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"Los nicaragüenses tenemos que darnos la mano", dice Jorge Luis López tras recibir el parole humanitario para dos de sus hermanos

“Los nicaragüenses tenemos que darnos la mano”, dice Jorge Luis López tras recibir el parole humanitario para dos de sus hermanos

El nicaragüense que pudo patrocinar a dos de sus hermanos con el parole humanitario

Luego de años de espera tres hermanos se reencontrarán en Estados Unidos gracias al parole humanitario que dos de ellos recibieron con el patrocinio del que vive en Estados Unidos

Después de 15 años, el nicaragüense Jorge Luis López se reencontrará con dos de sus hermanos en Estados Unidos. Fue una larga espera, que incluso casi lleva a sus familiares a emigrar irregularmente al país norteamericano. Sin embargo, el 23 de enero de este año, López recibió la noticia de que sus parientes fueron beneficiados con el programa de parole humanitario, que el gobierno de Joe Biden anunció para ciudadanos de Nicaragua, Haití, Cuba y Venezuela.

“Me llena de alegría (la noticia), ya que ya había sometido una aplicación (hace cuatro años) para pedir a uno de mis hermanos. Desgraciadamente estos procesos duran entre 10 a 14 años, (pero) con el parole logramos romper esa barrera”, dice entusiasmado López, quien trabaja como obrero de la construcción.

Lea además: ¿Por qué solo unos 30 mil nicaragüenses podrían conseguir el parole para entrar a Estados Unidos? Aquí le explicamos

El parole humanitario es un programa, habilitado a inicios de enero por el gobierno estadounidense, que permite que cada mes entren legal y por vía aérea 30 mil ciudadanos de Nicaragua, Haití, Cuba y Venezuela, y que se queden hasta por dos años; siempre y cuando tengan un patrocinador que los reciba en ese país.

López es el patrocinador de sus dos hermanos. Muy satisfecho comenta que aplicar es fácil y rápido, pero, sobre todo, enfatiza que es una oportunidad para que los nicaragüenses puedan llegar a Estados Unidos legalmente y sin correr ningún peligro.

Proceso ágil

El nicaragüense ya es ciudadano estadounidense y el 15 de enero llenó la aplicación en línea, en U.S Citizencenship and Inmigration Servicessolicitando ser el patrocinador de sus dos hermanos. Antes de hacerlo, se informó debidamente sobre el tema, con los tutoriales que compartieron abogados de Migración en la plataforma YouTube.

Una vez completado el proceso, en el que hacen preguntas como cuándo viajarían los beneficiados o cuánto tiempo estarían en el país norteamericano, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS) le notificó, mediante un correo, que había recibido las dos solicitudes y que empezaría a “estudiarlas”; al mismo tiempo le compartieron el número de los casos.

Ocho días después, USCIS se contactó vía correo electrónico con los hermanos de López, quienes están en Nicaragua, y les brindaron los pasos a seguir para constatar la información brindada por el patrocinador.

“Cuando enviaron todo (como número de pasaporte), una hora después, ellos recibieron la autorización de viaje. Así de sencillo fue el proceso”, insiste López.

Según el ciudadano, las autoridades estadounidenses brindan 90 días para que los beneficiados concreten el viaje. López estaría junto a sus hermanos antes del 24 de abril de este año.

“El formulario es fácil si tenés listo los documentos, la información a mano del patrocinador y del beneficiario. El peor obstáculo que puede encontrar la gente, creo, es al hacer la aplicación y tener que enviar el documento escaneado y en formato PDF. También hay algunos términos legales un poco confusos, pero que lógicamente con la ayuda de la tecnología, uno los puede superar“, destaca López.

No pierdan la fe

López anima a los nicaragüenses radicados en Estados Unidos a “no perder la fe” en el parole humanitario, ya que debería verse como un beneficio para sus familiares, o personas que merezcan esta oportunidad, y no como algo negativo.

Lea también: La historia de una de las primeras nicaragüenses beneficiadas con el parole humanitario de EE. UU.

“Mucha gente no tiene fe en el programa, pero si hacemos las cosas bien y de la manera que Migración quiere que se haga, hay respuesta positiva. La mayoría estamos negándoles la oportunidad porque decimos que este (el beneficiario) se va a meter a un problema y será un problema para mí. Pero hay que ayudarle a alguien que creamos que no nos va a meter a problemas. Los nicaragüenses tenemos que darnos la mano, por un asunto de humanismo”, reflexiona López.

Por ahora, los hermanos de López deben prepararse para el viaje y decidir cuándo tomarán el vuelo que los lleve a Estados Unidos.

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