por ciento, y el mantenimiento de subsidios y políticas monetarias y fiscales equilibradas”.
“No obstante, el factor de rezago en el traspaso de la disminución de los precios externos a los precios locales, ha condicionado que la desaceleración de la inflación sea todavía moderada. Así, la inflación general interanual a junio de 2024 fue de 4.82 por ciento (9.8 por ciento en junio de 2023)”, precisó.
En medio de la espiral de alzas de precios, el BCN asegura que “la estabilidad de precios” ha sido apoyada por la política de subsidios generalizados a los precios del diésel, gasolina y gas butano de uso domiciliar. Adicionalmente, el BCN redujo el deslizamiento cambiario al cero por ciento (0 por ciento) anual a partir de enero de 2024, continuando con la política de reducción de deslizamiento cambiario implementada desde 2019, contribuyendo a atenuar el nivel de la inflación.
A nivel macroeconómico, el régimen resaltó que al primer trimestre la balanza de pagos registra superávit en la cuenta corriente, “impulsado particularmente por el dinamismo de los ingresos de remesas familiares, el crecimiento de los ingresos de turismo, la recuperación de las exportaciones de la rama textil de zona franca y a que se mantiene la fortaleza de las exportaciones de mercancías”.
Otros indicadores
Y aunque los ingresos por exportaciones exhiben una caída a mayo, en su informe el BCN habla de que “los precios de los productos de exportación se han mantenido relativamente favorables, que, en conjunto con una disminución en los precios de importación de petróleo y combustibles, permitieron una mejora en los términos de intercambio”.
Los ingresos por exportaciones totales de mercancías y zona franca fueron de 3,283.1 millones de dólares hasta mayo, lo que representó una disminución de 0.9 por ciento interanual (-1.6 por ciento en exportaciones de mercancías y -0.1 por ciento en exportaciones de zona franca), precisa.
En el ámbito financiero, el BCN resalta que la posición de “los bancos y financieras continúa sólida y fortalecida por el buen desempeño de los principales indicadores macroeconómicos, con la mayoría de las actividades económicas expandiéndose, lo que ha permitido que continúe consolidándose el crecimiento de la cartera, respaldada principalmente por mayores depósitos del público”.
Y aunque las alzas de precios han golpeado duro el bolsillo de los hogares, el Banco Central dice que “la evolución económica positiva está creando mayor capacidad de pago de los hogares y las empresas, incidiendo en calidad de la cartera, con reducción de la cartera en riesgo y la mora”. En ese contexto, a junio de 2024, la cartera de crédito creció 15.7 por ciento interanual y los depósitos aumentaron 10.8 por ciento.
En ese contexto, el BCN está proyectando que el crecimiento económico de 2024 se ubique en un rango de entre 3.5 y 4.5 por ciento. La inflación la ubica en un rango de entre 3.5 y 4.5 por ciento. Mientras que prevé que el empleo se sitúe entre 3 y 3.5 por ciento.
Por el lado del sector externo, se espera que la balanza de pagos presente un superávit de cuenta corriente de entre 4.5 y 5.5 por ciento del PIB en 2024, indica.