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El Estadio Nacional Dennis Martínez fue inagurado en 2017. ARCHIVO

La historia de “la casa del juego perfecto”

La pareja presidencial pasó de alabar a Dennis Martínez a borrarlo de la infraestructura deportiva más importante en Nicaragua. Este estadio fue testigo de la brutal represión en 2018 y antes de iniciar las construcciones el régimen desvió los fondos destinados para su construcción.

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La tarde del domingo 28 de julio de 1991, los nicaragüenses escuchaban expectante la Radio Nicaragua para conocer como transcurría el juego entre los Dodgers y Expos de Montreal, mientras en la ciudad de Los Ángeles, Dennis Martínez ejecutaba la hazaña denominada “juego perfecto”.

Dennis Martínez se convirtió esa tarde en el decimo tercer jugador de beisbol -y primer latinoamericano- en realizar la extraordinaria proeza. En honor a su destacada carrera como beisbolista el Estadio Nacional del país fue inaugurado con su nombre. Sin embargo, la dictadura de Daniel Ortega en días recientes ha eliminado el nombre de este exjugador de grandes ligas al estadio.

“Hace dos años atrás inicié una campaña para que se le cambiase el nombre al ahora Estadio Nacional, así a secas, nada de Dennis Martínez, y créanme que con mucho gozo celebro que el deseo mayoritario de los nicaragüenses y en especial de los managuas hoy sea una realidad porque una belleza infraestructural y deportiva como esa”, escribió el periodista oficialista Moisés Absalón Pastora, en un artículo de opinión para El 19 Digital

Pero esta no es toda la historia detrás de este estadio de lujo que cumple con estándares de Grandes Ligas. Destaca por su club house, las luces, el terreno de juego, dogouts, la facilidad de acceso, los equipos de sonidos, la visión óptica, la comodidad, la sala de prensa y conferencia, y la capacidad para albergar a un poco más de 15 mil aficionados.

Archivo La Prensa

Malabares con la donación para el Estadio

El 31 de julio de 2013, la entonces embajadora de Taiwán, Ingrid Hsing firmó un convenio por treinta millones de dólares con Marlon Torres, director del Instituto Nicaragüense de Deportes, con el fin de construir el estadio de beisbol.

Dos años después, el 12 de enero de 2015, Ortega de imprevisto anunció -a como le caracteriza, sin aclarar detalles- que los fondos que originalmente eran para la construcción del estadio serían destinados para la construcción de una ciudadela, que hoy conocemos por Ciudad Belén. Un proyecto que nació para albergar a personas afectadas por desastres naturales, pero se conoce que los beneficiarios son simpatizantes del Frente Sandinista.

Aunque el gobierno de Taiwán “aprobó” el desvió presupuestario, según los diputados opositores de la época y especialistas financieros, ese movimiento por parte de Ortega reveló el manejo inapropiado y la poca transparencia con los millonarios recursos que eran donados por Taiwán.

Taiwán se había convertido en los últimos tiempos en el principal donante de la dictadura, hasta el pasado 9 de diciembre de 2021 rompió relaciones con Taiwán y las inició con China continental. El canciller de Nicaragua, Denis Moncada, anunció que Nicaragua solo reconoce que existe una sola China: la República Popular China y Taiwán es parte “inalienable del territorio chino”, citaba parte del comunicado oficial.

“Es con gran pesar que terminamos las relaciones diplomáticas con Nicaragua. La amistad de larga data y la cooperación exitosa que beneficia a la gente de ambos países fueron ignoradas por el gobierno de Ortega. Taiwán permanece firme y continuará como una fuerza para el bien en el mundo”, respondió Taiwán.

Planos del estadio presentados por Fidel Moreno / Archivo O. Navarrete

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Periodistas declarados Non Gratos en el Estadio

En 2018, la administración del Estadio Nacional prohibió el acceso a los cronistas deportivos Miguel Mendoza que trabajaba en Radio La Primerísima, actualmente privado de libertad de la dictadura orteguista, y Yader Valle, periodista de Radio Corporación.

La administración del estadio afirmó que Mendoza estaba levantando “falsas e infundadas acusaciones contra el personal del nuevo estadio”, durante el contexto de las protestas de 2018, además la carta donde se le comunicó la decisión afirmaba que “sus campañas de falsedades, odio e infamias afectaron la programación de eventos internacionales, al extremo de obligar la cancelación de los mismos”.

A Valle lo acusaron de promover “afectaciones a los trabajadores de las instalaciones deportivas”. Estos cronistas deportivos ocuparon sus redes sociales durante el contexto represivo para denunciar los abusos de los cuales estaban siendo víctimas los nicaragüenses por protestar contra la dictadura.

Miguel Mendoza lleva detenido casi año y medio en una celda de Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocido como Nuevo Chipote. Fue condenado a 9 años de prisión por el supuesto delito de “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional”.

Avances de la construcción del estadio presentados por Fidel Moreno/Archivo O. Navarrete.

Utilizado para reprimir

Este estadio fue utilizado como base militar de los agentes de la Policía Nacional e integrantes de la Dirección de Operaciones Especiales Policiales (DOEP), para reprimir a los manifestantes en los primeros meses de contexto represivo en 2018.

Los jóvenes que protestaban contra las autoridades desde la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) y en los alrededores afirmaron que el estadio era utilizado como base de operaciones de los grupos represivos afines al gobierno y era por eso por lo que podían tener “una mejor visión”, para disparar a la universidad.

Asimismo, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes documentó que los disparos que ocasionaron la muerte de ocho participantes de la “madre de todas las marchas”, fueron ejecutados desde el Estadio Nacional.

“No es ningún honor que el cuartel, perdón, el estadio de donde se disparó y mató lleve el nombre del mejor beisbolista de Nicaragua. Si fuera Dennis Martínez me adelanto a campaña orteguista y mandó carta exigiendo que borren mi nombre del estadio manchado de sangre. Sería un golpe certero”, expresó Miguel Mendoza a través de Twitter.

Jóvenes se manifiestan enfrente del Estadio Nacional el 30 de mayo de 2018/Archivo O.Navarete
Luego de la denomina protesta “Madre de todas las marchas”, agentes de la Policía atacaron a los manifestantes/ Archivo O. Navarrete
Jóvenes protestantes huyen de los ataques de la Policía/ Archivo O. Navarrete
Los manifestantes denunciaron que los disparos provenían del Estadio Nacional/ Archivo O. Navarrete

Sin comerciantes tradicionales

Luego de la inauguración del nuevo estadio, los comerciantes que trabajaban en el antiguo estadio afirmaron que no pudieron seguir sus ventas en la obra deportiva debido a los altos costos que la administración les estaba solicitando.

Los vendedores relataron que para poder trabajar en la recién inaugurada infraestructura tenían que pagar un alquiler de 600 dólares mensuales, pagar sus facturas de agua y luz eléctrica y, además, tenían que construir sus propios módulos bajo los estándares que la administración solicitaba.

Muchos de los vendedores que laboraron más de 15 años en el antiguo estadio tuvieron que rehacer su vida laboral, debido a que no podían costear los gastos que las autoridades solicitaban.

Fanáticos hacen fila fuera del estadio poco después de su inauguración/ Tomada del 19 Digital .

Otros datos curiosos

En el acto inaugural del estadio que antes llevaba el nombre del ex big leaguer, este lanzó la primera bola. Describió este momento como algo increíble y no dudó en afirmar que no se comparaba con nada de su vida deportiva, siendo aún más emocionante que cuando realizó su juego perfecto.

Martínez aprovechó la ocasión para obsequiarles a Daniel Ortega y Rosario Murillo la camisa oficial de los Expo de Montreal, con la que jugó el famoso partido que inmortalizó la carrera de este nicaragüense.

“Es una emoción y sobre todo reconocimiento y expresión nuestra de respeto para Dennis, para su familia y expresión nuestra también de reconocimiento de esta raíz nicaragüense que nunca abandona a Dennis Martínez, por eso lo sentimos gloria nacional, orgullo de nuestro país, pero además historia y futuro porque está creando futuro en el beisbol, en el deporte para nuestra Nicaragua bendita y siempre libre”, fueron las palabras de Rosario Murillo al recibir el obsequio, y antes de ver a Dennis Martínez como enemigo de su presidencia.

El ex lanzador nicaragüense de las Grandes Ligas de Béisbol Dennis Martínez junto al dictador Daniel Ortega en el acto inaugural del Estadio Nacional/ AFP

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