La recaudación de impuestos en Nicaragua no pasa buen momento. Está creciendo, pero no al ritmo observado en los últimos dos años. Entre enero y marzo de este año, el Gobierno reportó una recaudación de 33,506 millones de córdobas, 6.11 por ciento más comparado con igual periodo del año pasado.
La tasa de crecimiento en el primer trimestre está por debajo del 45.87 por ciento reportado en similar lapso del 2022, cuando se recaudaron 31,577.5 millones de córdobas, mientras que en el 2021 fueron 21,647.4 millones en los primeros tres meses.
Es decir que mientras este año la recaudación produjo 1,928.5 millones de córdobas adicionales, el año pasado en igual periodo hubo una sobrerrecaudación de 9,930 millones de córdobas, según el informe de ejecución presupuestaria del Ministerio de Hacienda y Crédito Público (MHCP).
Según Hacienda, al primer trimestre de 2023 los ingresos tributarios representan 93.5 por ciento del total de los ingresos percibidos en el Presupuesto General de la República, siendo el Impuesto sobre la Renta el de mayor aporte a la recaudación (49.1 por ciento), seguido en importancia por el Impuesto al Valor Agregado (28.4 por ciento).
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IR, principal soporte
La recaudación del Impuesto de la Renta (IR) a marzo fue de 17,584.2 millones de córdobas, superior en 2.6 por ciento comparado con igual periodo del año pasado. Este crecimiento significó un ingreso adicional de 445.8 millones de córdobas.
Dentro del IR, el que pagan los trabajadores aportó 2,616.6 millones de córdobas, 318 millones más (13.8 por ciento) respecto al mismo período de 2022.
En tanto, la recaudación por Rentas de las Actividades Económicas contribuyó con 11,958.8 millones, mayor en 265.9 millones (2.3 por ciento) al observado de igual período de 2022.
El rubro de Rentas de Capital, sumó 2,692.8 millones de córdobas al IR global, 222.3 millones adicionales respecto a igual periodo del año pasado para un crecimiento de 7.6 por ciento. Y finalmente, la recaudación por Ganancias y Pérdidas de Capital fue de 316.0 millones, 36.3 por ciento más que el año pasado.
Sobre el IVA
Una segunda fuente de importancia de los impuestos es el de Valor Agregado, que contribuyó con 10,183.4 millones, lo que significó un aumento adicional de 1,254.3 millones de córdobas (14 por ciento), originado principalmente por el comportamiento positivo de la recaudación del IVA interno.
Solo a nivel interno, este impuesto aportó a través de las ventas 3,554.2 millones, 28 por ciento más con respecto a igual periodo del año pasado, lo que implicó un ingreso adicional de 777.3 millones .
Por su parte, la recaudación del IVA importado alcanzó un total de 6,629.2 millones, lo que implicó un aumento de 7.8 por ciento, es decir un aumento de 477 millones, según cifras de Hacienda.
ISC en aumento
En tanto, el Impuesto Selectivo al Consumo, incluyendo el Impuesto Específico Conglobado a los Combustibles (IECC), Impuesto Específico al Consumo de Cigarrillos y Otros Productos de Tabaco (IECT) y alcoholes, totalizó 4,630.6 millones.
De ese monto, se recaudó a nivel interno 1,195.9 millones (25.8 por ciento del total); otros 1,726.7 millones al IECC (37.3 por ciento) y 1,708 millones (36.9 por ciento) a productos importados. En su conjunto, por este impuesto se recaudaron 211 millones adicionales (4.8 por ciento) respecto al mismo período 2022.
A finales de abril, el régimen de Daniel Ortega metió tijera a su meta de crecimiento para este año, al tiempo que admitió que los elevados precios internos se prolongarán en lo que resta del año debido a factores externos, publicó el Banco Central de Nicaragua (BCN) en su balance del primer trimestre.
En una actualización el Banco Central estableció en entre 2.5 y 3.5 por ciento el nuevo rango de crecimiento económico, menos que lo esperado en enero cuando prtendían una expansión de entre 3 y 4 por ciento.
Pese a ello, el reporte el máximo emisor bancario indica que “la economía nicaragüense sigue mostrando fortaleza en su trayectoria de crecimiento”.
“En estas proyecciones, un crecimiento más cercano al 2.5 por ciento estaría condicionado por una situación de desaceleración más acentuada en las economías con las cuales el país tiene mayores vínculos, mientras que un crecimiento más inclinado hacia el 3.5 por ciento sería impulsado por un entorno externo más favorable que el previsto”, afirma el máximo emisor bancario.
El régimen identifica una serie de riesgos para sus metas económicas de este año, entre las que menciona “la incertidumbre que prevalece en el ámbito internacional, producto del entorno geopolítico tendiente a la fragmentación geoeconómica, que repentinamente puede inducir choques que causan daño a la economía global, con consecuencias en las cadenas globales de suministros y en los precios del petróleo y alimentos, generando presiones sobre los precios domésticos”.
También los riesgos relacionados con la prolongación de los efectos de la pandemia, como un mayor endurecimiento de la política monetaria a nivel internacional, ante una inflación más persistente de lo esperado, lo que pudiera desacelerar aún más la dinámica de producción mundial y afectar las exportaciones. “En el país, también persisten los riesgos relacionados a los eventos climáticos, que pueden incidir sobre la evolución de variables macroeconómicas”, puntualiza.
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Sobre los ingresos no tributarios
Por otra parte, Hacienda reportó que los ingresos no tributarios totalizaron 2,325.6 millones, lo que significa una caída de 3.9 por ciento, equivalente a 93.8 millones menos con relación a igual periodo del año pasado.
Por unidad recaudadora, la Dirección General de Ingresos consiguió 25,548.2 millones, 1,417.9 millones adicionales, equivalente a un crecimiento de 5.9 por ciento respecto a igual periodo del año pasado.
Por su parte, la Dirección General de Servicios Aduaneros recaudó en tres meses 9,300.9 millones, 633.9 millones adicionales, lo que representa aumento de 7.3 por ciento en relación a similar lapso del año pasado.