La masiva llegada de haitianos a Nicaragua, con el fin de seguir su travesía hacia Estados Unidos, propicia el movimiento de millones de dólares. Solo en los ingresos que le está generando en el Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino, y la Empresa Administradora de Aeropuertos Internacionales (EAAI), la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo se está lucrando de la migración a la que un día le cerró las puertas del país, pero que hoy fomenta al convertir al país en un “trampolín” hacia el norte.
A los migrantes haitianos la dictadura ahora les permite viajar sin visa para facilitarles la entrada al país y que puedan continuar su viaje hacia la frontera de México con Estados Unidos, donde llegan a engrosar a los millones de migrantes indocumentados que aquel país trata de detener sin mucho éxito, lo que lo ha convertido en uno de los principales dolores de cabeza de la Administración del presidente Joe Biden.
En palabras del politólogo Manuel Orozco, director del programa de Migración, Remesas y Desarrollo del Diálogo Interamericano, la dictadura orteguista “vende el aeropuerto de Managua como puente a haitianos en ruta a Estados Unidos”, puesto que el 60 por ciento de los migrantes que salen de Haití rumbo a territorio estadounidense pasan por Managua.
El experto creó una base de datos en la que detalla que desde Puerto Príncipe, capital de Haití, han llegado a Managua —entre agosto y octubre de este año— un total de 31,475 pasajeros a bordo de 268 vuelos.
Además, indicó que la migración reportada en la frontera de México con Estados Unidos —en ese mismo período— es de 54,671 personas de origen haitiano.
Entre Managua y Puerto Príncipe no existe un vuelo de ruta directa, es decir que para viajar entre ambos países se necesita hacer escala en, al menos, un tercer país. De acuerdo con una búsqueda en aplicaciones de viaje que calculan precios de boletos de avión estos vuelos con un tercer país de escala rondan los 800 y mil dólares. Las escalas más comunes son Santo Domingo, en República Dominicana y Miami. Sin embargo, esta última estaría descartada ya que de poder viajar directamente a EE. UU. los haitianos no tendrían que realizar su periplo hacia Nicaragua y de ahí al norte de forma terrestre.
Vuelos chárter que cuestan entre 800 y 2 mil dólares por boleto
Los vuelos que sí están llegando a la capital nicaragüense desde Puerto Príncipe son chárter, un lucrativo negocio que se convirtió en la única opción de muchos haitianos que buscan emprender el “sueño americano”, a través de “la puerta” que la dictadura de Daniel Ortega ha abierto para que “suban” hacia el norte hasta llegar a la frontera entre México y Estados Unidos.
El costo de un boleto en este tipo de vuelos, que generalmente está contratado por agencias de viaje, se cotiza entre 800 y 2 mil dólares, dependiendo del tipo de avión que se contrate, que puede tener capacidad de entre 50 y 220 pasajeros. Esto de acuerdo con fuentes que se encargan de la movilización interna de los haitianos desde el Aeropuerto de Managua hasta las diferentes fronteras con Honduras. La movilización interna también se ha convertido en un negocio lucrativo.
Datos de Manuel Orozco, sin embargo, elevan los precios entre los 3 mil y 5 mil dólares cada boleto.
Por su parte, los haitianos consultados en Managua sobre cuánto pagaron por sus boletos afirman que “miles de dólares”.
Aerolínea dice que vuelos “los contratan terceros”
Con base en el precio mínimo estimado de 800 dólares de cada boleto de avión, los 31,475 pasajeros haitianos —que según Orozco han llegado a Nicaragua entre agosto y lo que va de octubre— han gastado más de 25 millones de dólares en pasajes.
Si se hace el cálculo con la tarifa más alta estimada, 5 mil dólares, el monto total de los más de 31 mil haitianos que han llegado a Managua en estos poco menos de tres meses, la cifra asciende a más de 157 millones de dólares.
Sunrise Airways es una de las aerolíneas que opera gran parte de los vuelos chárter hacia Managua. LA PRENSA consultó sobre los precios de los boletos, pero se limitaron a decir que no operan vuelos directos hacia el país centroamericano y que los vuelos “los contratan terceros,” sin dar detalles.
“Mareas humanas”
En redes sociales también ya es palpable la masiva salida de haitianos hacia Nicaragua. Algunos haitianos han comenzado a divulgar, en sus redes sociales, lo que han llamado “las mareas humanas” de sus compatriotas saliendo por el aeropuerto de ese país hacia territorio nicaragüense.
El usuario Didieu Georges, a través de sus redes sociales, divulgó un video con la descripción “Aeropuerto haitiano, marea humana saliendo hacia Nicaragua. Los haitianos obstaculizados por los políticos y sus colaboradores siguen abandonando el país”.
De “muro de contención” a “trampolín” hacia Estados Unidos
La política migratoria que dicta el orteguismo es cambiante de acuerdo a sus intereses políticos y económicos.
Entre 2015 y 2017, el orteguismo sostuvo una política cero tolerancia para la migración irregular, incluso persiguiendo y cerrando el paso a miles de migrantes de origen cubano, haitiano, venezolano y africano, dejándolos varados en la frontera sur.
El régimen incluso provocó una crisis migratoria en la región al convertirse en un “muro de contención” en Peñas Blancas, donde impidió la entrada al país de miles de migrantes que dejó varados en Costa Rica. En 2017 la Policía detuvo, procesó y condenó a prisión a una maestra de Rivas que trasladaba a mujer haitiana hacia la frontera con Honduras.
Según el analista opositor, Eliseo Núñez, Ortega quiere poner presión a Estados Unidos en el sensible tema de la migración irregular en la frontera sur.
“Estamos hablando que (Daniel) Ortega está convirtiendo la migración hacia los Estados Unidos en un arma geopolítica, y esto lo hace no con el sentido simple de ganarse el dinero que se gana, el objetivo de él es tener a la mano algo que ofrecerle a Estados Unidos, y es decirle yo detengo todo esto a cambio de que vos me levantés las sanciones que más me duelen”, dijo el exdiputado Eliseo Núñez Morales.
Fabulosas ganancias por tarjeta de turismo y uso de terminal
Pero mientras llega el momento de esa negociación, Ortega le saca un nuevo provecho económico a la necesidad de los migrantes. Al convertir el país en trampolín de migrantes extranjeros, los cobros oficiales que realiza el aeropuerto han crecido como la espuma, esto sin tomar en cuenta qué tipo de ganancias recibe al permitir y fomentar sin mayor trámite los vuelos chárter “contratados por terceros”.
A estos nuevos ingresos hay que sumarles el extraordinario crecimiento en remesas que recibe el país de los cientos de miles de nicaragüenses que se han visto obligados a migrar desde 2018 por la represión gubernamental.
Entre enero y junio, según los informes de Hacienda y Crédito Público, el Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino captó por tarjeta de turismo 33.06 millones de córdobas, o sea que en seis meses duplicó el ingreso que tenía programado para todo el año, por el orden de 17.9 millones de córdobas. Y hasta junio de este 2023, en concepto de derecho de uso de terminal aérea, el Estado ha captado 20.35 millones de córdobas.
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Adicional a estas ganancias, se conoce que la dictadura orteguista también se lucra del pago de visas que hacen los extranjeros para ingresar al país, esto en el caso de ciudadanos originarios de países que no están exentos, tal como ocurre con los africanos.
Las tasas que Migración de Nicaragua cobra en concepto de visa a los africanos no son claras, en el sitio web de la institución no se detallan los costos que dichas nacionalidades deben pagar.